Estoy leyendo Los Cuatro Acuerdos, me lo regalo una amiga y me dijo que lo leyera que me iba a hacer bien, y la verdad es que tenía razón, lo recomiendo.
estoy twerminando de leer -crimen y castigo- esta genial… lastima que no tengo tiempo de leerlo… odio tardar tanto en leer lpm… quiero mas tiempo para leer
A mí me pasó cuando me recibí, medio paradójico. Después tuve altibajos. Volví al hábito constante cuando inicié la maestría; además de apasionarme por la literatura como cuando era adolescente. No te pongás a pensar cuánto tiempo te tardás; leé, donde puedas, en el tiempo que te hagas. A mí me relaja, siempre me llevo un libro en la cartera y, a la salida del colegio, me tomo un café y leo.
Voy por la mitad de “Sobre Heroes y Tumbas” y se me está haciendo largo, no es del estilo de lectura que buscaba. Está bueno, aunque no me gusta cuando desde el principio se sabe el final y tampoco me gustan algunas partes donde se va por las ramas la naración
Recuerdo que lo leí en cuatro días, quería rendir rápido Literatura argentina; mañana, tarde y noche con el libro, terminaba con la cabeza quemada, algunos pasajes me superaban y me dejaban con un nudo en el estómago.
Claro, no es que sea feo sino que la lectura no la disfruto. Es una sensación similar a 1984, lo leía pero la nostalgia con la que escribe y ya saber como termina Alejandra me tiran abajo
Un autor argentino que tiene ese estilo nostálgico y te deja con una depresión encima es Eduardo Mallea. Brillantes sus obras, geniales pero dolorosas: “Todo verdor perecerá” te lleva directo al prozac, en serio :lol:
Hoy me devolvieron “Caín” de Saramago. Me recomendaron “Tokio blues” (tengo un amigo con el que nos pasamos los libros, y él que ha leído más que yo me recomienda cosas), pero tengo sin poder avanzar “la guerra del fin del mundo”. No se, hace poco terminé (me deboré) “Claraboya” de Saramago y no se si voy a encontrar otro autor como él. No se si Kundera tendrá algo (ya leí “la insoportable…”).
El abanico de seda me gustò porque te conecta con la cultura china, las pràcticas a las que las mujeres estaban sometidas para insertarse en la sociedad, còmo la belleza y la posiciòn social era un tema determinante.
De hecho, para defenderse y sobrevivir, las mujeres de la antigua china crean un lenguaje milenario y femenino. Bordan sus mensajes en abanicos de seda (es una tarea femenina y no estaban vigiladas cuando la llevaban a cabo).
Pero la obra abarca otras cosas màs profundas, la amistad entre mujeres, la actitud cooperativa ante el sufrimiento, el peso de la maternidad, lo que significa tener y no tener hijos (una de las protagonistas tiene un mioma y sufre constantes abortos naturales, el marido la golpea por ello). Se habla del alma gemela entre mujeres (como una amistad profunda) y ese lenguaje es su modo de manifestar la uniòn.
Flaubert enamora con su Madame Bovary, dirìa un colega mìo “la prostituta fina”. Aunque lo de Emma pasaba más por un mambo terrible que tenìa la pobre, muy condicionada por una època idealizada. Vargas Llosa en “La orgìa perpetua” la describe a la perfecciòn y hace un anàlisis de su figura de manera impecable. A él, Emma lo seduce, està perdido con ella, pero tambièn, dentro de su pasiòn reconoce que ciertos actos de la Sra Bovary son prostibularios
A mì Naoko me produjo mucha tristeza, esa tendencia depresiva, ese encierro en si misma. Midori, por el contrario, me encantò, su valentìa para enfrentar la vida, su forma de ver el mundo, de desafiarlo. Creo que fue eso lo que eclipsò al protagonista. No es que Toru no haya amado a Naoko pero en un punto confunde el amor con la culpa; èl siente que debe rescatarla pero se olvida de rescatarse a sì mismo. Midori le ofrece esa alternativa.
Ahora, mucha depresiòn, mucha depresiòn pero el protagonista no dejò tìtere con cabeza. Hasta se comiò a Reiko
Intentando terminar el 2do tomo de la trilogía Millenium. El primero me lo banqué bien porque me enganché con la trama, como si fuera una novela policial pasatista cualquiera. El segundo se está tornando infumable. No entiendo el por qué de semejante repercusión. Amén de la conflictiva social tan en boga y tan recurrente en los últimos tiempos, me está pareciendo un porquería. Peor aún. Casi que prefiero la película al libro.