Con Gallardo siempre caemos en la exageración…
Claramente Gallardo no tenía el temperamento para ganar el solo los partidos y los campeonatos, porque cuando el asunto iba mal reaccionaba con rabia y se hacía expulsar…
Pero hay que recordar que en esos partidos NINGÚN OTRO JUGADOR apareció para liderar al equipo, y por eso toda la responsabilidad, TODA, le quedaba a Gallardo. Los partidos decisivos en que Gallardo se hizo expulsar por lo general eran juegos en los que River como conjunto era superado ANTES de la expulsión de Gallardo. En ese juego de Libertad, por ejemplo, yo recuerdo que el único que apareció para intentar y hacer algo fue… Farías :shock:
A Gallardo claramente le quedaba grande el papel de caudillo. Pero eso no pude ocultar que era un 10 magnífico, que hacía a River jugar fútbol de verdad, pero que muy rara vez hizo parte de un equipo de verdad, bien armado (solo con Astrada) donde no tuviera que soportar él solo el peso de la responsabilidad. Cuando el equipo estaba bien montado Gallardo lo hacía andar muy bien.
Por otra parte yo no pongo en duda que Gallardo de verdad quería a River y por eso volvió (si no recuerdo mal, Aguilar le incumplió en sus promesas de comprarle la mitad del pase, y le quedó debiendo guita de la prima) pero igual se quedó hasta que Passarella lo hizo marchar.
El caso Merlo lo terminó de quemar, pero yo no soy de los que cree que Gallardo le hizo la cama. Leyendo lo que declaró Gallardo y lo que declaró Merlo se puede ver que coincidían las versiones: Gallardo le hizo un planteo porque él se quería ir, Merlo indagó y se dió cuenta de que casi todo el plantel estaba en su contra y por eso decidió dar el paso al costado… lógicamente Aguilar aprovechó para montar a Passarella, y seguramente a Gallardo esto le agradó… pero no es lo mismo que decir que Gallardo conspiró en contra de Merlo.
En resumen, yo pienso que Gallardo no tenía carácter para ser el único referente de River, que pagó muy caro su participación en la salida de Merlo (tuvo su parte pero no lo creo cómplice de una conspiración) y que se equivocó en varios partidos clave… pero que de todas maneras era un 10 magnífico, con calidad y que quería al club, que hubiera ganado muchos más títulos en su segunda etapa (de hecho, ganó más en la primera etapa cuando el equipo del que hacía parte era mejor, y habían más referentes para compartir la responsabilidad) si hubiera sido parte de un equipo bien armado… solo parte, no “la tabla de salvación”. Gallardo pagó por ser el referente del plantel en la “era papada”, porque lamentablemente cuando el barco empezó a hacer agua todos miraron hacia el referente y no hacia el verdadero culpable, el mayor ladrón: Papada, el capitán del barco.