En este momento Tony esta tirando pasos con elvira. Space yaaa!
Doblada va para atriqui, ni el final tiene gracia así. Nada como el Say hello to my little friend, posta.
Lo puse en el thread de Documentales de Politica, pero vale la pena ponerlo aca. Impresionante documental sobre Erich Priebke (nazi que vivio en Bariloche hasta 1995) y de como la ideologia alemana peso muchisimo en el desarrollo de Bariloche como sociedad. El que no lo vio, no lo deje pasar, es brillante y aterrador al mismo tiempo. Esta dirigido de manera excelente, parece casi un thriller por momentos, tiene buenas partes de ficcion, mas un material de archivo impresionante y muy buena musicalizacion. Estan todas las partes en youtube.
PD: Juan, como si nada hubiera sucedido (1987), es otro documental terrible de Echeverria, en el que se investiga la causa del (hasta ese momento) unico desaparecido en Bariloche.
Comparto con ustedes mis artículos publicados en Facebook referidos a cada una de las 9 películas nominadas a Mejor Película para los próximos Oscars.
12 Years A Slave.
3 hombrecitos / 9 nominaciones.
Blancos de mierda.
Solomon Northup fue un negro nacido libre en EEUU y esa era su destino, pero en la década de 1840 fue engañado, drogado, secuestrado y vendido como esclavo. Escribió su autobiografía, llamada Twelve Years A Slave. Años después no se supo más nada de él. Y aquí está, la industria cinematográfica lucrando con su historia real. El mundo está empecinado en explotarte y lucrar con tu persona, querido Solo, estés dónde estés.
Así es como vemos el calvario por el que tiene que pasar rodeado de otros esclavos un poco más acostumbrados, digamos. Él no. Él es un hombre culto y de familia que fue a parar a los campos de algodón ilegalmente.
Creo que este tipo de películas nunca están de más. Aparte del obvio objetivo de levantarla con pala, demuestran una especie de autocrítica que hace la sociedad por las atrocidades que ha cometido. Porque las leyes y los contextos varían, y en su momento esclavizar negros era legal, pero las verdades universales son eternas, y es una verdad universal que el hecho de que un ser humano esclavice a otro es una atrocidad. Ayer, hoy y siempre. Y está bien que las nuevas generaciones lo tengan bien pero bien en claro, así nunca y bajo ningún concepto se vuelven a consentir aberraciones de ese estilo en la actualidad, y lo mismo pienso sobre películas que tratan otras temáticas similares.
Quizás por estas cosas es que aparte de contar prolijamente la historia, asistimos durante sus minutos a azotes, latigazos, torturas, golpes, humillaciones, ultrajes, violaciones, etc, etc, etc. Algunas partes representan tanto patetismo que causan una risa nerviosa.
Filosófica e ideológicamente no es mucho lo que aporta a la causa, pero pienso que a esta altura no es necesario dar muchas vueltas para explicar por qué la esclavitud estuvo mal.
Me gustó Michael Fassbender y el papel de Brad Pitt, que además es uno de los productores.
En fin, artísticamente correcta, pero sin mucho material novedoso u original como para recordar por mucho tiempo.
American Hustle.
4 hombrecitos / 10 nominaciones.
Lawrence de América.
Difícil pensar hoy por hoy en una mejor plantilla de actores que esta para una película. Son el Barcelona, viejo! Y David O. Russel es Guardiola. Así es fácil sostener cualquier película, cualquier guión.
Este es un relato basado parcialmente en un caso real en el que una pareja de estafadores profesionales es presionada por un agente del FBI de relativo talento para que colaboren en la captura de mafiosos y políticos corruptos con su inteligencia e ingenio. Así, se van metiendo cada vez con gente más metida, en enredos cada vez más enredados, elipses amorosos… y Jennifer Lawrence que por si hacía falta vuelve a confirmar que es la gran actriz de nuestra era.
