Un River de dos caras - Rock And Ball

Bueno. Vengo a traer un poco energia positiva ante tanto ANTI dando vuelta. Que no nos coma el alarmismo la cabeza. Falta mucho por mejorar, pero estamos en ese proceso.
Esto es lo que yo vi del partido de ayer.
MG en la pagina asi me ayudan con la difusion???!!!

Un River de dos caras | Rock 'N Ball

Los leo.

UN RIVER DE DOS CARAS

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TITULARES
26/08/2013 | POR MARCOS NAZAR (EDITAR)

Luego de 41 partidos, se acabó el invicto de Ramón Díaz en condición de local como entrenador de “la banda”. River cayó derrotado en el monumental por 2 a 1 frente a Colón en un partido extraño.

Lanzini tambien mostró dos caras. Un buen PT y una floja segunda mitad.

Tan solo cuatro días después del desgastante triunfo ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro por Copa Sudamericana, River debía recibir a Colón de Santa Fe en el monumental por la cuarta fecha de este torneo Inicial 2013. Por primera vez, el “Riojano” podía contar con todo su plantel para el armado del equipo. Teo Gutiérrez, ese delantero por el que tanto pidió, finalmente consiguió su habilitación para poder jugar. Y aunque faltó Jonathan Fabbro, que tuvo que pagar la fecha de suspensión recibida por el planchazo en el partido frente a Central, ya se va dilucidando el equipo que quiere Ramón.

En la fría tarde noche de Núñez se vieron bien marcadas las dos caras que tiene este River. Durante la primera mitad, específicamente los primeros 25 minutos, se vio un River ofensivo, vertiginoso, con mucha actitud, con mucho fútbol, presionando al rival en su propia área no dejo ni siquiera pasar mitad de cancha al equipo visitante. Con Ledesma como eje del equipo, conLanzini pidiendo todas las pelotas, con Vangioni asociándose con Rojas por izquierda se vio lo que fue, quizás, la mejor versión de River en esta tercera etapa de Ramón como DT. No tanto por la cantidad de jugadas generadas, que fueron algunos centros bien colocados y un mano a mano increíble que le tapó Montoya a Mora luego de una excelente jugada colectiva. Sino más que nada por el volumen de juego y la intensidad mostrada.

La segunda parte, fue exactamente otro partido. El mismo Colón que no había pasado la mitad de la cancha durante la primera mitad, salió decidido a presionar a River en el medio campo. Cada vez que la sociedad Lanzini-Ledesma intentaba hacer circular la pelota, había 4 jugadores de los dirigidos por Forestello para marcar. Esta presión sobre Ledesma, logró que River pierda el eje. El “lobito” se vio superado y así, como cuando se saca la pieza clave de un jenga, todo el equipo se desmoronó. Los nervios se hicieron presentes y esa desesperación por no poder jugar, terminó jugando en contra. Tan solo 7 minutos se llevaban jugados, cuando una falla defensiva colectiva (porqué pifiaron todos) le dio el 1 a 0 a los visitantes. Con eso, a los “sabaleros” solo les quedaba esperar siendo espectadores de la impaciencia de River.

Esa fue la otra cara de River, sin Ledesma funcionando, se vio un River perdido, sin idea de nada, al que se lo comía la presión. Lanzini y Mora desaparecidos, Teo impreciso y lejos del área, siendo Vangioni el único que demuestra que está a la altura de las exigencias, siempre. Para colmo de males, el DT decidió como primera opción sacar a Rojas y mandar al campo a Osmar Ferreyra. Buscaba más tenencia en el mediocampo y renovar el aire. Pero el “malevo”, ya demostró que le falta mucho y si esa va a ser la primera opción ante un partido adverso, es por qué algo está mal.

