Los empleados que ayer trabajaban en las oficinas de la gerencia de la AFA no lo podían creer: era la primera vez que un pedido por el artículo 225 (el que habilita a utilizar a un futbolista suspendido por otro que está afectado a su seleccionado) no era trasladado a las oficinas del Tribunal de Disciplina, que está dos pisos más arriba. Ese llamado que habían recibido una hora después de que River hizo su presentación para contar con el suspendido Jonatan Maidana daba la orden de no cumplir con un trámite que es habitual en el edificio de la calle Viamonte. Un acuerdo, un pacto, un entramado por demás especulativo o un engaño… Cualquier calificación sirve para graficar los entretelones de River-Quilmes, un partido que, como se dijo desde estas mismas líneas, se jugó tanto en lo futbolístico como en los escritorios.
River pidió el artículo 225 a las 17 y tenía tiempo hasta hoy al mediodía para hacerlo. El volante César González llegaba al país en la madrugada de hoy, luego de haber jugado en la derrota de Venezuela ante España. Por lo tanto, al haber menos de 24 horas entre su arribo y el partido, el pedido del recurso para que juegue Maidana era algo que debía prosperar. Sin embargo, anoche no fue autorizado el traslado del pedido millonario.
Los motivos se desconocen, pero entre los 32 escalones que separan la gerencia de la AFA del Tribunal de Disciplina, las especulaciones dan cuenta de un comportamiento dirigencial que sorprende. Como se había explicado, la fecha y el horario de realización del partido estuvieron en duda durante varios días, incluso se llegó a pensar en un acuerdo inviable entre las partes. Y cuando finalmente el martes pasado se fijó la fecha del partido para hoy, River aceptó darle más entradas a Quilmes (de 2000 localidades a 6500) y hasta se especuló con la posibilidad de que los dirigentes millonarios no pidieran el 225 por Maidana… Una cuestión que el técnico de Quilmes, Ricardo Caruso Lombardi, reconoció en una entrevista con TyC Sports: “Los dirigentes pactaron que Maidana no jugaba”.
Lo que quedó a la luz fue una gran puesta en escena. Una suerte de arreglo -y acto- montado entre los dirigentes de River y los de Quilmes, pues tomó fuerza el rumor de que existió un punto de encuentro entre los presidentes de River, Daniel Passarella, y el de Quilmes, Aníbal Fernández, por el que el conjunto del conurbano bonaerense aceptaba jugar el viernes a cambio de algunas concesiones. “Nosotros aceptamos jugar el viernes, pero Maidana no juega.” Y, al fin, del lado de Núñez hicieron la presentación, aun sabiendo que sus gestiones no prosperarían, para quedar bien ante sus hinchas. Incluso, trascendió que desde el club cervecero presionaron para que el árbitro sea Pablo Lunati, un juez elogiado por Caruso Lombardi durante su exposición mediática de toda la semana.
Una cuestión es concreta hasta el momento: cuesta asimilar por qué, si River hizo su solicitud en tiempo y forma, con los argumentos en su favor, no le aceptaron el pedido para que juegue Maidana, algo que no había tenido precedente desde la aplicación del controvertido artículo 225.
A menos de 48 horas de que la AFA pisotee las reglas e informe que Santiago Silva siempre estuvo autorizado a jugar el torneo Clausura para Boca, otra vez se torcieron las reglas. Otro pacto salió a la luz.
NUNCA HABÍA PASADO
Desde la aplicación del artículo 225, la AFA nunca había rechazado un pedido
HASTA ALMEYDA SE SORPRENDIÓ
Hasta Matías Almeyda fue uno de los sorprendidos con la noticia, pues el entrenador de River había trabajado toda la semana con Jonatan Maidana como titular. Ahora, Leandro González Pirez tomaría su lugar y Germán Pezzella ocuparía un lugar en el banco de suplentes. Los otros cambios en conjunto millonario son los regresos de Alejandro Domínguez y de Carlos Sánchez (cumplieron con sus suspensiones) en lugar de Rogelio Funes Mori y Martín Aguirre, respectivamente.
River-Quilmes, con olor a pacto - canchallena.com*
Ahora no me quedan dudas de que nos vacunan hoy y muchas veces mas…