Kirchnerismo (parte 1)

no lo escuche, pero dicen que hugo dijo que si le dan los reclamos a camioneros (aumento,salario familiar,impuesto a las ganancias) el no se presenta el 12/7 a la reeleccion en la cgt…

A esos hijos de putas ya los conocemos. No se la van a perder. Eso no nos importa, lo que nos importa es que hay que articular un poco más con los nuestros y no tanto con los “otros”. Con los otros me refiero a cuando Cristina dijo que no iba a aprobar el proyecto de participación de las ganancias de los trabajadores en las empresas ante el aplauso del sector industrial, Biolcatti incluído. Tampoco va la de golpear en un momento de crisis mundial a un gobierno que fué factor clave para el crecimiento de los gremios.

Hay que calmar las aguas de los dos lados porque perdemos todos y ganan los de siempre.

Es lo que estoy diciendo, pero sostengo que el accionar de Moyano no es el correcto, y está muy lejos de serlo.

LA LUCHA DE CLASES NO SE PUEDE PARAR!!!

Que asco me da Moyano.

Es muy pronto para hablar. Hay que esperar quien ganará las elecciones el 12 de Julio…


Exigiendo sí, está obrando bien porque él no es un dirigente político, es un dirigente sindical y tiene obligaciones para con sus afiliados.

En el accionar, un paro general me parece mear fuera del tarro…totalmente excesivo.

alguien está viendo a Fantino con Anibal?

Si pero.. Justifica eso apoyar a los burocratas que usan politicamente a los reclamos legitimos de los laburantes.???A mi no me gusta ver al pollo o a segovia apoyando al hugo

Es verdad, lo dijo, sabe que el gobierno no se los va a dar…

Es un figureti el pollo ese…

JAMÁS hablé de extorsión de los trabajadores sino que Moyano está utilizando la medida para medir su fortaleza en contra del Gobierno, para sentarse con Bonelli y ver quiénes lo apoyan o dejan de hacerlo de cara a las elecciones en la CGT.

Saludos.

Las elecciones de la cgt??? Si ya esta cantada la fractura de la cgt.. Moyano vuelve al mta y une fuerzas con la cta posta no la obsecuente y va a tener mas aceptacion que manteniendose en la cgt.. Ademas cual seria el apoyo para relegirse en la cgt que le podrian conseguir ir a tn?

No estamos apoyando a Moyano, apoyamos el paro, la movilizacion y la lucha de los trabajadores. El tema es el siguiente para mi: el gobierno es incapaz de dar todo esto que piden los trabajadores, ¿que va hacer la burocracia? va intentar llegar a un acuerdo con el gobierno y tratar de satisfacer a los trabajadores o hacerles creer que “es lo que se puede”. Ahí es cuando la burocracia se va a enfrentar a los laburantes, nosotros apoyamos estas medidas para concretarlas, llevarlas a fondo y tomar todas las medidas que sean necesarias. Sabemos muy bien que Moyano no va a hacer esto, no es revolucionario y no va a impulsar la toma de fabricas por ejemplo, no va ir a fondo. Por esto es muy importante obligar a que la burocracia vaya por todo, y si se opone, que lo supere el movimiento obrero y la organizacion clasista.
A mi tampoco me gusta ver al Pollo, ni a Segovia apoyando a Moyano, pero creo (y espero) que estan pensando lo mismo que te digo, hay que ir a fondo. Igualmente la relación entre Sobrero y Moyano, se sabe es buena, cosa que repudio completamente. Sobrero le dio la gorrita de “La bordo nacional” (agrupación ferroviaria de Izquierda Socialista) a Pablo Moyano. El Pollo no entiende que esos burócratas son los que mataron a Mariano, no entiende que los burócratas son complices de la tercerización laboral, que son empresarios, que no representan los intereses de los trabajadores, y en el momento que haya que profundizar las medidas de fuerza NO LO VAN A HACER PORQUE VA CONTRA SUS INTERESES.


