Antes de ingresar a esta nota, por favor despójese de toda influencia externa, prejucios y, si puede, abandonar por un segundo la pasión -y ansiedad- que River genera. ¿Cómo calificaría la campaña del Millonario? Ahora sí, entre, lea y comente.
No hay tranquilidad, es cierto. Nadie se puede relajar. El Millonario está en ese incómodo lugar de ser mucho para la categoría en la que -por única vez en su historia- juega y estar obligado a ascender. Además tiene la presión de tener que luchar para alcanzar a Instituto casi con la misma intensidad que debe pugnar para no ser pasado por Quilmes, lo que supondría salir de los puestos de ascenso directo.
En ese panorama, está claro, los pelos se erizan, los nervios afloran y la crítica está ahí de ser consumada. “Vivimos caminando al filo del cuchillo”, dijo Matías Almeyda alguna vez. Solo falta una jugada desafortunada, un pase corto, una decisión arbitral para sacar a relucir todas las penas de una herida que se produjo hace más de nueve meses y que aún no cierra -quizá nunca lo haga-.
Así está el hincha. Pero, ¿cómo está River? La vara es el campeonato pasado. Ahí es donde hay que medirse. Esa tabla, la de la temporada 2010/2011 tiene todas las respuestas sobre lo que pasó. Atlético de Rafaela fue campeón y junto con Unión, el subcampeón, ascendieron a Primera División. En tercer lugar terminó San Martín de San Juan (ascendió por promoción) y cuarto quedó Belgrano y su historia es -nefastamente- conocida.
¿En qué andaban los ascendidos en la fecha 27? La cima del campeonato tenía dos dueños, los que finalmente ascendieron. Los equipos santafecinos lideraban el campeonato con 54 unidades. El conjunto de Rafaela había llegado a ese lugar de privilegio con 16 victorias, seis empates y cinco derrotas (con 42 goles a favor y 17 en contra). El Tatengue tenía 17 triunfos, tres igualdades y ¡siete derrotas! (36 tantos a favor y 23 en contra).
La comparación es inevitable. Hoy, River está segundo. Tiene 52 puntos, tan solo dos menos, producto de 14 victorias, 10 empates y sólo tres caídas. En los empates está la cuestión. Y, además, cuenta con ¡51 goles a favor! y nada más que 20 en contra.
El líder es Instituto con 55 y la tabla ya comienza a explicar porque la desesperación.
Pero lo más llamativo sucede atrás. ¿Por qué se siente tanto la presión si Rafaela y Unión, con sólo dos puntos más que River, vivían en el limbo? Es simple, San Martín de San Juan tenía tan sólo 43 puntos. En el campeonato actual estaría cuatro puntos por debajo de Rosario Central, el último de los vinculados con las posiciones de ascenso. Mientras que Atlético Tucumán, el cuarto en discordia en esta etapa del campeonato pasado, tenía 42 unidades y estaba a 12 de rasguñar un ascenso directo.
Hoy no dan tregua. Quilmes y Central ganan casi siempre y están a tres y cinco puntos del Millonario, respectivamente.
¿Y Belgrano? Lejos… El equipo cordobés tenía apenas 35 puntos y estaba noveno (hoy estaría 12°). Lo raro sucedió después y el Pirata realizó una gesta histórica hasta ganarse un lugar en Promoción.
Esto último indica que todo puede pasar, que mejor estar precavido. Lo cierto es que River, en los puntos, está haciendo una campaña notable. Lo dice la tabla: Es un puntaje de ascenso. Y, a menos que suceda algo raro, sigue en esa senda de la que jamás salió en 27 fechas.
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