17 de Octubre... Dia de la Lealtad

Izquierda de las masas finas.:lol::mrgreen:

Pfffff (?), vos todavía no aprendiste lo que yo ya me olvidé

Jugaron al Pendulo Peronauta o no??? Juegazo.

Perdon, lo tenia que poner:)


Le guste a quien le guste, los Derechos que impuso el Peronismo antes no existian(Existian los derechos, pero no los hechos que los materializen) y es incomprobable cuando hubiesen existido si no llegaba Peron y Evita, lejos de ser perfecto, la historia fue asi

Por eso dejo la huella que dejo en nuestra historia, y no me digan que nacio como un movimiento antirevolucionario, que revolucion venia?? Lo que venia era un Liberalismo Pro yankee de acuerdo a la euforia mundial que se vivia…

Que despues Peron se equivoco en el 73, es verdad, un error grave, al menos para mi, pero lo que dejo el Peronismo, la obra de ese Movimiento en este pais es admirable y no se puede estar en contra

Sería una excelente definición del Kirchnerismo.

El peronismo no se considera de izquierda.

A la derecha de la izquierda, y a la izquierda de la sociedad…

Pero a ver… en qué beneficia el ingreso de capital trasnacional a la industria argentina? Por qué decís que se rompe la alianza entre burguesía y trabajadores? Yo creo que es al revés, a partir de allí, la burguesía nacional en los gobiernos que lo suceden desde Perón se van a apoyar en los sindicatos, va a existir una alianza atada con alambre pero necesaria porque a ambos les conviene la vuelta de Perón, los dos sectores quedan débilmente posicionados después de la caída del General. Más los trabajadores, seguro, que pierden sus libertades sindicales su capacidad de negociación salarial. El sector de la burguesía se aleja de Perón a último momento porque Perón abre la competencia a un capital con el que le resulta muy difícil competir.

No me respondiste por qué decís que la burguesía nacional era el sector más poderoso… yo creo que a partir del gobierno de Frondizi y el golpe de Onganía la burguesía nacional empieza a competir a partir de una apertura total al extranjero, no parcial como la que implementó Perón pero cuidando los derechos de los trabajadores, con el capital trasnacional, sumado al capital financiero y el agrícola y queda en una posición cada vez más débil. Es más, yo creo que se empieza a firmar su acta de defunción. Cuando vuelve Perón en el 74, intenta reunir a los trabajadores y la burguesía debajo del “pacto social” pero para esa altura era muy difícil implementar cualquier reforma con un país implosionado, y además los trabajadores y la burguesía se enfrentan por resultar mejor beneficiados en el triángulo amoroso:mrgreen:.

Perón apuntaba sus políticas hacia esa clase, lo que para mí es fomentar el desarrollo de un país, de hecho abre el comercio al extranjero pero eso es discutido y consensuado, controlado. Ya sabemos lo que terminó pasando con esa burguesía cuando sin preguntar nada los gobiernos más recientes a partir de la dictadura se apoyaron en el capital financiero en detrimento de cualquier tipo de desarrollo nacional, sí, dejó de existir como clase.

La clase dominante no es una sola, en la concepción gramsciana una “alianza” de clases tiene la hegemonía del poder del Estado, no hay una sola, cómo se conforma esa alianza depende de la lucha por esa hegemonía. Muy bueno todo lo que escribiste, genial, y no voy a dejar de remarcarlo, pero después también hay otras revisiones que aportan más también (James, Torres, Casullo, Gilliespi, etc.), y sobre todo en un tema tan complicado como el peronismo que, por un lado, genera tantas controversias y por el otro, los investigadores que en ese momento tenían la palabra en el mundo académico no supieron leer la realidad e interpretar a las masas, lamentablemente, y hoy en día utilizamos el concepto de Germani de “masa disponible”, que es lamentable y un mamarracho conceptual, para caracterizar la relación entre Perón y los trabajadores. Porque es lo que hay, lamentablemente…

Bueno, queda claro que es “lamentablemente” :stuck_out_tongue:

si si lamentablemente estan esperando que pases por aca
http://www.turiver.com/foros/general/67562-top-ten-de-foristas-femeninas-mujeres-mamitas.html

Vos si que desvirtuas con estilo, eh? :smiley:

Res non verba

No way :evil:

Subilas voluntariamente o las subimos nosotros

Les paso una parte de un trabajo que hice hace unos años, domiciliario, en el que discuten un par de autores la visión de Germani sobre la clase obrera y el peronismo :oops: mucho mejor que fotos :stuck_out_tongue:

