Una buena

Despues de leer tantas noticias como la de los chicos esos que mataron al perro, o la de la otra vuelta que habia una nena tirada en el piso y nadie la ayudaba y todos le pasaban por al lado, estas cosas reconfortan la verdad. Increible

Walter Sacco se emociona cuando recuerda la historia. Este tornero de 49 años, que publicó una carta de lectores en LaCapital donde comentaba que el Renault 12 que utilizaba para…

Walter Sacco se emociona cuando recuerda la historia. Este tornero de 49 años, que publicó una carta de lectores en LaCapital donde comentaba que el Renault 12 que utilizaba para transportar a su hijo discapacitado había sido robado, recibió una de las mejores noticias de su vida: un ciudadano común y corriente, simplemente Matías, se enteró de su situación y decidió entregarle un Fiat Super Europa 87, ponerlo a su nombre y decirle “disfrutalo, es tuyo…”. Así nomás.
En su taller de San Luis al 5400, el mismo que abrió su padre allá por 1962, Walter recibe a este diario. Está casado con Silvia y tiene tres hijos: Paola, de 26; Jonathan, de 16 y un excelente basquetbolista según las “malas lenguas”; y Juan Pablo, de 13, quien padece una parálisis cerebral debido a un problema de nacimiento.
Hace una semana Sacco publicó una carta de lectores en este diario donde contaba que el 8 de noviembre, frente al domicilio ubicado en Montevideo 250, le robaron su Renault 12 gris. En el texto relataba que el vehículo era utilizado para trasladar a su hijo a la escuela especial a la que asiste. No pedía ayuda, no pedía dinero, sólo datos del auto.
“Juan Pablo nació con el cordón anudado al cuello. En su momento se trató, lo dejaron pasar y el nene quedó así. Va a una escuela especial que se llama Rayuela pero está postrado, no habla. La vida nos pegó fuerte, mal y había que llevarla adelante. Todo empezó a moverse alrededor de él con amor. Hicimos muchos sacrificios, pasamos noches sin dormir y siempre necesitamos una movilidad. Hasta que hace tres años pude comprar el Renault 12 modelo 81, el primero que tuve en mi vida. Básicamente el auto era para sacar a pasear a Juan Pablo”, recuerda Sacco.
“Lamentablemente -evoca- la vida me pegó otro palo más y hace tres semanas me robaron el auto. Fue un martes, un día de una gran tormenta, frente a Montevideo 250. No tiene un valor muy grande, pero para mí fue como si me quitaran las piernas. Llamé a la policía, vino a los 45 minutos. Me asusté porque estaba muy mal y les pedí a los agentes que me llevaran a la seccional 1ª a hacer la denuncia. Me dijeron que fuera caminando, que estaba cerca”.
Cuenta entonces que decidió escribir una carta de lectores en LaCapital. “Lo único que puse fueron los datos del auto. Conté que me lo habían robado y que lo usaba para trasladar a mi hijo discapacitado, y pedí que si alguien sabía algún dato me avisara. A los pocos días me llamó una persona, Matías, alguien que no conozco, que no sé quién es ni a qué se dedica, y que me dijo que tenía un auto parado hacía un año, con seguro al día, revisión técnica vehicular en orden, y que quería hacer una obra de bien y ponerlo a nombre mío. Me dejó helado, no sabía si era una broma o qué. Le dije que no tenía problemas, que yo se lo quería pagar y el insistió y me dijo que eso lo charlaríamos más adelante”.
Misterioso.El lunes pasado fueron al Registro del Automotor y Matías —un joven al que Sacco definió como “de unos 35 a 40 años y muy agradable”— hizo toda la papelería para hacer la transferencia. “Yo no había dormido en toda la noche, estaba muy nervioso porque no sabía qué era todo esto. No faltó un solo papelito. Preguntó si yo tenía que pagar algo más, le dijeron que no, preguntó cuánto era el costo de la transferencia, la abonó, no me dejó poner un peso. Salimos del registro, me dio las llaves y me dijo: «El auto es tuyo, usalo y disfrutalo»”, recuerda todavía shockeado. El Fiat 128 blanco llegó con el tanque lleno, un tubo de gas lleno y cubiertas nuevas. “Está impecable, prácticamente es de colección”, se entusiasma.
Sin preguntas.Explica que no se animó a preguntarle el porqué del gesto y si en algún momento de su vida le había pasado algo parecido a lo que a él le tocó vivir con Juan Pablo. “No lo hice porque puede haber algo atrás que lastime. Pero personas como Matías hay pocas en el mundo. A mí este muchacho me devolvió las piernas, la alegría. No me va a alcanzar la vida para agradecer lo que esa familia y ese muchacho hicieron por mí, y sobre todo por Juan Pablo”, dice entre lágrimas.
“Lo único que le dije —abunda— es que ojalá un día pueda conocer a Juan Pablo. Porque no es joda esto. Y el me dijo que sí, que con mucho gusto. Yo soy muy creyente y creo que en mi vida apareció un ángel: este muchacho que se me cruzó en el camino”.

