Ya están los puestos, faltan los dólares…
Astrada pretende a un goleador, un zaguero, un lateral izquierdo y un carrilero. El Kaiser le prometió los cuatro refuerzos, pero con austeridad: buscarán préstamos.
Pocos ratos libres figuran en la agenda de Daniel Passarella. Aunque en su plataforma de campaña tenía su plan para los primeros 100 días, el nuevo presidente se divide sus horas en el Monumental entre lo planeado y lo inesperado. Y entre reuniones para definir los cargos y llamados para autorizar movimientos en la caja del club, el Kaiser dejó para el final su encuentro con Leonardo Astrada. Fueron casi tres horas de charla en la que también participaron Hernán Díaz, el ayudante del Jefe, y Diego Turnes, el vicepresidente primero. Revisaron los nombres de los futbolistas que el técnico no tendrá en cuenta, se comunicaron con Matías Almeyda para cerrar la sede de la pretemporada y luego sí, le dedicaron gran parte del encuentro a definir los cuatro refuerzos.
Astrada le comentó a Passarella que se conforma con un solo delantero. Eso sí, tiene que ser un goleador. El técnico cree que con Ortega, Buonanotte, Rosales, Villalva y la aparición de Funes Mori está cubierto para acompañar en el ataque. Pero necesita goles. Descartado el paraguayo Velázquez, el presidente cree que Joaquín Boghossian (11 gritos en el Apertura) es el hombre indicado, aunque suena complicado que Newell’s lo ceda a préstamo, ya que la idea de la nueva conducción (por convicción y por obligación debido a la situación financiera) es no hacer grandes erogaciones. Luciano Figueroa es otro nombre que está en carpeta mientras no bajan los brazos por Darío Cvitanich, quien todavía no firmó con Pachuca. Ahí podría aparecer la figura de Antonio Caselli, quien ya había iniciado las gestiones por el delantero del Ajax.
La decisión del Jefe de resignar un punta entre los refuerzos es porque prefiere sumar un lateral izquierdo. Juan Manuel Díaz, de Estudiantes, podría ser una opción mientras no descartan recuperar a Maximiliano Oliva, hoy en Tigre. El otro puesto prioritario para Astrada es el del marcador central. Insaurralde, uno que sonó, no estaría en los planes. Y aunque la idea es que sea zurdo, cuando recibieron un llamado para ver si les interesa el Cata Díaz enseguida respondieron que sí. Y el cuarto refuerzo que pretende el técnico tiene que ser un carrilero, preferentemente que se adapte a moverse por cualquiera de las bandas. ¿Nombres? Passarella tiene un grato recuerdo de Walter Erviti, al que dirigió en Monterrey. Sin embargo, en Banfield no lo piensan largar. Se mencionó a Osmar Ferreyra, pero los costos del Malevo no encajarían en el presupuesto de River, que justamente no será millonario.
El Kaiser encontró una caja flaca de billetes y gorda en cheques por pagar. Y aunque le prometió a Astrada los cuatro refuerzos, la clave estará en el precio. Eso sí, nada de falopa, como le gustaba decir al presidente. Por eso ya descartó más de una docena de “ofrecimientos berretas que nos hicieron”.
Fuente: Ole