Dijiste “no me gusta porque es una extorsión” el mismo discurso que dió Cristina hace unos meses sobre los trabajadores que luchaban.
Puede que este utilizando esto para medir fuerzas, pero eso no quita que exista una lucha de los trabajadores, esta lucha hay que DEFENDERLA!!!

te estoy diciendo que depetri lee antes de contestar

Debe estar on fire este tema … y yo con laburo, puta madre, a la noche leo y comento.

Cambiá “los” por “les” y “divertían” por “gustaban” y volvé a leer la pregunta…

nah si vos hiciste mal la pregunta arreglatela, no soy tu mulo

La Presidente y Moyano: ¿hasta donde llega la pelea?

Sigo las noticias, las declaraciones y los tweets. Hablo con algunos amigos y leo algunos posts. Y reflexiono, un poco preocupado por viejas historias que no terminaron bien. Igual, siento que la realidad fuerza una respuesta: Esta pelea no “llega” a ningún lado. Se queda donde está. Y sigue.
Me arriesgo al decir esto, porque en las últimas horas están pasando cosas muy rápidamente: el gobierno anuncia acciones penales contra Camioneros; Moyano convoca a un paro nacional, con movilización a la Plaza de Mayor, en los estudios de TN; la Presidente adelanta su regreso al país; la CTA opositora, de Pablo Micheli, y la Unión Ferroviara expresaron su apoyo al reclamo; …
El gobierno ha encontrado un oponente que cultiva su mismo estilo: ante un desafío, doblar la apuesta ¿Alguien no conocía este rasgo de Hugo Moyano? Es algo frecuente, hay que decirlo, en la tradición peronista, que inquieta y crispa a los formados en culturas políticas más mansas. Y, también se debe reconocer, puede llevar a imprudencias graves.
Pero quiero señalar que ya, desde fines del año anterior, el enfrentamiento fue claro y abierto, desde que el gobierno le negó al sindicalismo lugares en las listas (con la tácita aprobación de los aparatos territoriales); está la renuncia de Moyano y sus hombres a sus cargos en el PJ; están las cosas que dijo Cristina hace un mes y medio aquí, y los ”moyanistas” aquí. Hace diez días la CTA opositora hizo un paro con movilización, y Moyano adhirió.
No quiero hacer muy largo este post. El 13 de mayo pasado subí uno donde reuní reflexiones mías y de otros para trazar el cuadro de las relaciones, y las tensiones, entre el gobierno y el sindicalismo; creo que sigue siendo válido. Recién, mi amigo Ezequiel Meler subió uno donde hace la historia política de este conflicto. Y hoy a la mañana, Gerardo Fernández había reporteado en su programa sobre el presente de Moyano a Manuel Barge, Sebastián Etchemendy y a mí. Allí están los tres audios (y recomiendo escuchar el de Manolo por su radiografía de Camioneros).
Quiero insistir – como punto central – en algo que dije en el programa de Gerardo: hay una parte política y una parte estructural en este conflicto. Están íntimamente relacionadas, pero son cosas distintas, y no entenderlo lleva a confusión.
Como lucha por el poder político, puede verse, si se quiere, en el marco de la pelea por la sucesión de la Presidente, que – por las características de la política argentina – ya está planteada. Pero esa lucha tiene límites muy claros, que hacen imposible una definición rápida.
Moyano no es una alternativa política creíble. Querría serlo, tiene derecho a ambicionarlo, pero está muy lejos de ello. No es que su “intención de voto” en las encuestas casi no existe; la barrera principal es que apenas ha comenzado la construcción del aparato político sindical que podría encabezar, y muy pocos lo seguirían hoy en un enfrentamiento con el gobierno nacional y los provinciales. Por supuesto, su capacidad de daño es importante, y podría ser un apoyo logístico formidable para el que se plantee enfrentar a la Presidente en las urnas.
Pero… esto sería un acuerdo, por puestos en las listas o cargos en el ejecutivo, que podría hacer cualquier sindicato importante. Lo que no existe hoy en el escenario nacional es una fuerza, un candidato o siquiera una propuesta con posibilidades reales que sea visiblemente más afin a lo que pudiera ser el proyecto político de Moyano, a los objetivos del sindicalismo que… la que encabeza Cristina Fernández. Moyano está dando una batalla política como sindicalista, y eso le pone un techo.