La conmovedora historia solidaria que surgió tras el robo de un auto - La Ciudad - LaCapital.com.ar

Ojala hubiera mas personas asi.

Despues de leer tantas noticias como la de los chicos esos que mataron al perro, o la de la otra vuelta que habia una nena tirada en el piso y nadie la ayudaba y todos le pasaban por al lado, estas cosas reconfortan la verdad. Increible

Walter Sacco se emociona cuando recuerda la historia. Este tornero de 49 años, que publicó una carta de lectores en LaCapital donde comentaba que el Renault 12 que utilizaba para…

Walter Sacco se emociona cuando recuerda la historia. Este tornero de 49 años, que publicó una carta de lectores en LaCapital donde comentaba que el Renault 12 que utilizaba para transportar a su hijo discapacitado había sido robado, recibió una de las mejores noticias de su vida: un ciudadano común y corriente, simplemente Matías, se enteró de su situación y decidió entregarle un Fiat Super Europa 87, ponerlo a su nombre y decirle “disfrutalo, es tuyo…”. Así nomás.
En su taller de San Luis al 5400, el mismo que abrió su padre allá por 1962, Walter recibe a este diario. Está casado con Silvia y tiene tres hijos: Paola, de 26; Jonathan, de 16 y un excelente basquetbolista según las “malas lenguas”; y Juan Pablo, de 13, quien padece una parálisis cerebral debido a un problema de nacimiento.
Hace una semana Sacco publicó una carta de lectores en este diario donde contaba que el 8 de noviembre, frente al domicilio ubicado en Montevideo 250, le robaron su Renault 12 gris. En el texto relataba que el vehículo era utilizado para trasladar a su hijo a la escuela especial a la que asiste. No pedía ayuda, no pedía dinero, sólo datos del auto.
“Juan Pablo nació con el cordón anudado al cuello. En su momento se trató, lo dejaron pasar y el nene quedó así. Va a una escuela especial que se llama Rayuela pero está postrado, no habla. La vida nos pegó fuerte, mal y había que llevarla adelante. Todo empezó a moverse alrededor de él con amor. Hicimos muchos sacrificios, pasamos noches sin dormir y siempre necesitamos una movilidad. Hasta que hace tres años pude comprar el Renault 12 modelo 81, el primero que tuve en mi vida. Básicamente el auto era para sacar a pasear a Juan Pablo”, recuerda Sacco.
“Lamentablemente -evoca- la vida me pegó otro palo más y hace tres semanas me robaron el auto. Fue un martes, un día de una gran tormenta, frente a Montevideo 250. No tiene un valor muy grande, pero para mí fue como si me quitaran las piernas. Llamé a la policía, vino a los 45 minutos. Me asusté porque estaba muy mal y les pedí a los agentes que me llevaran a la seccional 1ª a hacer la denuncia. Me dijeron que fuera caminando, que estaba cerca”.
Cuenta entonces que decidió escribir una carta de lectores en LaCapital. “Lo único que puse fueron los datos del auto. Conté que me lo habían robado y que lo usaba para trasladar a mi hijo discapacitado, y pedí que si alguien sabía algún dato me avisara. A los pocos días me llamó una persona, Matías, alguien que no conozco, que no sé quién es ni a qué se dedica, y que me dijo que tenía un auto parado hacía un año, con seguro al día, revisión técnica vehicular en orden, y que quería hacer una obra de bien y ponerlo a nombre mío. Me dejó helado, no sabía si era una broma o qué. Le dije que no tenía problemas, que yo se lo quería pagar y el insistió y me dijo que eso lo charlaríamos más adelante”.
Misterioso.El lunes pasado fueron al Registro del Automotor y Matías —un joven al que Sacco definió como “de unos 35 a 40 años y muy agradable”— hizo toda la papelería para hacer la transferencia. “Yo no había dormido en toda la noche, estaba muy nervioso porque no sabía qué era todo esto. No faltó un solo papelito. Preguntó si yo tenía que pagar algo más, le dijeron que no, preguntó cuánto era el costo de la transferencia, la abonó, no me dejó poner un peso. Salimos del registro, me dio las llaves y me dijo: «El auto es tuyo, usalo y disfrutalo»”, recuerda todavía shockeado. El Fiat 128 blanco llegó con el tanque lleno, un tubo de gas lleno y cubiertas nuevas. “Está impecable, prácticamente es de colección”, se entusiasma.
Sin preguntas.Explica que no se animó a preguntarle el porqué del gesto y si en algún momento de su vida le había pasado algo parecido a lo que a él le tocó vivir con Juan Pablo. “No lo hice porque puede haber algo atrás que lastime. Pero personas como Matías hay pocas en el mundo. A mí este muchacho me devolvió las piernas, la alegría. No me va a alcanzar la vida para agradecer lo que esa familia y ese muchacho hicieron por mí, y sobre todo por Juan Pablo”, dice entre lágrimas.
“Lo único que le dije —abunda— es que ojalá un día pueda conocer a Juan Pablo. Porque no es joda esto. Y el me dijo que sí, que con mucho gusto. Yo soy muy creyente y creo que en mi vida apareció un ángel: este muchacho que se me cruzó en el camino”.

