El nivel Temple of Xian del Tomb Raider 2 te sacaba canas verdes, estuve su tiempo para pasarlo. Ese juego conllevaba ingenio con práctica aeróbica (?) y exploración al modo aventura.
En el San Andreas había una misión en que tenías que apuntar a varios durante un robo para que no bajen los brazos y yo la manqueaba. La tortura del Metal Gear Solid 1 no la podía pasar, te dejaba el dedo mocho. Igual era muy pibe y seguramente la onda era buscarle la técnica para ver como era, yo era atolondrado para eso y siempre me gustó entrar derecho a la acción. Igual confieso que antes tenía más paciencia y tiempo, aunque durante ésta cuarentena creí que iba a sacarle humo a la PS4 y no hay caso, apenas jugué un par de demos. Ya no soy aquel que fui entre los 10 y los 20. No me llama. Cuando se me da y vuelvo a jugar, me engancho en el momento, pero después no mantengo la línea (
) ni retomo.