Aunque no tenga contrato (insólito), mejor que lo haya llevado y lo tenga contento. No sea cosa que nos pase con Dadín lo que nos sucedió con Panichelli, que jugaba bárbaro en reserva y, fastidioso por no tener su chance en primera, se fue a Europa y ahora la rompe en el Mirandés. Está a un paso de ascender, juegan la vuelta el sábado contra el Real Oviedo (ganaron de local 1 a 0 la ida). De seguro termina en algún club B o C de Europa, es muy bueno de verdad. Cuando juegue en la Selección Argentina nos vamos a acordar mucho de Francescoli y Gallardo.