Jugadores hay de sobra; quizás no para ser campeones del mundo, pero sí para ser un equipo serio.
Esta selección no tiene trabajo, menosprecia la técnica individual y no repara en las características de los jugadores para hacerlos complementarios. Ah, y se basa en lo que dice la fraternidad del periodismo obsecuente, tanto del DT como de jugadores que aparentan muchísimo más de lo que producen, caso Tévez (¿hizo algo en la selección, más allá de correr al 3 alemán en 2006?) y Verón (dos mundiales y la última Copa América sin pena ni gloria). Ni hablar de las campañas vacías que montan, caso “no se puede jugar con 3 delanteros, ¿pero que les parece un medio con Cubero, Masche, Battaglia y Braña?”
Mientras sigamos pensando en que correr (algo necesario) es mucho más importante que jugar, jamás le vamos a encontrar la solución a varios problemas ¿Por qué Zanetti y Heinze son los laterales argentinos y en Brasil sobran los Maicon, Dani Alves, etc? Simple, porque ellos respetan su identidad, mientras nuestros entrenadores, en el torneo local, en nombre vaya a saber uno de qué, se la pasan reconvirtiendo a los centrales en marcadores de punta. Todo sea en nombre del cero en el arco propio, como si por empatar sin goles te dieran 3 puntos…
¿Tan díficil era saber que Brasil es un equipo peligroso de arriba? Parece que sí, que era tarea para Los Simuladores o la SIDE. Ningún jugador titular de Argentina supera el 1,85 mts. El más alto era Verón, que precisamente no se destaca por cabecear.
¿Tan jodido es entender que cuando Messi recibe la pelota en Barcelona tiene 5 veces más opciones para descargar un pase de las que le ofrecen en la selección? Por delante de su posición, tiene a Henry y Slatan (antes a Eto’o), cortando permanentemente al borde del área grande, tiene a Xavi e Iniesta, y ganando la banda, le aparece Dani Alves. En cambio, en la selección, cada vez que arranca, deja atrás a todo el equipo y solamente tiene como referencia al pseudo 9 que Maradona condene a jugar de espaldas contra los centrales rivales.
¿Tan complicado es comprender que ni Tévez, ni Aguero, ni Lisandro son referentes de área? La selección necesita de Messi y dos puntas, y que uno tire diagonales para arrastrar marcas.
¿Por qué se diseñó un mediocampo en el que ningún jugador tiene la particularidad de llegar al área rival con pelota dominada? Lo mejor de Maxi es la media distancia y el pique al vacío, pero jugó tan abierto y tan adelantado que no tuvo sorpresa y simplemente chocó. Cada vez que Dátolo se cerraba, ¿con quién dialogaba, si no había ni enganche ni delantero que pivoteara ni Verón se adelantaba? Ah, por si fuera poco, el lateral que pasaba como un avión (de papel) por su espalda era Heinze.
Verón, que no es de mis favoritos, en Estudiantes tiene una referencia de área, como Boselli. Messi también las tienes, así como Maxi tiene dos hombres de punta en el Aleti o Dátolo lo tenía en Boca. Sin embargo, Argentina juega sin 9 ( y sin 10, sin 3, etc).
En fin, este equipo y este cuerpo técnico se llevan a marzo y previas muchas materias, pero, a este ritmo, dibujo la van a terminar de rendir en su cuarta reencarnación.
hasta hace poco era bastante parecido
carrizo-demichelis-mascherano si pone a higuain de 9 podriamos completarl
[/QUOTE] Higuain o Crespo, mas Saviola o Dale Sandro o Aimar o etc, etc,… pero todo bien, hasta que llego el Drogado…
[b] [EMAIL="darcucci@lanacion.com.ar"]darcucci@lanacion.com.ar[/EMAIL] [/b]06 de Septiembre de 2009 - [b]01:06
[/b]
ROSARIO.- Dos horas antes de comenzar el partido, cuando una brisa leve empezaba a traer aire más fresco del río y el Gigante no entregaba una imagen más cálida que la del Monumental, llegaban para la Argentina de Maradona noticias que, al menos en un aspecto, parecían quitarle libras de presión al duelo que estaba por afrontar: las sorprendentes derrotas de Ecuador y de Uruguay la dejaban en el cuarto puesto, en zona de clasificación, antes de empezar a jugar.
Sin embargo, el favorable dato estadístico no alivianaba ni un poco el [b]enorme peso del trascendental duelo contra Brasil: seguía siendo un examen, el más exigente que Diego hubiera afrontado como DT del seleccionado.
Sus apuestas, muchas, se ponían en juego... [/b]
[b]Apostó, junto con los jugadores, a este estadio. Pero el marco y el ambiente fueron los mismos porque el equipo fue el mismo: quedó más que claro que no es la gente la que "pone a Brasil contra un arco", sino un equipo capaz de jugar algo más que 45 segundos como lo hizo la Argentina en esa ilusionante y distinta jugada inicial. [/b]
Apostó a Domínguez para acompañar a su jugador revelación, Otamendi. Pero así como en Vélez son capaces de liderar juntos una defensa, en su equipo son capaces de quedar en evidencia junto con los demás, cuando el desconcierto y hasta la imprevisión permitieron esas jugadas brasileñas de pelota parada que hicieron tanto daño como los puñales de La Paz.
