Urgente24, ‘el Gordo’ Aguilar y la sin vergüenza de Hugo Santilli
Algunas consideraciones imprescindibles sobre River Plate, antes que llegue la presentación de Hugo Santilli esta noche, con José María Aguilar en Suiza buscándose un futuro personal.
POR EDGAR MAINHARD | 13/08/2007 | 11:18
Urgente24, ‘el Gordo’ Aguilar y la sin vergüenza de Hugo Santilli
Algunas consideraciones imprescindibles sobre River Plate, antes que llegue la presentación de Hugo Santilli esta noche, con José María Aguilar en Suiza buscándose un futuro personal.
POR EDGAR MAINHARD
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Resulta satisfactorio que la mayoría de los medios de comunicación finalmente hayan reparado en los graves acontecimientos que ocurren en el Club Atlético River Plate.
No obstante, es desalentador que los colegas cronistas deportivos hayan demorado tanto en ubicar su lupa sobre el aquelarre, cuando con tanta facilidad escriben sobre frivolidades.
Cuando Urgente24 inició sus investigaciones y denuncias acerca del acontecer de River Plate, ocurría un proceso electoralen esa asociación civil sin fines de lucro, y la reacción inicial de José María Aguilar fue intimar, vía carta-documento, a Fabio Talarico, el ex jugador hoy periodista, autor de las notas.
Mientras Daniel Hadad llevaba a su domicilio particular a José María Aguilar para negociar la inclusión de Antonio Caselli en la lista de candidatos que acompañaría al obeso abogado de Villa Urquiza en su reelección (Caselli fue, hasta hace poco, secretario de Actas de la Comisión Directiva de River Plate pero meses atrás renunció, enfrentado a Aguilar), Urgente24 y EDICIÓN i hacían periodismo.
Es bueno recordarlo por estos días cuando los noveles cronistas del canal de noticias de Hadad, C5N, pretenden convertirse en abanderados de una denuncia que Hadad no hizo cuando correspondía porque tenía intereses económicos personales vinculados a la estabilidad de Aguilar.
Pese a las cartas-documento, Urgente24 y la revista EDICIÓN i le dedicaron más espacio a revelar la trama del abuso de la confianza de los socios, de la falta de transparencia de los dirigentes y de la corrupción. Lamentablemente no ocurre solamente en River Plate sino en la mayoría de las instituciones deportivas del fútbol profesional argentino, y el responsable directo e indirecto de que lo incorrecto sea el estándar, es Julio Grondona, el hijo institucional de Carlos Lacoste, el personaje que más influyó en el fútbol argentino durante los '70 y comienzos de los '80.
Grondona es quien le ha brindado, por ejemplo, una cobertura de legitimidad a Aguilar y al reprochable statu-quo que éste ejecutó en River Plate, que incluye, además de las sospechas de mala administración y de corrupción, la co-gestión con los ‘barrabravas’, violentos y nefastos personajes que simbolizan el enorme deterioro de River Plate.
Los personajes subidos al paraavalancha no simbolizan la alegría del fútbol ni la pasión. Ellos solamente representan todo lo contrario. La única alegría que existe en el fútbol puede ocurrir en el campo de juego entre 22 jugadores y la pelota de fútbol. El resto es superfluo y, a menudo, detestable. Lo grave es que los ‘barrabravas’ sean incorporados a los usos y costumbres del fútbol superprofesional que pretende jugarse en la Argentina.
Por supuesto que lo de los ‘barrabravas’ ocurre en un contexto de complicidades donde no habrá sanción para con ellos porque los dirigentes cometen otras atrocidades. Es como si el superprofesionalismo le quedara grande a los dirigentes argentinos, que ni siquiera consiguen negociar contratos de televisación de los partidos que satisfagan las ambiciones y exigencias de sus propios clubes… Esto ocurre en una sociedad argentina a la que le queda grande la globalización, la productividad, la competitividad, los códigos prevalecientes en las relaciones entre las naciones del 1er. Mundo. En definitiva: todo esto ocurre en un país donde sus gobernantes trasladan valijas con dinero cuyo origen se desconocen, de un país al otro y sin declarar…
En medio de tan grave situación, Hugo Santilli pretende esta noche reafirmar su anhelo de regresar a la presidencia de River Plate. A comienzos del período conocido como ‘menemismo’, Santilli tuvo que renunciar a la presidencia de River, involucrado directamente en un escándalo denominado ‘American Express Bank’, donde él tenía una cuenta en la que se depositó dinero que no le pertenecía. Para salvar las apariencias, Santilli renunció y Carlos Menem lo designó en la presidencia del Banco de la Nación Argentina, donde realizó una gestión tan lamentable como la de su sucesor, Aldo Dadone. El ‘proyecto Centenario’, eje de la famosa contratación informática CCR-IBM, comenzó precisamente en días de Santilli en la entidad, y se concretó con Dadone.