Pero eso mismo le pone límites a la “victoria” que pueda alcanzar Cristina. Ante todo, tengamos claro que la Presidente, y/o sus partidarios más fervientes deben esforzarse por la posibilidad de la reelección. Y lo hacen. Si no fuera así, por esas mismas características de la política argentina que ya aludí, en dos años los ordenanzas ya no le servirían café. Todas las expectativas y las ambiciones estarían volcadas hacia los que podrían llegar.
Es cierto, empiezo por reconocer, que un sector numeroso de los votantes puede mirar con simpatía a una Presidente que “pone límites” al cuco de la clase media, Hugo Moyano. Y algunos de sus fieles pueden especular con esto. Pero sería un error. Porque aquí juega la “faz estructural” que mencioné. Enfrente no está, en realidad, el hasta ahora Secretario General de la CGT. Está la Federación Nacional de Trabajadores Camioneros, Obreros y Empleados del Transporte Automotor de Cargas, logística y Servicios, que los años de Menem y los de Kirchner han convertido en el sindicato más poderoso de Argentina.
Si mañana el Negro Moyano y sus hijos se “borraran” – sueño húmedo de los kirchneristas no peronistas y de muchos antiperonistas - otra conducción simplemente reiteraría los reclamos de aumento del mínimo no imponible, pago de los aportes pendientes por cargas sociales, extensión de las asignaciones familiares…Ah, y el 30 %.
De todos modos, la naturaleza estructural del conflicto es lo que garantiza su permanencia. Porque, en el fondo, lo que está en juego es la relación con el movimiento obrero.
No puedo evitar repetir lo que ya escribí ”En cuanto a las organizaciones sindicales en su conjunto … son realistas: No van a enfrentarse innecesariamente con un gobierno que les ha permitido recuperar, especialmente a los gremios industriales pero en general a todos, afiliados, es decir, empleos, y poder económico. Y tienen muy claro - lo he repetido muchas veces en el blog – que no existe hoy una opción política realista más favorable a los intereses de la clase trabajadora que el gobierno de Cristina.
Al mismo tiempo, saben que la inflación “del supermercado” afecta a sus bases. Y que, cuando hay trabajo, también hay agitación sindical. No tienen ningún problema en reivindicar la conducción del peronismo por Cristina Fernández de Kirchner, pero sus obligaciones concretas son hacia su gremio. Si el gobierno no brinda respuestas a sus necesidades… porqué – dicen en privado – van a reemplazar a Moyano? Para pulsear con el gobierno, el Negro tiene condiciones.
Y si los acomodamientos internos fuerzan la ruptura… el movimiento obrero peronista tiene una larga experiencia en el asunto. Estarán los gremios “participacionistas”, los más cercanos al gobierno, los “combativos” para chumbarle, y – en el medio, equilibrando – los más fuertes, para golpear y negociar. Antes se los llamaba “vandoristas”.”
Este sigue siendo el cuadro. La CGT casi seguramente se dividirá (más). Porque ya los “Gordos” estaban prácticamente afuera, Barrionuevo encabezaba la CGT Azul y Blanca, están las dos CTA, … Y? Como dice Ezequiel Meler “una fractura de la CGT en ningún sentido implica una novedad en la historia de la central, que ha pasado más tiempo dividida del que estuvo unificada“.
En este plano, y en la instancia por la que atravesamos, tengo una diferencia con el análisis de Ezequiel y con el pensamiento de viejos amigos del sindicalismo: El gobierno nacional no puede perder su condición de árbitro de las demandas sociales, no frente a la presión de un sector ¿Somos o no somos bonapartistas? Eso sí, un bonapartismo de guantes suaves, que evite enfrentar a las fuerzas de seguridad con hombres igualmente duros, con una tradición de pelear por lo suyo. Episodios como los que hubo en Santa Cruz, a escala nacional, serían desastrosos para la moral del oficialismo.
Antes es necesaria la paciencia y la muñeca que, por ejemplo, encauzaron el fenómeno de los piquetes, que tanta irritación y algo de temor provocaba en los argentinos más prósperos que ellos, en la construcción de los movimientos sociales.
Estoy de acuerdo con Meler, y con su amigo Mario Wainfeld, que el gobierno ha cometido un error al hacer tan ostensible la pulseada con Moyano, al retrasar el cumplimiento de reclamos razonables, y, sobre todo, al no permitir canales de negociación. La negociación nunca se debe interrumpir, ni en la guerra. En realidad, es más necesaria en la guerra.
La autoridad presidencial puede, y debe ser, indiscutida sobre los funcionarios. Sobre los sindicalistas, como sobre los argentinos en general… es necesario aplicar las máximas de Perón, que señalaba que conducir no es mandar sino convencer.

