Amanecimos con la impactante y triste noticia del trágico accidente del avión en el que viajaba el plantel, cuerpo técnico, dirigentes y periodistas del Club Chapecoense. Los mismos que hace un año visitaban el Monumental para enfrentar a River en los Cuartos de Final de la Copa Sudamericana.
La primera hipótesis de la causa del accidente es una falla eléctrica que habría sido reportada desde la tripulación de la nave.
Resulta inadmisible que estando en el Siglo XXI, y con el enorme avance tecnológico que existe, sucedan este tipo de tragedias.
Parece inexplicable, pero no lo es. Es el capitalismo el que nos arrebata el fútbol y la vida. No sólo expulsa a los trabajadores de los clubes y del acceso al deporte.También provoca esto, que hoy le pasó a Chapecoense, pero le podría haber pasado a River, a San Lorenzo y a la Selección Argentina, que hace unas semanas viajaron por la misma aerolínea.
Los responsables de que los negocios capitalistas penetren en el fútbol y en el deporte son los Gobiernos, la FIFA, la Conmebol y los dirigentes de los clubes que responden a los intereses empresariales.
Seguiremos de luto en el fútbol, en el deporte, en la juventud y en el mundo, hasta que no enterremos este régimen podrido. El mejor homenaje que le podemos hacer a las víctimas es luchar para que esto no suceda nunca más.
Desde La Naranja Riverplatense abrazamos al Club Chapecoense, a sus hinchas y a los familiares de las víctimas, como así también a todo el pueblo brasileño.
Y planteamos que el Club Atlético River Plate se solidarice poniéndose a disposición del Club Chapecoense de la misma forma que lo hizo con el Torino de Italia en 1949.
Y es que no se ve una pija. Lo único que podía ver el piloto eran los datos de los instrumentos. Igual hasta dentro de un tiempo no se va a saber que bosta pasó en realidad.
Me duele en el alma que en la manifestación de solidaridad y apoyo no nos incluyan a los socios, quizás no es el momento para criticar a la dirigencia pero esta ninguneada es grave y no puede pasar desapercibida.
Yo como socio de la institución, me solidarizo y espero que podamos hacer algo para ayudarlos.
Lamentablemente tiene algo de razon en eso de los negociados con empresas low cost, acordate del micro de Huracan en Venezuela, que supuestamente tiene que ponerlo la Conmebol, es totalmente asqueroso.Igual culpar al capitalismo, no es el momento al menos me parece a mi, ahora para decir eso.
Dicen que fue un error del piloto de acceder a retrasar el aterrizaje y qudarse dando vueltas sin el combustible suficiente. No fue culpa de un avion donde se ahorraron costos para que el capitalismo duplicará en ganancias y se riera de Fidel
Es cierto que probablemente la corrupción, los negociados, la negligencia sean patas de una enorme mesa, pero da para hacer política?, me parece que no.
Me hace acordar a las viejas que cuando ocurre algo aprovechan para hacer demagogia.
Los socios somos el club. No lo defiendo a D’Onofrio en lo más mínimo, pero en todos los clubes los socios son el club, o los dueños si querés decirle así.
Naaa, fue el capitalismo; dicen que el capitalismo tiene tres cabezas, una que escupe fuego, una que escupe hielo y una que escupe rayos, además peude hacerse invisible y que solo uno de sus pies tiene el tamaño de 7 campos de futbol reglamentarios.