¿Por qué es nefasto que Santilli quiera regresar a la presidencia de River Plate? Porque José María Aguilar y Mario Israel, hoy los líderes de la decadencia en River Plate, fueron protegidos y promovidos por Santilli cuando él fue presidente.
Y la cuestionada ‘barrabrava’ hasta realizó la seguridad del acto de cierre de campaña de Santilli, en Costa Salguero, en su frustrado intento de regresar a la presidencia del club, hace 2 años (tras lo cual, se acercó a Aguilar e Israel, a través de su hijo Darío Santilli, integrante de la Comisión Directiva de River, un incompetente en el intento de recuperar River, aún cuando intente exculparlo gente como Matías Patanian).
Precisamente por el recuerdo de los ‘barrabravas’ custodiándole la cena, Santilli dijo que, para él, muchos de los integrantes de la hinchada “son buenas personas. Es una pena porque, en definitiva, son chicos desviados. Y River debe saber que tiene que conducir esto. Y si no puede hacerlo, los debe erradicar”.
Erradicar no puede ser la 2da. opción sino la 1ra.
Por lo tanto, Santilli es continuidad con la decadencia de River Plate aún cuando él insista en que la única Copa Libertadores de América que ganó el club de Nuñez fue cuando él era presidente. En ese caso también habría que recordar el ambiente de escándalo que ya vivía River, cuyo paradigma fue la denuncia al por entonces entrenador Héctor Veira por intento de violación del por entonces adolescente Sebastián Candelmo. Sin embargo, lo más grave de la gestión de Santilli fue la ruina financiera en que él dejó a River Plate. El club adeudaba salarios a sus empleados, desaparecieron hasta equipos eléctricos, y la ‘barrabrava’, con otros jefes, hacía uso y abuso de las instalaciones del club.
Una mentira ‘a lo Santilli’: era vergonzosa la actuación de los ‘barras’ en River y quien fue dirigente más tarde, Horacio Roncagliolo, contrató a una agencia de seguridad ‘pesada’ (como corresponde para poder expulsar a los ‘barrabravas’) y lo logró. Luego fue cuestionado porque en la agencia de seguridad trabajaban ex ‘carapintadas’ y eso tenía una lectura política, cuando la realidad es que en esos días fue el único momento en décadas que River se libró de los ‘barrabravas’. El discurso de pseudos ‘progresistas’ como Aguilar sólo lleva a la corrupción. En esos días fue cuando Daniel Passarella desembarcó en River, prestándole algún dinero, que River le devolvió, a quienes se hicieron cargo del club. En su teatral aparición de hace algunos meses, Passarella invocó ese préstamo como una demostración de que nunca intentó acrecentar su fortuna personal gracias a River Plate. Obviamente nadie le creyó a Passarella ni a su abogado Marcelo Open, además amigo de Hadad.
Precisamente a la Radio 10, de Hadad, Santilli le acaba de decir: "No creo que (José María) Aguilar sea el problema. El problema es un conjunto de actitudes de esta comisión. En otros tiempos teníamos problemas económicos o deportivos, pero hoy la institución tiene una crisis general. Tiene problemas económicos, futbolísticos y una crisis ética de la que no es ajena la institución". Curiosa esta situación en la Santilli pretende dar consejos sobre ética.
En los años '80 no había Google y, entonces, no hay información disponible que contribuya a la memoria colectiva acerca de quién es ‘el viejo’ Santilli; pero Urgente24 se encargará de comenzar a rescatar todos los antecedentes del ‘caso American Express Bank’ para que, al menos, en un país desmemoriado no se olvide tan facilmente a los corruptos.
Buen me gusta la actitud de que salte todo a la mierda, al margen de que pueden haber intereses o no por parte de estos periodistas lo unico bueno es q le siguen cayendo duro a papada y ahora a Santilli otra lacra mas …
[Saludos]
PD: Aclaro que a la nota le saque unos parrafos que hablaban de la barra, no dejo el link para no generar conflictos pero si la buscan la encuentran completa…si los chicos de la pag consideran que dice algo fuera de lugar cierrenlo.