Apostó a Verón como conductor.Pero es improbable que Sebastián -que se ganó la más impensada reivindicación al final- pueda sostener físicamente el esfuerzo al que lo somete un funcionamiento que se descontrola ante la primera adversidad. Apostó a Tevez “luchándolos” y a Messi “encarándolos”.Pero lo primero se diluye rápidamente, barullo, y lo segundo no termina de conectarse aquí con la misma electricidad ni parece encontrar la comodidad.
[b]Antes del partido contra Rusia, para Diego todo era un "caos".[/b] Pero [b]después, todo era "posible"[/b]. [b]Cuando empezaron a lesionarse jugadores en serie[/b], para Diego[b] eran "días de lluvia"[/b]. [b]Cuando todos llegaron a Ezeiza, había vuelto a "salir el sol". [u][i]Así de ciclotímico es su equipo, donde todo parece pender de un hilo. [/i][/u][/b]
El gol de Dátolo, a los 19 minutos del segundo tiempo, fue la consecuencia de un arresto individual, en el contexto de un equipo que buscaba como podía, basándose en el temperamento. El gol de Luis Fabiano, a los 22 minutos, fue la consecuencia de una jugada colectiva de un equipo que hace tiempo encontró su identidad y muestra una solidez técnica, táctica y física que intimida.
[b]La distancia entre la jerarquía de Brasil y de la Argentina es la que marcan los resultados de ayer, de anteayer y de un poco más atrás:[/b] no parece ser casual, no lo es, que [b]de los últimos cinco partidos los brasileños hayan ganado cuatro y hayan convertido 13 goles, mientras por el lado argentino hay que conformarse con un aceptable empate en cero y apenas 2 goles. [/b]
[b]Al final de la noche,[/b] ya definitivamente fría, [b]no se advertían demasiadas diferencias entre el Gigante y el Monumental. Seguramente porque no las hay entre el equipo que jugaba en Buenos Aires y el que jugó en Rosario. [/b]
Al final de la noche, todos hacían cuentas para ver si el Mundial estaba más cerca. Nadie dudaba de que el equipo todavía está lejos.
[b]No tuvo una buena noche, abusó de su individualismo y mostró una imagen deslucida; Kaká sí fue influyente y fue el dueño del duelo de figuras en Rosario [/b]
[b] Por Santiago Peluffo
Enviado especial [/b]05 de Septiembre de 2009 - [b]23:42
[/b]
Los dos 10 tuvieron un partido bien distinto
ROSARIO.- El gran choque entre la Argentina y Brasil llevaba, implícito, otro duelo: el de Messi vs. Kaká. Fue apenas un aperitivo para la previa. Dentro del campo de juego del Gigante de Arroyito, no hubo equivalencias.
[b]Con mucho más oficio para esta clase de partidos, Kaká (70 partidos con la verdeamarela, contra 40 actuaciones del rosarino con la celeste y blanca con apenas 22 años) mostró mucha más serenidad y aplomo para llevar adelante un cotejo de estas características. Fue menos participativo que Messi, pero gravitó infinitamente más.
Lionel[/b] comenzó asumiendo un rol protagónico, asociándose con Verón en el mediocampo, pero poco a poco fue cayendo en su individualismo y su imagen comenzó a deslucirse. Del otro lado, Kaká tocaba pocos balones, pero siempre generaba daño en la insegura defensa argentina. Con sus pases, fue artífice de dos de los tres tantos brasileños. Messi quedó en deuda.Jugó su primer partido oficial en Rosario y defraudó.Al punto de que algunos plateístas terminaron insultando al niño mimado de la ciudad… Todavía no encuentra esa estructura que lo cobija en Barcelona. Esos socios que le dan una mano en ataque. Se siente perdido y se nota. Por eso abusa de su juego individual.
El duelo no existió dentro de la cancha. Kaká demostró su clase, su toque, su experiencia.Messi tiene mucho recorrido por hacer aún con la celeste y blanca. Está lejos del “hombre” que Maradona necesita que sea para su equipo.
Buena mirada de Arcucci, lo dijo en la TV el otro día, no coincide con la ciclotimia de Maradona, que desde el Partido vs Rusia, se venía el mundo abajo, pero el martes, después de la práctica vs Tristán Suárez, estaban todos al 100%, que hasta “Bilardo podía entrar de titular…”
Y de lo otro, insisto, Kaká, es un ju-ga-do-ra-zo!!! crack por donde lo miren, un jugador de equipo y para su equipo. Quedó en evidencia que cuando se pone el equipo al hombro lo hace. Messi, en la selección, sin el mismo apoyo de sus compañeros que tiene en Barcelona, por ahora no está en condiciones de hacerlo.
Los ultimos partidos de Masche en la seleccion no fueron buenos, pero contra Brasil directamente fue malisimo, no paro a nadie, Kaka lo paso cuantas veces quiso y parado, lo note como lento y fuera de tiempo a Masche, alguien sabe si estaba bien desde lo fisico???, porque hsat estaba lento, fuera de tiempo, no anticipo nunca, en fin parecia Ahumada con eso digo todo.