Original idea de la FIFA para frenar el juego brusco
La terrible patada del inglés Martin Taylor podría marcar un antes y un después en el reglamento. El máximo organismo quiere que el jugador violento cumpla sanción hasta que se recupere “su víctima”
La FIFA no está conforme con la sanción de tres partidos con los que la Federación inglesa castigó al defensor inglés Martin Taylor, del Birmingham City, por la grave lesión que le produjo al brasileño Eduardo Da Silva, en un partido ante el Arsenal de la Premier League. Está resuelta a unificar el reglamento disciplinario en lo que a infracciones violentas se refiere.
Joseph Blatter llevará el tema a las reuniones del comité ejecutivo que se reúne esta misma semana en Zúrich, y parte con una idea fija: que el castigo al agresor dure un partido más de los que la lesión mantenga alejado de los campos al jugador agredido.
Según señala este martes el diario As de España, el proyecto de ley ya tiene nombre: norma de “paridad + 1”, que hace referencia al tiempo de sanción que deberá cumplir el infractor.
Si la norma estuviera vigente, la sanción a Martin Taylor tendría un mínimo de nueve meses de suspensión, que es el tiempo que los médicos del Arsenal calculan que Eduardo tardará en volver a los campos de juego.
Para el joven jugador la entrada del jugador del Birmingham fue una auténtica desgracia. No sólo corta su trayectoria en el Arsenal justo cuando el DT Wenger le había dado más confianza, sino que le impedirá jugar la Eurocopa con Croacia, país por el que es internacional pese a ser brasileño de nacimiento.
El presidente de la FIFA pidió a la Federación inglesa que le mande el expediente de Taylor para estudiarlo a fondo. Quiere que los expertos del máximo organismo del fútbol mundial en asuntos disciplinarios estudien además del vídeo de la jugada y el acta arbitral, la opinión de los médicos sobre el período de recuperación que necesitará el jugador.
Esta polémica tuvo continuidad este domingo, tras la dureza que otro joven jugador, Cristiano Ronaldo, sufrió en el último partido con su equipo, el Manchester United.
El domingo fue el entrenador Ferguson el que se levantó contra los defensores violentos, porque “muchas veces no son sancionados como merecen e insisten en su juego”. Y le siguió su ayudante, Queiroz, que dijo que “los Taylors de turno siguen sobre los terrenos de juego, mientras sus víctimas los ven por la tele postrados en la cama del hospital”.
Me parece muy bien, si te lesionan 1 mes, que un mes no juegue el infractor, lo mismo en estos casos tremendos…