5- Durante la etapa que se desarrolla entre los años 1943 y 1946, se da proceso que sentará las bases para la consolidación del peronismo en 1946, con el triunfo electoral de Juan Domingo Perón. En el ascenso de Perón al poder aparece como un actor de gran relevancia el movimiento obrero. Se puede advertir claramente, por ejemplo, en los sucesos del 17 de octubre de 1945, cuando una gran masa de trabajadores sale a las calles a pedir su libertad.
Esta etapa sucede a la década de 1930, donde asistimos al período de la restauración conservadora, luego de la caída de Hipólito Yrigoyen, con la vuelta a las prácticas de fraude electoral. El clase gobernante, a partir de la crisis de 1929, que golpeó duramente en diversas regiones del mundo, propone ampliar el papel del Estado: era necesario iniciar un proceso de sustitución de importaciones para cubrir el “vacío” llenado anteriormente por los bienes de consumo que se importaban a la Argentina. Este crecimiento industrial es acompañado por un gran crecimiento del empleo y mano de obra, desplazamiento desde sectores agrícolas al sector industrial de una gran masa de trabajadores (migración interna, del campo a las zonas urbanas). Esto va a generar profundos cambios en la conformación de la clase obrera. Además, estos cambios fueron acompañados por una política de represión y explotación de los trabajadores, cuyos salarios eran precarios. Los diferentes autores intentan dar respuesta a muchos interrogantes, se preguntan de qué manera estos cambios influyeron en la conformación del movimiento peronista, y hasta qué punto los trabajadores se presentan como actores autónomos con respecto a su líder.
Gino Germani propone una diferenciación entre “nuevos” o “recientes” y “viejos” obreros, en un momento en el cual, la migración interna reemplaza a la internacional. Esto genera cambios que producen un gran impacto, modificando sustancialmente la composición de las clases bajas. Los “viejos” tenían una orientación “hacia el exterior” identificada con las ideologías marxistas y comunistas e interesados por los sucesos internacionales. Eran en su mayoría, inmigrantes o hijos de inmigrantes europeos, que vivían en los centros urbanos y trabajaban en el área industrial. Los “nuevos” eran gente cuya situación previa se caracterizaba por un estilo de vida y experiencia laboral no industriales y menos modernos. Germani plantea que los migrantes internos, los “nuevos”, fueron el componente más importante del voto peronista.
Estos nuevos actores sociales irrumpen, según el autor, bajo la forma de adhesión a un líder carismático, no mediada por organizaciones de clase ni fundada en una conciencia obrera claramente estructurada. La mayoría de estos obreros no estaban agremiados, se movilizaban espontáneamente, respondiendo al líder (“…el apoyo de las masas era para el líder, no para la organización.”). Esto genera “pérdida de autonomía” a nivel organizacional (no al nivel de las bases, que ejercían presiones, no por motivos políticos sino por condiciones concretas de trabajo). Germani señala que tienen un rol importantísimo, tanto en la acción callejera (particularmente en los sucesos del 17 de octubre), como en las elecciones. El fenómeno es consecuencia del rápido desplazamiento de una gran masa de población y su posterior movilización que no encontró expresión política apropiada en la estructura preexistente de partidos y sindicatos, y es cooptada por el peronismo. Es decir, la clase obrera preexistente no logra adhesión entre los “nuevos” trabajadores, y son movilizados por un líder carismático, Perón.
Murmis y Portantiero discuten con la hipótesis de Germani, que postula la separación organizacional entre “viejos” y “nuevos”, que no participan de organizaciones comunes, y convierte a los “nuevos” en “masas disponibles” cuya existencia da lugar a la formación de movimientos políticos que las canalizan, las manipulan. Entienden esto como una dicotomía entre tendencias a la acción autónoma y tendencias a la acción heterónomas que caracterizarían sus respectivos comportamientos políticos. Para los autores, el punto de partida de este razonamiento es la dificultad que encuentran los sindicatos tradicionales para organizar a los nuevos contingentes de trabajadores, y el punto de llegada la organización de estos a partir del aparato estatal. Proponen demostrar el carácter racional de la adhesión de una gran masa de trabajadores al peronismo.
Proponen, más que destacar divisiones internas dentro de la clase obrera, tomar como punto de partida su opuesto: la unidad de ésta, como sector social sometido a un proceso de acumulación capitalista sin distribución del ingreso, durante el proceso de industrialización bajo control conservador que tiene lugar en la década del 30. Esta situación anterior derivó en la configuración de nuevas reivindicaciones y demandas que el sindicalismo intentó satisfacer sin éxito hasta que, entre 1944 y 1946, cuando Perón es secretario de la Secretaría de Trabajo y Previsión, a través de acciones políticas estatales, van encontrando solución. Sobre esta base, la mayoría de los sindicatos, viejos y nuevos, articulan una política de alianzas con un sector del aparato del Estado, sin abdicar durante este proceso y por lo tanto reforzando sus pretensiones tradicionales de autonomía e independencia frente a otros sectores sociales. Es un punto central la asincronía entre acumulación y distribución para explicar la conducta de la clase obrera. De allí proviene la racionalidad de la misma, los sectores obreros son cooptados por el peronismo porque ven allí posibilidades de mejoras en sus condiciones de vida.
Torre coincide en la ruptura de Murmis y Portantiero con la visión de Germani, pero prefiere rescatar de esta interpretación, una dimensión importante: cual es la constitución de nuevas identidades colectivas populares. Argumenta que los autores en su esfuerzo por refutar la hipótesis del irracionalismo obrero, desplazan el foco de análisis del campo de la política (la cuestión del tipo de vínculo entre las masas y Perón) y dirigen su mirada al campo de la lucha social, en donde se articula el interés de clase. Si bien el cálculo de utilidades preside el acercamiento inicial a Perón, éste se resuelve en una identificación política directa.
Incorpora como nueva dimensión la modalidad que asume la incorporación política de las masas. Es una intervención de origen externo la que provee la cohesión que los trabajadores no están en condiciones de generar. Toma el concepto de “democratización por vía autoritaria” de A. Touraine, que designa un proceso en el cual el cambio político es motorizado por la acción de ruptura de la elite estatal (iniciativa lanzada “desde arriba”). Pero en el caso del peronismo, para el autor, esto no implica hablar de heteronomía popular, ya que si bien la incorporación de las masas es dirigida “desde arriba”, es una acción de clase obrera la que se organiza y pasa a animar los conflictos de la sociedad argentina.
James incorpora un nuevo interrogante: por qué el desenlace adoptó la forma específica de peronismo y no otra diferente. Propone considerar el atractivo político ideológico de Perón. El mismo consiste en su capacidad para redefinir la noción de ciudadanía dentro de un contexto más amplio. La cuestión de la ciudadanía en sí misma, y la del acceso a la plenitud de los derechos políticos, fue un aspecto poderoso del discurso peronista, que logró interpelar a los trabajadores, ya que contenía un lenguaje de protesta frente a la exclusión política. Redefine el problema de la ciudadanía en un molde nuevo, de carácter social. Le otorgó a la clase trabajadora un reconocimiento como fuerza social propiamente dicha, que solicitaba reconocimiento y representación como tal en la vida política de la nación. Esta afirmación suponía un nuevo concepto de las legítimas esferas de interés y actividad de la clase obrera y sus instituciones.
Remarca también la cuestión de la credibilidad como un aspecto decisivo para comprender la exitosa identificación de Perón con símbolos importantes, tanto con la industrialización como con las reivindicaciones sociales y políticas de la clase obrera.


