Bueno, este post no es un análisis de este partido, ni está repetido (a pesar de que algunas de las cosas que decimos ya son tan repetidas que HARTAN).
A muchos de nosotros nos acusan de ser pesimistas. Eso sí, cuando las cosas se dan de acuerdo a lo que muchos vemos, somos los que esperamos que pierda River, o mejor dicho, DESEAMOS que pierda River para mostrar que estamos acertados.
Voy a hacer una analogía: River hoy en día tiene un cáncer. Y no es el Kanser. Por lo menos, no el único. Está lleno de tumores cancerígenos y purulientos. Hay unos cuantos que estamos diciendo “ya es hora de operar” y los “optimistas” están esperando que de un día al otro y por obra y gracia divina ese cáncer desaparezca. No es que hacen eso de “confiate al santo y no le recés”. Muy por el contrario, le rezan y fervientemente (léase alientan). Cuando el paciente tiene indicios de mejoría y quiere comer, dicen “vieron, yo tenía razón, no hay que operar, hay que tener fe en el Señor” (caso el 5-0 a Vélez). Eso sí, mientras tanto, el cáncer sigue carcomiéndote por dentro, y cuando dicho paciente tiene una recaída, dicen “vos esperás que se muera para demostrar que Dios no existe”.
Es una analogía, simplemente. Puse eso como podría haber puesto otra cosa, y además soy creyente.
Para mí, el único camino para que ese paciente que es River esté bien, es sencillo: darse cuenta DE UNA PUTA VEZ POR TODAS que realmente ESTÁ MAL. Leí cosas como “la cancha estaba embarradísima, era imposible jugar”. Lo cual nos da la pauta de qué tan mal estamos. MACHO, esto es RIVER. River NO LLORA por una cancha embarrada. No lo hizo la Máquina, y no me cabe la menor duda de que en tantos partidos que jugaron juntos, ALGUNA VEZ tuvieron que jugar con barro. Y con La Máquina también me refiero a Deambrosi de delantero, no solo a Muñoz - Moreno - Pedernera - Labruna - Loustau. Hubo muchos partidos que jugó Deambrosi por Loustau. Hubo unos cuantos que jugó Distéfano. También sobre el final jugó el Mono Zárate, al cual tuve el GUSTAZO de conocer y de tratar seguido: después de cortar con el fútbol se puso una carpintería y venía a comprar los aglomerados a la oficina, CON LA MISMA MODESTIA DE SIEMPRE.
River está mal. Tiene un cáncer que por suerte o gloria divina, todavía no es terminal. Pero hay que operar, y YA. La posibilidad de salvar a River es que exista una operación urgente. Y no solamente sacando a Passarella, se tienen que ir Aguilar, Domingo Díaz, Israel, Grinberg, Caselli, los Santilli, Roncagliolo (era oficialista con Davicce), Davicce, Pintado y - si es verdad que la solicitud de Extraordinarias está mal redactada - Kiper también. Como verán, no respondo a NINGUNO. Que asuma un consejo de notables. Ex-jugadores de CONOCIDA BONHOMÍA, socios (de los COMUNES), gente que… en fin, que quiera bien a River y que esté dispuesta a arremangarse. Ni Hadad ni millonarios que “sean hinchas del club” ni nada. Gente DE ADENTRO. NO SOY SOCIO, no puedo decir quien, ni tampoco puedo votar. Pero sí veo que River está podrido en serio. Y esto no pasa porque perdió hoy con Arsenal… hace rato que lo vengo viendo.
En fin… hice catarsis.
Abrazos, Martín.