También es difícil dilucidar si son los actores/actrices de la peli quienes hacen tan magníficos a los personajes, o los personajes fueron tan original y atractivamente concebidos que les facilita la tarea a los actores, o es un feedback frenético entre ambos elementos. Vaya uno a saber…
Ambientada en la transición '70s-'80, se alimenta de algún Tarantino en Jackie Brown, de algún Scorsese en Casino, y también incorpora un tono personal que se va definiendo como russeliano, en el sentido de tirar a los jugadores a la cancha y explicarles que actuar es darle un pase al compañero mejor posicionado, distraer al espectador y cuando menos lo esperás, Jennifer Lawrence define al ángulo y sí, sí señores, logra por sí sola que hombrejingle le otorgue medio hombrecito de bonus a los 3,5 merecidos naturalmente para la peli, en esta II Exposición Definitiva de las Películas Nominadas a Mejor Película en los Oscars, por hombrejingle.
Captain Phillips.
3 hombrecitos / 6 nominaciones.
Somos los piratas.
Otra historia real. Esta vez una contemporánea, moderna, y fulera pirateada somalí. Cuatro peligrosos, flacos, armados, improvisados y descontrolados neopiratas somalíes se meten en un barco de carga capitaneado por Tom Hanks (quien ya nos tiene acostumbrado a que sus personajes se vayan de viaje y le pasen cosas jodidas), a quien después secuestran en otro barquito más chiquito, y se les arma un quilombo bárbaro porque, bueno, ya saben lo que Hollywood siempre nos enseña: do not fucking mess with the USA.
Y es eso, nomás. Excelentes y muy creíbles actuaciones y un clima de tensión extremo a lo largo de toda la película, que te deja un poco nervioso.
Dallas Buyers Club.
3,5 hombrecitos / 6 nominaciones.
Viven.
Esta es la cuarta película que revisamos en este ciclo, querido lector, y es la cuarta historia real. Y es así, la realidad es cinematográfica, qué va a hacer.
1986. La ignorancia, los prejuicios y la burocracia corporativa de la salud en EEUU son un cóctel poco confortable para los infectados de ese desconocido virus llamado VIH y posteriormente enfermos de esa rara enfermedad llamada SIDA. Y peor si el afectado es un sureño rudo, mujeriego y homofóbico. Decidido a tomar el toro por las astas, no acepta la sentencia médica oficial, que le da 30 días de vida, se informa, aprende, y busca soluciones. Encuentra así a un ex médico exiliado en México que aplica tratamientos alternativos a la agresiva AZT, basado en otras drogas y varios suplementos vitamínicos y naturales.
La cosa es que le da resultado, mejora su estado, y asociado a una joven infectada que conoció en el hospital, monta un pequeño e ilegal consultorio en el que vende de contrabando el tratamiento al que empiezan a acudir los enfermos de su ciudad. Y mejoran notablemente.
Todo bien hasta que el establishment norteamericano (complicidad “laboratorios+hospitales+estado”) que lucra con la salud y sobre todo con la enfermedad comienza a perder clientes a lo loco, y obviamente le empiezan a hacer la vida imposible (literalmente…).
No crean tampoco que van a ver una película de Michael Moore. La denuncia a la industria química legal especuladora, uno de los mayores negocios del mundo, junto a las armas y a la energía, está, pero es superficial y no profundiza más allá de lo que el común de la gente sabe o intuye. Por otro lado, el protagonista de la peli tampoco es Patch Adams: en cierto sentido se maneja igual a las esferas del alto poder: sin dinero no hay tratamiento, no hace caridad. Lo positivo es que esto ubica a la película lejos del clásico maniqueísmo hollywoodense (buenos, buenos contra malos, malos). Pero resta puntos en el factor “denuncia”, el cual evidentemente no es la intención, y supongo que tampoco estaría nominada al Oscar si así lo fuera.
En la realidad, y en el presente, una oficina así como la que Woodroof y compañía montaron no duraría ni media hora, pero pudo hacerlo en su momento: encontró una cómplice dentro del negocio oficial, encontró una compañera dentro del negocio ilegal (y más barato y saludable), y se encontró a sí mismo con un organismo deteriorado por la enfermedad (mejorado parcialmente con su tratamiento personal) pero dando un salto de calidad en lo humano que no se hubiera llevado al más allá si no hubiera pasado por lo que pasó.
