el mismo… claudio lozano como diputado por capital, los proyectos que llevo al congreso la verdad que me parecieron siempre muuuy interesantes… preo claro, con la 125 era si o no al de kirchner o a lo sumo la de algun “peronista disidente”, mira si le iban a dar bola a una 3ra o 4ta fuerza…
es un tipo bien…
estuvimos hablando de estado y sociedad ante iniciativas de la economía social…
Movimientos sociales…
pero bueno, después de hacer la materia economía social, llegue a la conclusión de que muchos de los partidos de la izquierda son más verticalistas que los de derecha.
Yo tengo la incipiente teoría de que el márketing ha cambiado muchísimas cosas en el mundo de la política y la economía, pero nunca los académicos de estas especialidades lo han valorado como un factor determinante. Y pienso que ese es uno de los grandes problemas de la izquierda: no tiene una visión marketinera de la política. Y ojo, no solo es un error político proselitista sino que es un error de concepción de fondo. La derecha sabe muy bien lo que quiere, sabe lo que quiere la gente y sabe muy bien como adaptar su discurso a las necesidades de la gente. La izquierda argentina está anquilosada, estancada, sumergida en peleas intrascendentes y luchas inconsistentes. Nunca se preocuparon por saber verdaderamente qué es lo que quiere el votante y hacer campaña en consecuencia… Y eso está mal. Porque el votante, en definitiva, es el ciudadano al que después hay que gobernar. Si sabés qué quiere, sabés por dónde entrarle en la campaña Y DONDE GESTIONAR los mejores cambios. Hay muchos partidarios de izquierda que se arrogan la facultad de pensar por la gente. Y así es como salen esos discursos anacrónicos y sin sentido, que recolectan menos votos que mi difunta abuela.
tal cual…
pero además son hegemónicos… Muy verticalistas en la toma de decisiones, no es que haya consenso y apertura. Entre ellos mismos hay una falta de decisión impresionante.
Mirá vos… debe ser por eso que hay 40 mil agrupaciones de izquierda distintas, dado que si no te alineás con un discurso, te tenés que abrir por tu parte.
generalmente acá la izquierda ahora se esta agrupando por el crecimiento de los movimientos sociales que son anti todo, pero terminan siendo tan anti que ni entre ellos se ponen de acuerdo…
hay pocas redes sociales que se han formado y se mantienen en el tiempo, la mayoría son satélites que andan de un lado a otro picoteando…
murdoch, yo concuerdo con lo que decis al principio, salvo lo del marketing… por que te pensas que considero que los pseudo partiduchos de “izquierda” (como me gusta llamarlos) son un impedimento para cualqiuer avance de una idea de izquierda?? por su cerrades total y su nulo entendimiento de que al poder se llega con el apoyo de la gente…
con respecto al marketing, yo considero que ayudo mas a ensuciar la politica… ahora la imagen del candidato no pasa por las ideas sino por el tipo de campaña que plantee… eso es malisimo… no hay ideas ni hay interes en que las haya…
lo demás, de entender que necesita la gente y demás, la derecha no le importa… a la derecha le importa qué es lo que quiere escuchar la gente para que lo voten y asi tener el poder para beneficiarse ellos y su sector…
claudio lozano no fue como intendente de capital, el nombre es jefe de gobierno:twisted: jaja… yo no lo vote porque todavia no tenia 18 ahi… pero proyecto sur, lo que a mi me parece es que tiene y expone un proyecto en serio… con justicia y paz social… con una distribucion en serio de los ingresos para los que menos tienen (y no para los que mas tienen, o para los que tienen hoteles en calafate)…
buen, no queria hacer propaganda cheee… pero em parece que me voy a afiliar:P
Con una ley que burlaron, esquivaron y limitaron todo lo que pudieron, los Kirchner pretenden entrometerse aún más en las empresas privadas. La noticia es que quieren colocar síndicos de la Sindicatura General de la Nación (Sigen) en las compañías en las que ya ubicaron directores aprovechando las acciones que tenían las AFJP y ahora pasaron a manos de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).
Incluso hubo confusiones acerca del rol que cumplirían esos funcionarios.
La ley 24.156, de administración financiera, es la que rige la forma, precisamente, de administrar todos los organismos públicos y también las empresas en las que el Estado tenga participación mayoritaria en el capital o en la toma de decisiones.
Para los Kirchner no es una ley desconocida. Es la que han esquivado durante toda su gestión, utilizando los llamados superpoderes para manejar el presupuesto nacional a su antojo.
Pero esa norma, además, impone, como se dijo, sus preceptos en las empresas con participación mayoritaria estatal. No es el caso de las compañías en las que, con mecanismos de discutible legalidad, el Gobierno se quedó con el control de paquetes de acciones minoritarios.
Sin embargo, un artículo de la misma ley, sancionada en 1992, permite a la Sigen proponer síndicos que integren los organismos de control de sociedades anónimas en las que el Estado tenga participación minoritaria. Pero esas empresas se continuarán rigiendo por la ley de sociedades anónimas y no por la que impone los controles de la Sigen y de la Auditoría General de la Nación.
El gobierno de los Kirchner ha mostrado poquísimo apego a esa ley. Por eso cuando se creó Enarsa, la empresa energética estatal, se la colocó bajo la normativa de la ley de sociedades anónimas privadas. Enarsa (Energía Argentina Sociedad Anónima) debió haber sido Enarse, una sociedad del Estado, pero los Kirchner pidieron, y los legisladores les dieron, un esquema legal que les permite manejar los recursos y el patrimonio público con muchas menos restricciones.
Los Kirchner muestran una increíble propensión a intervenir y manejar directamente los negocios del sector privado y a poder hacer lo que quieren con los recursos públicos. Sorprendentemente, para los dos objetivos utilizan e invocan la misma ley. Cuando se trató de controlar los recursos públicos, los Kirchner lograron del Congreso unos escandalosos superpoderes que nunca tuvieron gestión democrática alguna desde 1983 y que desdibujaron completamente la ley y el espíritu republicano con que fue redactada. Letra muerta Gracias a esos superpoderes y a la anulación en la práctica de artículos clave de la ley, es letra muerta el artículo constitucional que impone al Congreso redactar anualmente la ley de presupuesto. Su realización es, gracias a la vulneración de la ley de administración financiera, una mera formalidad.
Los Kirchner pueden modificar a su antojo al otro día esa misma ley y hasta pueden delegar en el jefe de Gabinete, y éste en subalternos, esa tarea. La Sigen, aparentemente tan útil ahora para controlar a los privados, tuvo en su cúpula durante más de cuatro años a la esposa del ministro de Planificación, Julio De Vido, Alessandra Minnicelli.
Pero cuando se trata de meterse en empresas privadas, pareciera que los Kirchner se transforman en defensores acérrimos de la letra de la misma norma que antes han eludido.
Las prestadoras de servicios públicos, como Gas Natural Ban, parecen no tener más remedio que allanarse a las exigencias. El Gobierno ya les ha intervenido los negocios y hasta desplazado ejecutivos sin normas escritas o abiertamente en contra de ellas.
Otras, como Minetti y Siderar, se han allanado a que les designen los discutibles directores, pero se resistieron a los síndicos.
La gran novedad es que, lejos de desactivar el conflicto con el campo, el matrimonio gobernante ha logrado sumar más sectores empresariales a la lista de los disconformes con su gestión.