Militarizan a los trabajadores

En febrero de 1958, Arturo Frondizi ganó más ampliamente que CFK, en octubre pasado, pero en noviembre del mismo año ya había militarizado una huelga petrolera y en enero siguiente aplicaba un plan ‘Conintes’ contra todos los trabajadores.
En septiembre de 1973, otro presidente superó a la actual en votos, pero en febrero del ´74 militarizaba la provincia de Córdoba y en abril de ´75 ese gobierno lo hacía con todo el cordón industrial del Paraná.
Menem, que también tuvo mayoría de votos, arrancó enseguida con una cruzada contra los trabajadores, para rematar mejor las empresas estatales.
De la Rúa, el lento, fue más rápido, porque apenas subió produjo la muerte de dos manifestantes en el puente Corrientes-Resistencia.
La presidenta actual, que machaca toda vez que puede con su 54% eterno, eligió el día de la Bandera para mandar la Gendarmería contra los camioneros.
Esta vez la secundan los nacionales y populares más belicosos y radicales, los que se reclaman herederos de los luchadores que fueron víctimas de los atropellos del pasado.

¿Por qué militariza?
¡Para defender el tope a las paritarias, el impuesto al salario, la ‘sintonía fina’ y el intento de convertir a la CGT en una sucursal digitada por la Rosada!
El gobierno que nunca convocó a una reunión de gabinete, anunció que ahora reunirá un “gabinete de emergencia”.
Los alcahuetes del oficialismo ya dicen que la huelga de camioneros es ‘destituyente’, pero el gobierno podría superarla eliminando el impuesto al salario y liberando la negociación colectiva.
¿O también piensan militar a los controladores aéreos, a la Alimentación o a los aeronavegantes que ya han anunciado medidas de fuerza?

¿Los K quieren ‘dar un lección’ a los camioneros y, reforzando el poder político, asegurar la re-reelección?
En ese caso estaría copiando a Ronald Reagan, un ‘prócer’ que los Nac & Pop juraron que no iban a imitar.
La reacción del gobierno K contra los camioneros es la del capital contra el trabajo, el de la burguesía contra la clase obrera, el de los gobiernos que enfrentan la bancarrota capitalista con el ‘ajuste’.
Estamos con los camioneros y sus reivindicaciones –que son las de toda la clase obrera- contra sus patrones y contra el gobierno de la ‘burguesía nacional’.

ojalá esto sirva para modificar ganancias, para que le den más bola a los trenes, y para que aumenten los sueldos, eso de que el 30% es inviable no es así, porque todos los ajustes se lo come el trabajador???