Jared Leto: aplausos.
Matthew McConaughey: ovación.
Gravity.
3 hombrecitos / 10 nominaciones.
En el cielo las estrellas.
Cuarón ubica dos brillantes astros allá, lejos, en el espacio oscuro y asfixiante, y con ellos ilumina la película más nominada del año, junto con American Hustle. Hace rato que Clooney y Bullock han dado el salto de calidad para ganarse la consideración y el respeto poco discutido por parte de público+crítica, y sobre todo la segunda acá anda tocando su techo, así haya tenido que viajar 600km más allá de la atmósfera (que en realidad no lo hizo, es todo montaje, por si algún periodista desprevenido aún no lo sabe).
Miren, la película es muy agradable visualmente, pero el hecho de que logre transmitir tan bien la sensación de angustia, desesperación e inminente asfixia de estar absolutamente flotando a la deriva en el espacio luego de un accidente, no sé si es un valor. En definitiva, ¿a quién le gusta sentirse angustiado, desesperado y asfixiado?, a mí no. Y así me sentí cuando vi la película, lo cual tampoco sé si es un disvalor, porque eso es lo que alguien busca en la ficción: sensaciones.
Por otra parte, no va a ser la primera ni la última película que relata supervivencia en escenarios ominosos y huraños, pero en este sentido es difícil pensar en una realización técnicamente superior.
Si hay algún contenido acerca de lo pavoroso y abrumante y enigmático y divino que hay en el cosmos, yo no lo descifré. Y tampoco descifré si es lo que Cuarón se propone, aunque creo que nos quiere convencer de cuán agradable y confortable y seguro y apacible es nuestro querido planeta Tierra, y que aunque a veces nos den ganas de que aprieten el maldito botón, bueno, gente, allá arriba parece ser peor. No vayan!
Her.
1,5 hombrecitos / 5 nominaciones.
Samanta, si tú la aprietas ella canta.
Jaja, qué bueno, una comedia en la que un solitario escritor se enamora de su sistema operativo. No, no es comedia, es en serio. Ah… no importa, lo genial es que con ironía enuncia una perspectiva crítica acerca de cuánto nos está afectando nuestra cada vez más apegada vida cotidiana a los dispositivos “inteligentes”… Mmm, no mucho, en el futuro cercano los ceros y los unos parecen destinados a facilitarle confortablemente la rutina a las personas; si es como dice la película, nuestras computadoras, celulares, consolas de videojuegos, etc. serán tan amables y nos harán la vida tan mucho más llevadera que será algo digno de lo cual enamorarse… Ajá, entiendo… o sea, mi precioso, me estás diciendo que esta película relata la historia de amor entre un hombre y su sistema operativo pero no es ni graciosa ni irónica ni paródica? Así es, mi precioso, y si pretende serlo no lo logra en absoluto. Oh… y cuál es el tono de la película, cuál es?, dínoslo, mi precioso. Hipster: los hipsters en el futuro habrán ganado la batalla cultural, con su tecnología+ropa vintage+lentes de marcos gruesos+nostalgia impostada+cursilería barata y despreocupada e impostada también y chiquita+sinsentido de la vida como valor o como algo+complejo impostado de Complejo de Edipo mal resuelto.
Si el jackass Spike Jonze tuvo determinaciones en esta película milagrosamente nominada, estas serían: a) Convertir a Joaquin Phoenix en Leonard de TBBT. b) Poner en evidencia que si sólo escuchamos la voz de Scarlett Johansson Scarlett Johansson comienza a sufrir serios riesgos de ser considerada una lisa y llana mala actriz, aunque esta sensación puede también ser “mérito” del jackass, como para no dejarlo afuera. c) Lograr afear a Amy Adams hispterizándola, y hacerla sentir evidentemente incómoda y poco convencida de su papel (el personaje realiza dos cosas: un documental sobre su madre, en la que sólo se la ve durmiendo. Un videojuego sobre ser madre).
