00:00 | RIVER - BOCA: JUAN PABLO CARRIZO
“En estos partidos se demuestra si tenés huevos”
JP recibió 15 goles en cinco partidos pero siente que contra Boca será su partido, como en el Clausura.
MARTIN BLOTTO mblotto@ole.com.ar
El arquero se tiene confianza por sus antecedentes contra Boca: nunca perdió un clásico en Primera, ni oficial ni amistoso.
El Carrizo que volvió de Italia no parece el mismo Carrizo que se fue de River. El pibe que le ganó el puesto a Germán Lux y se convirtió en figura del “arco más grande del mundo” se movía con sencillez, naturalidad y alegría. El que regresó es más serio, introvertido y enemigo de las apariciones públicas. El arquero que se ganó un lugar en la Selección y sedujo a la Lazio transmitía la sensación de ser imbatible. Al de ahora, en cinco partidos le convirtieron 14 goles, tres menos de los que recibió en las 19 fechas del Clausura. Pero hay algo que no cambió en Juan Pablo Carrizo: su fuerte personalidad y sus ganas de festejar contra Boca. “En estos partidos se demuestra si tenés huevos. Nosotros sabemos lo que significa un superclásico y vamos a jugarlo como tal”, dijo.
Carrizo aceptó una entrevista exclusiva con el programa partidario Pasión por River Mendoza, que se escucha en la importante capital cuyana por FM Pasión. Y en el final de la nota sorprendió. “Jugar contra Boca es una posibilidad única. Yo pienso dejar el alma por esta camiseta, más allá de algunas críticas, de que algunos digan que no tengo huevos… No lo considero así. Los verdaderos huevos se ven en los partido difíciles”, se descargó. De todas maneras, no quedó claro a qué críticas se refería, ya que nadie cuestionó (al menos públicamente) ese aspecto del arquero.
Evidentemente, JP se sintió tocado y salió a poner el pecho. Evidentemente, vive de una manera muy particular los duelos contra Boca, por haberse formado en el club y porque las estadísticas le generan una confianza ciega: en Primera, nunca perdió un superclásico, ni oficial ni amistoso. Además, en el último duelo, en la Bombonera, se consagró. Salvó a River de una goleada en el primer tiempo y por eso fue figura (Olé lo calificó con un 10) del 1-1 con sabor a triunfo.
Esa imagen de Carrizo es tan fuerte que, apenas se concretó su regreso, Passarella ya tenía decidido que JP iba a atajar contra Boca, a pesar del gran presente por el que atravesaba Ojeda. Es más, el Kaiser decidió cambiar de arquero antes del partido con Tigre para darle minutos de competencia a JP, para que llegara con ritmo al clásico. El resultado no fue el esperado. El nivel de Carrizo tampoco. Pero su titularidad no se cuestiona. Y menos en este caso… “Trato de vivir la previa como algo especial, por todo lo que es un River-Boca. Nos vienen golpeando de todos lados: la prensa, la gente, que no nos apoya como realmente queremos. Pero nos gusta porque es un desafío. Y es donde aparecen los hombres, en las difíciles. Yo sé que este grupo está bien en ese sentido y por eso actitud no va a faltar, porque nos jugamos la última carta en el torneo. Tenemos personalidad para lograrlo”, resumió.
Más allá de transmitir confianza, Carrizo admitió que le están convirtiendo muchos goles por errores colectivos reiterados. “Lo hablamos para corregirlo pero después en la cancha no podemos… Vamos a poner hasta la última gota de esfuerzo para lograrlo y ganar este superclásico”, aseguró. Y por si hacía falta aclaró que no lo asusta la presión: “Estamos preparados para todo, pero trataremos de que la gente esté de nuestro lado. Queremos ganar y darle una gran alegría”. Con fútbol. Y con huevos, claro…