Siguiendo con la analogía de la casa, entonces: no es lo mismo pedirle plata prestada a tu hermano, que pedirle un crédito al HSBC. Sí, ambas son deudas, y ambas hay que pagarlas, claro, pero tu tío no te va a dejar en la calle, ni te va a embargar el auto que usás para laburar, ni te va a embargar la cuenta sueldo.
Después, lo de la moneda no merece ni discusión: deuda interna no te condiciona las políticas que vas a poder llevar a cabo los próximos años, el FMI sí, te pone condicionamientos, te obliga a aplicar las políticas que considere adecuadas para asegurarse cobrar lo que te prestó. No le importa en lo más mínimo las consecuencias de esas políticas. Con la deuda interna, mantenés tu capacidad de decidir cuales son tus prioridades, y que gastos decidís sacrificar para pagar esa deuda, no te lo imponen desde afuera.
Después, por supuesto que al endeudarte en dólares, estás atado a que cualquier movimiento en la cotización del dólar por motivos externos te haga la deuda aún más impagable, porque como bien dijeron por ahí, es una moneda que vos no emitis, que en Argentina es escasa históricamente, y que la necesitás para importar insumos para la producción.
Otra, el argumento de “entonces la vas a pagar con emisión, que los que mas sufren son los pobres” es un intento de lavado de cara al macrismo. Porque en caso de que no puedas pagar la deuda, defaultees y devalues, quien la va a pagar ? Los ricos ? O los pobres no sufren por las devaluaciones ?
En definitiva, ambas deudas son importantes, claro, pero hay una diferencia cualitativa abismal entre una y otra.