La conmovedora historia solidaria que surgió tras el robo de un auto - La Ciudad - LaCapital.com.ar

Ojala hubiera mas personas asi.

:cry::cry::cry:

Me emocionó.

Emocionante por donde se lo mire, lo termine de leer con un nudo en la garganta.
Por suerte todavia queda gente de bien, son los menos, pero quedan. Y para colmo este tipo de gente no esta ni cerca de ser la que mas tiene y aun asi mira…

:cry:
Conmovedor.

Vamos carajo todavía queda gente buena!!! Pobre tipo, espero que la vida le vuelva a dar una mano a el y a matias

Tremendo, muy emocionante.

emocionante

Si, es conmovedor. Igual yo creo que hay muchísima más gente buena de lo que pensamos, y que este tipo de cosas pasan mucho más seguido de lo que suponemos.
Lamentablemente no son noticia y no tienen la trascendencia que deberían.

gente buena hay mucha, aca en este mismo foro nomas…

pasa que vende mas lo malo, lo asqueroso, lo morboso…

Tremendo, me dejó con lágrimas en los ojos. Me conmovió todo. Exclenete persona, excelente familia. Espero que aparescan más noticias así…

Uff que decir… me dejo muy emocionado y con los ojos vidriosos. :cry: :cry:
Un hermoso gesto, de una persona de bien con un corazón que vale su peso en Oro.

Todavía queda gente de bien, es para aplaudir lo de ese muchacho Matias. Lo aplaudo de pie y de mas esta decir, que ojala la vida lo recompense con lo mejor.

+11100000

Absolutamente, es asi. Siempre se ve en las movidas solidarias que los que ayudan a los que menos tienen son precisamente esos a los que les sobra poco y nada y a pesar de eso logran encontrar algo para dejarles a los que estan peor.

Excelente gesto, muy emocionante

Tal cual, estoy convencido de que hay una bocha de gente buena y solidaria que pero que no son noticia, vaya a saber porque!!!

Linda nota!!! :stuck_out_tongue:

tremendo gesto, un ejemplo.

Emocionante. Un ejemplo de persona

Me conmovió. Ojalá que nos sirva a todos de ejemplo, para ser un poco mas solidarios.

Muy conmovedor!
Este tipo de casos tendrian que ser noticia seguido,estas cosas pasan,la gente buena existe…aunque no se den a conocer!

Increible la historia. Muy emocionante.