Vega 7: Quizás parezca que le regalo nota porque no sacó ninguna pelota de gol, pero haber caminado el area tan bien durante todo el partido, aspecto donde manca siempre, e incluso agarrando la pelota en los centros, es digno de destacar.
Abecasis 5.5: No tomó buenas decisiones en ataque, en algunos casos porque le faltó compañía y en otros por apuro. De todas maneras, un gran sacrificio, sobre todo en el ST donde Sánchez se fue a jugar por adentro.
Pezzella 6: Cumplió. Tremenda confianza en el pie a pie con los delanteros rivales, usa muy bien el cuerpo y sabe anticipar la gambeta del rival. Dos faltas innecesarias a los costados del area y un par de pelotazos a sus espaldas donde se confió fueron sus fisuras.
Ramiro 7.5: No era fácil adaptarse al lateral en un partido donde Quilmes podía explotar las bandas, pero se amoldó muy bien. Las que entregó mal con los pies formaron parte también de una mala lectura del equipo a la hora de hacer la salida.
Pirez 5: Entró muy tenso, demasiado. Con el correr de los minutos se fue soltando y terminó el partido mostrando una mejor versión.
Sánchez 3: Hay que llevarlo a yoga para sacarle el pie del acelerador. En muchas jugadas resuelve mal por falta de criterio o imprecisión, pero en otras por querer hacer la más difícil o una en la que se luzca él por sobre los compañeros.
Ciri 4.5: De sus peores partidos en River. Más alla del ahogo que le propuso el rival y de la inoperancia de Almeyda para muñequear desde lo táctico, se tomó un tiempo más en la mayoría de sus acciones y no se reveló en los movimientos contra esa presión.
Ponzio 7.5: Comparto la lectura de Matías, y agrego que la confianza hace al jugador.
Ocampos 4.5: Otro que adoptó malas decisiones por sobre las buenas.
Domínguez 4: Muy difícil de calificar, sabiendo que jugó un partido flojísimo pero que a su vez fue el más peligroso del equipo. Tuvo 200 millones de malas decisiones, interpretó bien el juego de 3/4 en adelante, no solo desde la media distancia sino en tratar de forzar el error en los centrales de Quilmes que eran limitadísimos.
Cavenaghi 6: Para mí el mejor del equipo en el primer tiempo, resolviendo situaciones complicadas enmarañado en su soledad. Jugó bien de espaldas pero el equipo no lo supo acompañar de frente y mucho menos hacerle llegar la bola de una manera correcta.
En un partido donde se jugaron 75 minutos como quiso Quilmes y 15 como quiso River, queda claro como influyó cada DT en el trámite del juego. Uno con todas las muñecas posibles, incluso hasta para enfriar la cosa cuando se le venía la noche, mientras que el otro solo mostró movimientos de muñeca para ir a patotear.
El primer cambio era por Sánchez para pasar a Ponzio como falso volante derecho y todavía no me explico como se dio el falso lujo de guardarse una variante sabiendo la falta de ideas y de frescura que reinaba en ese ataque…