Yo me preguntaría cual fue la reacción de los inquisidores que prefieren “perder jugando bien” ( deseo contradictorio por cierto ) al momento que el árbitro pitó el final del Argentinos 0-0 River por la copa del 86? Supongo que siguiendo su razonamiento habrán insultado al equipo porque durante 90 minutos no sabía como parar al “humilde” bicho de la paternal. Y seguramente la memoria me debe estar fallando porque recuerdo a varios hinchas de River abrazados y una cancha de Vélez festejando un 0 a 0 sufrido como nunca.
Y también me pregunto que habrán hecho en el 75?. Porque River fue campeón pero de los últimos 7 partidos perdió 3 ( entre ellos de local con Atlanta y Boca) y empató uno con Temperley. Seguramente también los habrá frustrado que el último partido lo ganamos nada más que 1 a 0. Los inquisidores, me imagino, habrán llorado por los rincones autoflagelándose porque River no había ni gustado ni goleado. Eso si , si no me falla la memoria, el pueblo millonario copaba el país luego de 18 años de sequía.
Y también me pregunto que habrán hecho la madrugada del día en que River se consagraba campeón del mundo luego de meter una sola pelota de gol en 90 minutos mientras unos “desconocidos” rumanos nos cascoteaban el rancho? Siguiendo su razonamiento me pregunto : habrán padecido de insomnio porque el equipo no gustó ni goleó?
Estos inquisidores modernos se creen con derecho a exigirle a los mas jóvenes que no griten o no se emocionen por el gol de cual o tal porque comparado con alguna gloria del pasado no existe. Son cortados con la misma tijera de aquellos que unas cuantas décadas atrás a cada pibe que se emocionaba con los goles de un tal Labruna le decían “Pibe que gritás? Éste no sirve ni para lustrarle los botines a Bernabé”. Siempre existieron los inquisidores. Siempre.
El futbol evolucionó. Para bien o para mal pero lo hizo. Y quien pretende jugar como hace 40 años que lo haga, pero le recuerdo que el futbol tiene como objetivo marcar mas goles que el rival y jugando como hace 40 años dudo que lo haga. Hoy hay que tener un estado físico envidiable, los primeros defensores deben ser los delanteros que deben dar una mano en la recuperación. Y River debe adaptarse a los tiempos porque es de personas inteligentes hacerlo. Los inquisidores reniegan de tal virtud. Reniegan de que Alexis participe en la recuperación de la pelota. Reniegan de la táctica y la estrategia y condenan al infierno a quienes se valgan de ellas para ganar. Y cuando la realidad les da la espalda recurren a la descalificación del “hereje” a través de argumentos tan vacíos como la vida privada del individuo.
Que luego de mas de 6 años nefastos de Aguilar en la presidencia, River esté primero y caminando es casi un milagro. En pocos meses se desmantelará este plantel y vaya a saber uno con que engendro nos topamos. Eso si seguiremos con Big Papada en el sillón y probablemente quien lo suceda sea algún “renegado” de su propio riñón tal como lo hizo él con Davice. En ese panorama algunos se suben al púlpito condenando al infierno a los que se alegren de que River pise mas o menos firme luego de años de frustraciones.
Todavía no se ganó nada y es probable que no terminemos ganando nada porque el River de Aguilar destruye cualquier quimera. Pero ante la realidad de River y lo que entiendo será su futuro, me dispongo a disfrutar de este pequeño oasis en el desierto mientras dure. Porque si River no gana algo, si River no levanta cabeza se seguirá hundiendo mas y mas mientras añoramos un jogo bonito de otra época.
Disfruten de los goles los haga quien los haga. Disfruten de cada atajada de Carrizo. Disfruten de las gambetas pero también del esfuerzo de Alexis. Disfruten de cada partido que gana River sin temor a que los “inquisidores” los condenen al infierno.