Lo único que me gustó es que la película visiona un futuro de personas pacíficas y tranquilas. Nostálgicas, con vidas sin sentido, pero pacíficas y tranquilas. Ese tono de adormecimiento mientras la tecnología se encarga de todo me agrada. Y obviamente voy a hinchar por la nominada The Moon Song (de la gran Karen O; sería inolvidable verla recibiendo un Oscar). El resto es todo falso, impostadamente cursi y de una pretensión “poética” burda y maltrecha. Una reverenda bazofia, mi precioso.
Nebraska.
3,5 hombrecitos / 6 nominaciones.
Ahora ya caminas lerdo.
Creo que el blanco y negro es por lo gastado del cuerpo y los tiempos del héroe de la película, un recio octogenario de pocas palabras (brillantemente interpretado por Bruce Dern) empecinado en dirigirse a Nebraska, puesto que allí lo espera un millón de dólares que asegura haber ganado. Hace caso omiso a las explicaciones que le da su hijo, acerca de que ese cupón que recibió no es sino una publicidad engaña-pichanga de una revista para promocionar suscripciones. No ganaste nada, viejito. ¿Ah, no? Ya lo veremos. Así es que su hijo menor le sigue el juego y se ofrece llevarlo a su meca.
La cuestión es que de camino tienen que pasar por el pueblito donde el hombre ha pasado su juventud y parte de su adultez en vigor. Allí se encuentra obviamente con personajes de su pasado, frente a los cuales permanece bastante inmutable e inconmovible; no así su hijo, quien empieza a descubrir que es un buen tipo su viejo, y refundan la relación entre ellos.
También aparece poéticamente descripto el hermoso desencanto una vez entrado en años que provoca la caída del sueño americano, y el apacible, estrecho, tranquilo y gris pasar de los días en los pequeños pueblos estadounidenses, infiernos grandes, muy grandes, sobre todo en el corazón de las personas. Y la miseria humana (no material, humana) que suele destaparse, en la misma proporción que en cualquier otro lugar del planeta, cuando de pronto hay mucho dinero en cuestión. O cuando se cree que lo hay, como en este caso. No así nuestro protagonista ni su inmediato entorno, en el cual de pronto encuentra una inesperada protección y contención.
Como en ese cuento de Las Mil y Una Noches tantas veces replicado, en el que el pastor viaja en busca de un tesoro y lo termina encontrando, pero no en el lugar ni en la forma que esperaba, Nebraska, aunque sin moralismos ni clichés ni pavadas, te va a dejar una pequeña, mínima, inasible sensación de misión cumplida.
Philomena.
2 hombrecitos / 4 nominaciones.
Madre soltera, busca.
El 66,6% de las nominadas como Mejor Película en la edición actual de los Oscars está basado en hechos reales. Se puede interpretar el clásico dicho “la realidad supera a la ficción” como que nuestra querida realidad viene a suplantar quizás la falta de ideas originales en la industria grande del cine. No sé si será así, pero surgen problemas cuando ni siquiera hay inspiración para buscar esas historias reales, o para contarlas de forma atractiva o cinematrofáficamente, al menos.
Este es el caso de Philomena, una historia real entre las que lamentablemente habrán ocurridos miles y miles en la historia:
- Reino Unido, mitad de siglo XX.
- Una monja adolescente tiene un hijo.
- El convento se escandaliza por semejante profanación y pecado inspirado por Satanás, se apropia del chico y lo vende a una familia norteamericana.
50 años después la madre le cuenta la historia a un periodista y éste decide ayudarla a reencontrarse con su hijo, y de paso escribir un artículo al respecto que le permita relanzar su fallida carrera (un hombre parco, cuyos chistes no se entienden y la gente se ríe cuando habla en serio pensando que hizo un chiste, recientemente despedido del partido político del cual era asesor, por un escandalete en el que él la ligó de rebote). Y es como surge una rara amistad entre ellos. Típico. Dos personas diametralmente distintas se hacen raramente amigos. Típico.
El papel que hace Judi Dench, a quien entiendo buena actriz pero quizás aquí no está bien dirigida, es extraño: comienza siendo una mujer profunda, misteriosa, pensativa… pero de un momento a otro su personaje cambia totalmente, sin motivo aparente, y se convierte en conversadora, inocente, cándida y genera esa sensación de ternura que provocan las personas mayores de edad cuando no se hayan en el mundo moderno. Porque cuando por motivo de la búsqueda han de viajar a EEUU, EEUU es eso, el mundo moderno, un viaje al futuro. En fin.
Cómo se resuelve (si se resuelve) la búsqueda no puedo decirlo, pero a mí me dejó una sensación de irresolución y vacío narrativo no compensada por las (en términos generosos) correctas interpretaciones.
The Wolf Of Wall Street.
3 hombrecitos / 5 nominaciones.
El ciudadano Belfort.
Jordan Belfort no es un gran corredor de bolsa. Simplemente porque no existen los grandes corredores de bolsa. Como bien se explica en la película, es absolutamente imposible saber a ciencia cierta qué es lo que va a pasar con el devenir de las acciones de una empresa, con el movimiento fluctuante de la economía vacía de contenido que significan las operaciones bursátiles. Como todos los corredores de bolsa exitosos (es decir, no aquellos que hacen ricos a sus clientes, sino aquellos que se hacen ricos a sí mismos con las inversiones de sus clientes), el ciudadano Belfort (que existe en verdad y que escribió sus memorias en las cuales está basada la película) es simplemente un excelente vendedor directo. Ese es el secreto, hacerle sentir a sus clientes la necesidad de que deben, imperiosamente, comprar determinada cantidad de acciones de determinada empresa, con mentira y manipulación. Obviamente cobra su suculenta comisión luego de haber vendido la nada misma. En síntesis, una estafa. Así el héroe de la película básicamente amasa fortunas estafando y operando fraudulentamente. Pero todo lo que sube tiene que bajar y más si te la pasás drogado y parloteando.
Hay algo más difícil que volverse rico, y es mantenerse rico. Es imposible mantenerse rico sin cultivar perfil bajo, sin cuidar que tus neuronas sigan funcionando saludablemente y gritando y alardeando sistemáticamente las 24 horas del día, a cara descubierta, y mucho menos cuando tu principal fuente de ingresos proviene de la estafa y el fraude. Bien por él al sumarle su propio call-center a sus naturales dotes de vendedor y de orador. Pero las consecuencias de sus desmanejos no tardan en producir efectos negativos en sus propósitos. Bueno, en realidad, sí, tardan, y es aquí donde quiero comentar un absurdo problema narrativo que encuentro en esta película técnicamente impecable.
Es normal que este tipo de películas comiencen con una introducción narrada por el propio protagonista, de unos 15, 20 minutos, en la cual se presenta, cuenta brevemente quién es, cómo es, qué hace, cómo llegó allí, etc. hasta que uno entiende la idea, el punto, y bue, comienza la historia, la “acción”, lo extraordinario. El problema es que en TWOWS esa introducción dura dos de las tres horas de film. Así asistimos durante 120 minutos a la explicación y explicitación de que Jordan Belfort es un capo, eeehhh un maestro, un exitoso al que todo le sale bien, que vive de exceso en exceso, de placer en placer, que toma cocaína usando billetes de 100 como tubitos a los que luego tira a la basura, porque le sobra la plata, se lleva el mundo por delante, que todo el mundo lo ama, que está casado con una súper modelo, esaaa, campeón!!! Bueno, bueno, campeón, ya se entendió la idea, ahora queremos ver la caída porque si no es grotesco y tu vanagloria se vuelve un bodrio repetitivo y barato.
Se ha dicho que este es el mejor papel en la carrera de DiCaprio, pero eso no es correcto, en todo caso es el papel más grande y extenso ya que según recuerdo no hay un solo minuto de los 180 totales en el que no sea el eje principal de la escena. Sobredosis total. Su mejor papel por lejos lo hizo en Django Unchained, no aquí. Me parece que grita mucho, todo el tiempo, y dice muchas veces la palabra “fuckin’” como todos los personajes. Y a veces parece Jim Carrey, lo cual es bueno porque hay escenas muy divertidas, que terminan redondeando los 3 hombrecitos para la peli. Jonah Hill realmente la descose como partenaire de Leonardito, por lejos el mejor de la película. Matthew McConaughey: ovación.
