Perdonen si ya hay un tema sobre esto, pero con la controversia que genera este tema e incluso según Bercovich los mismos dirigentes estarían enojados con Cappa, no solo por su política en cuanto a la preparación física, si no incluso con sus polémicas e innecesarias declaraciones acerca de ella. Cappa parece estar tomando cartas en el asunto:
RIVER
¡Colesterol cero!
Cappa guardó las pelotas por un día, dispuso trabajos físicos para sus muchachos y recién mañana vuelven a juntarse para encarar el inicio de dos semanas clave.
Su verba florida es, muchas veces, un irresistible arma de seducción. Angel Cappa no habla sólo por decir y por eso cada sentencia suya suele ser una nueva carta de invitación al eterno debate de ideologías futboleras. Quizá sea este motivo el que lo lleva a radicalizar conceptos, a profundizar las antípodas. A decir que “hay un fútbol que se juega bien y otro de mierda” o a resumir la preparación física para aquéllos que intentan ahuyentar rollitos o combatir al colesterol. Y en River ya no está Fabbiani. Pero Angelito sabe bien que un poco de abdominales y sentadillas no hacen daño. Entonces, que el calendario se haya pateado una semana para adelante le permitió destinar una jornada completa a puntualizar aspectos físicos de sus muchachos.
Cappa, desde su método, desmitifica las pretemporadas fatigantes y el abusivo uso de pesas y chalecos lastrados. Pero esto no quiere decir que no trabaje ni que camine solo en su enfoque de una óptima puesta a punto. Cuenta que alimentó su teoría observando diversos entrenamientos en la cúspide europea y, además, tiene una estrecha relación con Paco Sirulo, el PF del Barcelona. Y el equipo de Guardiola debe ser de los que más partidos juega por año y no se lo nota muy agitado que digamos… “La velocidad, en el fútbol, tiene que ver con la precisión, con anticipar la jugada, y para mí la fuerza también es distinta: es astucia”, describe Angel en un diálogo con Sirulo, publicado por el diario Marca a fines del 2007.
Para River, una rutina atípica desde el vamos se fue modificando aún más con el andar de una semana histórica para la Argentina. Dos días libres al principio, tres de fútbol, fútbol y más fútbol, y ayer nada de pelota. Por ende, el último indicio hacia un posible equipo para enfrentar dentro de una semana a All Boys es el que tiene un dibujo 4-4-1-1, con Cirigliano y Ballón como doble cinco, a la espera del alta definitivo para Almeyda, con la probable vuelta de Buonanotte de arranque y Ortega casi afuera. Caruso tuvo dos práctica a puro gol, es cierto, aunque la chance de jugar para los titulares le llegó por molestias de Pavone y Funes Mori, quienes ayer retomaron los ejercicios a la par y no deberían tener problema para participar del próximo ensayo de fútbol. Que seguramente será mañana por la tarde, cuando el plantel vuelva a juntarse después de casi dos días libres. Libres de grasas y de colesterol.