Bue, leelo giiiiil antes de poner que no te gusta, me saqué 10 :mrgreen:

Yo hoy fuí a buscar mi nota de sociología … 10 también :cool: … que mentira es esa cátedra por favor

PD: fotos sí, monografías no!

Bue pero mi 10 fue en una de mas materias más importantes y difíciles de la carrera ¬¬ bien che!! Te felicito igual, falta saber qué me saqué en el trabajo que le hice a Hernanes :mrgreen:

Ahora subo!

En serio se lo hiciste al final ? :lol:

Que caradura por favor, me tiro un par de conceptos nomas, bastante pobre su participacion.

Acordate que la época que yo hablo es a partir de la crisis del modelo mercadointernista del '49. Sin las inyecciones de capital extranjero era imposible pasar de esa industria liviana no integrada agotada a una industria pesada independiente. Muchas ramas del ámbito industrial (metalúrgicas, petroquímicas, entre otras) estaban estancadas por falta de divisas. Y en esto tiene que ver la maquinaria obsoleta, el deterioro de los servicios, donde se destacaban la escasa electricidad y el problema del transporte, sobre todo ferroviarios (que cuando fueron “nacionalizados” -se compraron a Inglaterra para recuperar las libras bloqueadas debido a su inconvertibilidad desde 1939- ya eran obsoletos) los cuales no fueron renovados por el Estado.

Así es como se redujo el crédito industrial y se alentó la radicación de empresas grandes (los acuerdos petroleros con la Standard Oil de California que firmó Perón son la muestra cabal).

La alianza se rompe a partir del '49, producto de la crisis de productividad y de la recesión. Perón fomenta una alianza de clases en la que los trabajadores obtenían avances en el tema salarios y bienestar social, arbitrio del gobierno mediante, ante una burguesía industrial (que no es la más poderosa, pero definitivamente crece en este período, tanto por la orientación nacional hacia ese sector ya desde el consejo nacional de posguerra, como por el viraje hacia el industrialismo que toma el capitalismo mundial) que crecía de la mano de las subvenciones y los créditos del Banco Industrial financiado por el IAPI (y acá se puede ver con nítidez la gigantesca dependencia del mercado externo para el desarrollo del modelo industrialista argentino, y en lo que puse más arriba la dependencia de los bienes industriales extranjeros, sobre todo los combustibles. O sea, una doble dependencia).

Me parece que no me hace falta explicarte lo que pasa en períodos en donde la producción se para o se reduce, y por donde cortan los costos los empresarios para mantener el margen de ganancias. Los trabajadores y la burguesía son dos grupos antagónicos, con intereses opuestos, y solo una alianza fomentada por un tercer organismo es capaz de mantenerlos unidos, y para eso debe apoyarse en el crecimiento económico, y en el caso de países subdesarrollados como Argentina, de la coyuntura internacional. Eso es lo que hizo Perón hasta la crisis del '49.

Jaajaja no, lo digo para molestarlo… nada más le tiré una mínima ayudita… le di un empujoncito hacia la victoria… cómo le voy a hacer todo el trabajo?? Apenas si llego con los míos y mis parciales, mis exposiciones, etc.:evil:

Por favor amigo, no nos ofenda. Nosotros no somos ni de izquierda ni de derecha, somos la tercera posición :cool: