Bueno lo pongo aca porque no se donde íria. Les comento que muy river abrio para el que quisiera una sección en donde recibe notas. Humildemente se me ocurrio escribir algo no soy muy bueno por lo que se me ocurrió compartirlo con ustedes para que lo corrijan ya sea ortograficamente o para que corrijan el contenido, la idea es que entre todos armemos algo piola.
Bueno se los dejo para que lo lean si les parece una pelotudez y me quieren putear no me enojo 
despues de todo solo es el primer borrador
La mística perdida
En el mundo del fútbol los clubes tienen algo que los marca a fuego y los diferencia inequívocamente, un estilo de juego, una actitud dentro de la cancha y en el caso de river históricamente tuvo algo particular en la actitud del hincha. Esta “actitud” que lo hace único se conoce popularmente como el “paladar negro” que no es otra cosa que el gusto por el buen juego siempre, expresado como un dogma en las 3G: “GANAR, GOLEAR y GUSTAR”.
El hincha de river nació con el paladar negro incorporado y ha gozado del mismo gracias a las glorias que supieron vestir tan gloriosa camiseta, el manto sagrado diría una de ellas, ha aplaudido cuando se derrochó buen juego y ha protestado insatisfecho cuando este escaseo aun ganando partidos o campeonatos, por que, ádemas de ganar tenian que golear y gustar, con una de las 3G no alcanzaba.
Vinieron años de sequía, 18 para ser exactos, pero el paladar no se fue aguantó, ahi aferrado en el corazón del hincha por que la mística no se negocia estaba en el adn riverplatense marcado a fuego. Pero las cosas se pondrían peor.
Un par de décadas después los millonarios recibirían su golpe más duro y el “paladar negro”, también. Es difícil saber que empezó primero si el proceso que derivo en el descenso o el cambio en la cabeza del hincha las malas administraciones llevaron a malas ventas y peores compras económicamente al club le fue mal y deportivamente los rendimientos comenzaron a empeorar. Por otro lado el hincha dejo de exigir golear, mucho menos gustar con ganar como sea alcanzaba, festejaba barridas, actitudes para la tribuna, se rotulaba con una facilidad espantosa a cualquier buen declarante con el título de ídolo cuando en épocas anteriores quizás ni hubiera podido vestir la roja y blanca.
En la actualidad la mística parece perdida perdura en la memoria del treinteañero como un recuerdo y se habla del paladar negro como si se tratase de una leyenda, porque el hincha mutó hoy se festejan declaraciones, recaudaciones, cantidad de gente que se mueve, se le presta mas atención al aliento que al juego en sí, desde la tribuna bajan cánticos como “…jugando bien o jugando mal…” o “…no me importan esos malos resultados…”, la antítesis del paladar negro si se quiere, y cuidado con protestar, porque no se debe protestar se tiene que alentar aunque se vean los errores, aunque se siga perdiendo prestigio, aunque se juegue mal y se pierda con rivales que no están a la altura de la historia hoy el tema es alentar pasivamente solo vale alentar.
Una encrucijada difícil de sortear en un momento aún mas difícil de la historia principalmente porque los protagonistan no lo notan es más ven la queja como algo nocivo para el equipo y los rivales se regordean de esto, gozan entendiendo que el hincha a traicionado su escencia más sagrada y tienen la esperanza de que asi se mantenga para que los errores nunca se corrijan es que el gigante ha caído pero como se levanta sin la mística perdida?
