También es una ventaja mientras mas temprano se tiene contacto con la segunda lengua o con un instrumento musical: quienes aprenden una segunda lengua a temprana edad tienen mas materia gris, mientras mas temprano, mas evidente es la modificación de cerebro.
Investigaciónes, realizada por expertos del University College de Londres (UCL) y publicada en la revista Nature, indicó que las personas bilingües poseen “más materia gris” en la parte inferior de la corteza cerebral parietal.
El efecto, descubierto a través de complejos escáners, es aún más notable cuando el segundo idioma se aprendió antes de los cinco años de edad.
[SIZE=2]Los científicos indicaron que cuanto más tiempo espera la persona para aprender un nuevo idioma, menos modificaciones sufre el cerebro. [/SIZE]
Espero los padres que tengan la oportunidad de leerlo reflexionen sobre la importancia que tiene hoy en día para sus hijos aprender una segunda lengua a temprana edad.
El aprendizaje de un segundo idioma ayuda a desarrollar una parte del cerebro encargada de la fluidez verbal, según se informó un estudio realizado por científicos británicos. Se sabe, por estudios realizados en el campo de la neurociencia y de la psicología cognitiva, (Ellis, 1996; Gardner,1996; Jensen, 1996: Jonson Laird, 1990; Calvin, 2001) que nuestro cerebro está neurológicamente preparado para aprender. Tenemos un programa genético predeterminado. Éste incluye la capacidad de aprender los cincuenta y dos sonidos de los lenguajes universales, su entonación y sintaxis. Cuando aprendemos, nos " ponemos al tanto " y / o actualizamos lo que nuestro cerebro ya tiene (Jensen 1996: 6). Los niños activan esta capacidad al ser expuestos a su primera lengua y, al aprender una segunda en edad temprana, siguen el mismo modelo o patrón en lo que se refiere a la adquisición de vocabulario y construcciones complejas. En la primera infancia su necesidad de comunicación[SIZE=3][SIZE=2] se ve satisfecha con la emisión de palabras; cometen errores, pero no son corregidos a menos que el mensaje sea [FONT=arial, helvetica, sans-serif]ininteligible.[/SIZE][/FONT] El punto de vista racionalista adoptado por Jacobovits atribuye al niño un dispositivo cognitivo para la adquisición del lenguaje (1968) el cual lo guía en el descubrimiento de las reglas universales de formación del idioma – reglas gramaticales- al cual está expuesto desde su nacimiento. [FONT=arial, helvetica, sans-serif][SIZE=2]Investigaciónes, realizada por expertos del University College de Londres (UCL) y publicada en la revista Nature, indicó que las personas bilingües poseen “más materia gris” en la parte inferior de la corteza cerebral parietal. [/SIZE][/FONT]
[SIZE=3][FONT=Arial]El efecto, descubierto a través de complejos escáners, es aún más notable cuando el segundo idioma se aprendió antes de los cinco años de edad.
Los científicos indicaron que cuanto más tiempo espera la persona para aprender un nuevo idioma, menos modificaciones sufre el cerebro.
La “materia gris” del cerebro está compuesta principalmente por “cabezales” de nervios, que son responsables del procesamiento de información. En cambio, la “materia blanca” está compuesta por finos filamentos o “axones de neuronas”, que se ocupan de los procesos de transmisión de información.
Los expertos saben desde hace tiempo que el cerebro posee la habilidad de cambiar su estructura como resultado de la estimulación, un efecto también conocido como “plasticidad”, Pero aún no queda completamente claro cuán “plástico” puede ser el cerebro.
Sin embargo, la nueva investigación británica demuestra que el aprendizaje de nuevos idiomas puede tener un gran impacto en la estructura cerebral, especialmente en niños pequeños.
También participaron de la investigación 33 bilingües “tardíos” que aprendieron una segunda lengua entre la edad de 10 y 15 años, y que lo han practicado con regularidad durante los últimos cinco.
Estudios con escáners realizados a la densidad de la “materia gris” cerebral en la parte inferior de la corteza parietal mostraron evidencias de que esa materia era mayor en personas bilingües que en aquellos que sólo hablan un idioma.
Los efectos fueron “significativamente mayores” en el hemisferio izquierdo del cerebro, y aun más en las personas bilingües que aprendieron el segundo idioma a temprana edad.
Para los científicos, los efectos del aumento en la densidad de la materia gris podrían surgir de una predisposición genética o por una organización estructural inducida por la experiencia.
“Nuestros hallazgos sugieren que la estructura del cerebro humano se alteró por la experiencia de adquirir una segunda lengua”, explicó Mechelli a Nature.
Además, aclaró que la relación entre la densidad de la materia gris y los resultados de habilidad verbal podría reflejar un “principio estructural-funcional” más general que se extendería aun más allá del lenguaje. [/FONT][/SIZE] Amigos lectores, debo confesarles que no soy psicólogo, ni psiquiatra, ni nada que tenga que ver con el área de la medicina; sino más bien, un investigador de la psicolingüística aplicada al aprendizaje de un segundo idioma. Espero los padres que tengan la oportunidad de leerlo reflexionen sobre la importancia que tiene hoy en día para sus hijos aprender una segunda lengua a temprana edad.
Es sumamente recomendable adquirir una segunda lengua a temprana edad. El periodo de adquisición comienza desde los 3 meses y termina generalmente a los tres, cuatro años, cuando el niño logra la “explosión linguística”. En ese periodo, los módulos cerebrales, que corresponden al área del lenguaje, están abiertos y permiten un aprendizaje más rápido. El temor que el niño vaya a confundir dos lenguas es injustificado. Desde que nace, su cerebro almacena los estímulos lingüísticos correspondientes a su entorno, que no los exteriorice se debe no a una cuestión cerebral sino física, aunque no pueda “hablar”, el bebé puede entender, su cerebro almacena una especie de glosario que, conforme avance su crecimiento, los módulos correspondiente al área de la sintaxis, transformarán en oraciones, frases.
Es decir que si un nene logra la explosión lingüística de su lengua natural a los tres años y, en esa etapa, comienza a aprender otra lengua no habrá ningún problema porque el cerebro ya tenía almacenado de antemano las estructuras de su lengua natural
Rendí esta materia hace poco en la maestría que estoy haciendo, por eso tengo los conocimientos frescos, no es que sea el Pequeño Larousse Ilustrado :lol:
Tiene 2 años y medio, pero ya le estoy metiendo fichas :). Como buena mujer es una cotorra :lol:, se la pasa hablando la muy atorrante. En unos días empieza el jardín. Y en un mes nace un nuevo hincha de River, Lucas Facundo, que es ambidiestro aparentemente ya que a mi mujer la patea violentamente con las dos, jaja Mirá si se moverá que cuando hicimos la ecografía para determinar el género, pasó por tantas posicíones que al toque se levieron las terribles bolas ja
Que bueno que estoy estudiando Idiomas.
Español, Francés, Inglés y el Próximo año pienso estudiar en Linea Italiano e Historia del Arte en una pagina que me encontre
el mio tambien, enfermedad de mierda esa, un dia sabia quien era, se acordaba de toda su vida, y al dia siguiente me veia a mi y me preguntaba quien era.
ahaha buenisimo, ahi voy a empezar este año. espero que no se me haga una ensalada con inglés, se que mucha gente abortó el proyecto alemán por ser difícil…
que buen idioma por dio!
Jodidisimo el alemán. Yo haría holandés antes que ese idioma. El tema es donde carajo lo puedo aprender, además ya estoy embarcado con el francés en el Cui. Bah en una de cambio tiene holandés ahí y no me rescaté.