Muchos expertos aseguran que los que verdaderamente han ganado mucho dinero, no han trabajado duro por el dinero en sí, sino que eso se da por añadidura. Si vas atrás del billete como el burro atrás de la zanahoria, es probable que termines así, como un burro atrás de una zanahoria. Scorsese, sin dudas uno de los más grandes directores de cine de la historia, me da la sensación de que últimamente viene haciendo películas “por” y “para” el Oscar, ese que le ha sido tantas veces esquivo, y se olvida o no se atreve a correr riesgos, y eso termina siendo la causa de su frustración académica. No hay otro motivo que explique una historia tan naif e inocente sobre Wall Street. Sin siquiera mencionar ni de lejos a los verdaderos dueños y poderosos del asunto, donde el poder político o público simplemente aparece representado en buenos y honestos agentes del FBI, y donde el poder privado solamente busca ganar dinero y, bueno, quizás se le traspapele algún documento con alguna coma mal puesta pero no mucho más.
Lo que está bien es que haga una oda al dinero y a la riqueza, un poco incorrectas políticamente. Estamos acostumbrados a los sermones que baja el establishment a los pobres, ese que dice que la pobreza es un mejor camino que la riqueza hacia la felicidad, y que no te preocupes que los ricos son infelices y se suicidan, que mejor mantente así, oveja quieta y sumisa.
No, no es así, y la película afortunadamente no cae en esa patraña. La riqueza proporciona felicidad y poder y solución a casi todos los problemas de la vida. O quizás no es todo, pero cómo ayuda. Mal conducida, seguramente termina en el desastre y en dificultades, pero no mucho más que las de cualquier hijo de vecino pobre.
En el futuro se recordará esta película (si se recuerda), como un intento noble y digno de ganar un Oscar. DiCaprio lo quiere, lo necesita, y otras veces quizás lo ha merecido. En unos pocos días sabremos si el burro cazó la zanahoria, y si tanto esfuerzo y grito han valido la pena.
---------- Mensaje unificado a las 11:31 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 11:23 ----------
Bueno, terminamos de revisar y comentar cada una de las 9 películas nominadas a Mejor Película para esta edición de los Oscars (que será el 2 de marzo).
La calificación promedio de este año es de 2,94 hombrecitos sobre 5. Discreto y aceptable.
Escribís para algún medio en especial jingleman?
Julian, te dedicas a la critica de cine?
No, sólo para mi muro de Facebook (y ahora el foro, jeje).
---------- Mensaje unificado a las 11:50 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 11:50 ----------
En forma absolutamente aficionada, sí…
Captain Phillips. Creo que parpadeé 3 veces en toda la pelicula. Muy buena.
Amores Perros . Durisima , muy buena
De las peores películas q vi en mi vida.

Viste los documentales que mencioné de Echeverria?
Selena gomez es a la actuación lo que hittler al bigotito
Buenas criticas! lindo estilo, aunque por momentos tienen demasiada carga ideologica a mi gusto. Igual es logico porque la mayoria son historias reales que mueven un poco las entrañas.
No, me vi la primera parte que posteaste ahi. De la temática, vi uno de Rolo Pereyra (qepd) sobre el oro nazi en Argentina.
No citen todo eso viejo se hace interminable la pagina.
Juega.
50/50 entra en mi top de mejores peliculas que ví. ah, y puntaso aparte para la musicalización de la pelicula. increible.
---------- Mensaje unificado a las 04:40 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 04:33 ----------
Increible lo que me hace reir Seth Rogen, es un hdp. En muchas partes tiraba comentarios secos que te daban risa como cuando se termina de rapar gordon levitt o cuando la manda al frente a la novia que se pone a gritar “oh shit” 3 veces jajaja
despues cuando ya te pegan bajo que estan en la parte de la operacion, ya me estaba empezando a parquear y este culiado te la levanta de la nada y te hace reir.
En estas 2 semanas fui a ver 3 al cine, El Lobo de Wall Street, Hercules y Robocop
Espectacular, malísimamente asquerosa y buena hasta ahí, respectivamente
Buffalo 66
Me gusto mucho
Y Christina Ricci… mamita que linda que es