Leyendo varios thread, varias opiniones, me animé a hacer este pensando en las implicancias que tendrían dos objetivos aparentemente muy parecidos, pero que en la realidad suponen pequeños detalles que al final terminan marcando la diferencia.
Por lo bajo no más, existen diferencias como la del sistema de juego: venimos de un torneo largo para empezar a pensar nuevamente en un torneo corto, y en esta boludez de los promedios. Sin ir más lejos, vean lo que pasó con Tigre, que a punto estuvo de salir campeón, pero al mismo tiempo de jugar la promoción, cuestión que no se definió hasta la última fecha. Y así otras cuestiones que podemos ir discutiendo.
La idea es precisamente esa, pensar en qué factores inciden en decidirse por una u otra cosa.
Claro que algunos querrán insistir en que ambas cosas son lo mismo, pero esto es un juego, habrá que decidirse. Ojo, con este técnico y estos jugadores.
En un principio, a mi esto de salir campeones de todo, es una actitud relativamente soberbia, casi como de hacer un borrón y cuenta nueva de lo que pasó, porque somos River, por la historia, etc. Cuanta gansada se les ocurra, pero resulta que cuando vemos la realidad, hoy el club está con el verso del campeonato económico (gracias [MENTION=21957]INSIDER[/MENTION] y [MENTION=4621]JuAmPi[/MENTION] por los balances) pero con un pasivo que suma y sigue, con dos referentes (o ídolos para algunos) que se terminan yendo por la puerta de atrás, y un sinnúmero de cuestiones futbolísticas y extrafutbolísticas que dan cuenta de una realidad totalmente distinta a aquella donde River todo lo tenía que ganar, por obligación. En este contexto, pueden deducir cuál es la que yo elijo: aquella donde lo que ha pasado sigue siendo tan duro, que no sólo tiene un impacto en las expectativas del equipo para “campeonar”, sino también aquella que entiende que existen cosas que siguen sucediendo, que poco y nada ha cambiado, como para torcer rápidamente el rumbo y creer que, porque estamos en primera, el rey ha vuelto a su trono.