Luis
1 Octubre, 2007 07:44
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Gon:
[quote=maury02]Yo no le caería tan duro a los marcadores centrales de River… para mi la clave fue el flojo partido de Domingo, quien fue literalmente bailado por Kak… perdón, por el pibe… Diaz? (el peladito).
Viene de un parate de 6 meses Domingo, fue una muy mala decisión ponerlo de arranque
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seguro… fue lo que dije despues del partido del jueves, cuando muchos foristas lo pedian de titular… al pibe le falta bastante y todavia pasarán varios partidos para que vuelva al nivel que tenía antes…
Me pareció excelente la columna de Farinella, relacionada con este partido:
El Barba no entra en la rotación
LEO FARINELLA lfarinella@ole.com.ar
Falcao hizo el mismo gol del inolvidable 4-2 a Botafogo, igualito, idéntico vuelo acrobático sostenido por un ángel (o Angelito) y la pelota que se mete atrás del arquero, que había sido figura. River lo pudo (y debió) ganar antes y también lo pudo haber perdido. ¿Hace falta seguir enfatizando las similitudes con Botafogo? Hace unos días comprobamos que los milagros existen, pero tampoco hay necesidad de exigirle al de arriba que juegue dos partidos por semana.
Mientras River mantenga esa vocación suicida de ir a 200 y volver a 20, necesitaremos milagros o mucha puntería: ayer mismo, River pudo hacer seis goles. Y Central, si no se hubiera dedicado a tirarse el piso y demorar casi enfermizamente, cinco nos metía seguro. Como en este país está todo al revés, se va a criticar lo que adicionó el árbitro y nadie va a reparar en si fue justo. Dirán que es una vergüenza lo de Lunati: vergüenza fue lo de Central: ¿por qué si puede jugar buen fútbol se dedica al antifútbol? Ya le había pasado a Boca con los jujeños. Vergüenza fue que Amarilla adicionara sólo tres minutos cuando los de Botafogo habían hecho más teatro que Darío Víttori. Un juez que combate la trampa termina acusado de tramposo. Argentina, bienvenidos.
Y bienvenido Diego Buonanotte. Un golazo, dos tomá y hacelo, tres toques de distinción, cuatro gambetas, cinco letras tiene la palabra crack, y seis un pedido onda súplica a Passarella: ponelo.