El ambiente en el monumental comenzó a calentarse y tras otra falla defensiva conjunta, llegó el 2 a 0 para los visitantes a través de una volea de Tito Ramírez. Extrañamente, esa gente que aplaudía a los jugadores cuando perdían contra Atlanta o Atlético de Tucumán en la B, los mismos, ahora exigían. “Año político” le dicen, aunque igualmente es para valorar porque en River siempre es mejor que el publico exija.Para el final, la única jugada que tuvo Teo Gutiérrez adentro del área y que la convirtió. El 2 a 1 que le puso un poco de suspenso al final del partido. Partido en el que River, más allá de su mal juego mostrado en la segunda mitad, no debió perder. Así como Colon tampoco mereció ganar. Pero, se sabe, en el fútbol no se gana ni se pierde por merecimientos. Podría haberlo empatado con el penal que Rapallini decidió no cobrar, pero River a pesar de haber merecido, no hizo demasiado para que eso se lleve a cabo.

Se vienen 10 días claves, en donde el equipo de Ramón enfrentara dos veces a San Lorenzo, una en el Bajo Flores por el torneo el próximo domingo y la otra en el monumental el partido de vuelta del choque de la Sudamericana. Días que definirán para que esta este equipo, si para ser protagonistas del torneo nuevamente o si habrá que volcarse de lleno a la Copa. Queda muchísimo por mejorar, el equipo todavía no encuentra su 11 ideal pero está en ese camino. Con errores, pero también con virtudes, se está buscando armar un equipo competitivo. Y para eso se necesita tiempo de trabajo. Tiempo que, aunque los alarmistas pongan el grito en el cielo, el entrenador tiene la suficiente espalda como para bancar.

Bueno. Vengo a traer un poco energia positiva ante tanto ANTI dando vuelta. Que no nos coma el alarmismo la cabeza. Falta mucho por mejorar, pero estamos en ese proceso.
Esto es lo que yo vi del partido de ayer.
MG en la pagina asi me ayudan con la difusion???!!!

Un River de dos caras | Rock 'N Ball

Los leo.

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TITULARES
26/08/2013 | POR MARCOS NAZAR (EDITAR)

Luego de 41 partidos, se acabó el invicto de Ramón Díaz en condición de local como entrenador de “la banda”. River cayó derrotado en el monumental por 2 a 1 frente a Colón en un partido extraño.

Lanzini tambien mostró dos caras. Un buen PT y una floja segunda mitad.

Tan solo cuatro días después del desgastante triunfo ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro por Copa Sudamericana, River debía recibir a Colón de Santa Fe en el monumental por la cuarta fecha de este torneo Inicial 2013. Por primera vez, el “Riojano” podía contar con todo su plantel para el armado del equipo. Teo Gutiérrez, ese delantero por el que tanto pidió, finalmente consiguió su habilitación para poder jugar. Y aunque faltó Jonathan Fabbro, que tuvo que pagar la fecha de suspensión recibida por el planchazo en el partido frente a Central, ya se va dilucidando el equipo que quiere Ramón.

En la fría tarde noche de Núñez se vieron bien marcadas las dos caras que tiene este River. Durante la primera mitad, específicamente los primeros 25 minutos, se vio un River ofensivo, vertiginoso, con mucha actitud, con mucho fútbol, presionando al rival en su propia área no dejo ni siquiera pasar mitad de cancha al equipo visitante. Con Ledesma como eje del equipo, conLanzini pidiendo todas las pelotas, con Vangioni asociándose con Rojas por izquierda se vio lo que fue, quizás, la mejor versión de River en esta tercera etapa de Ramón como DT. No tanto por la cantidad de jugadas generadas, que fueron algunos centros bien colocados y un mano a mano increíble que le tapó Montoya a Mora luego de una excelente jugada colectiva. Sino más que nada por el volumen de juego y la intensidad mostrada.

La segunda parte, fue exactamente otro partido. El mismo Colón que no había pasado la mitad de la cancha durante la primera mitad, salió decidido a presionar a River en el medio campo. Cada vez que la sociedad Lanzini-Ledesma intentaba hacer circular la pelota, había 4 jugadores de los dirigidos por Forestello para marcar. Esta presión sobre Ledesma, logró que River pierda el eje. El “lobito” se vio superado y así, como cuando se saca la pieza clave de un jenga, todo el equipo se desmoronó. Los nervios se hicieron presentes y esa desesperación por no poder jugar, terminó jugando en contra. Tan solo 7 minutos se llevaban jugados, cuando una falla defensiva colectiva (porqué pifiaron todos) le dio el 1 a 0 a los visitantes. Con eso, a los “sabaleros” solo les quedaba esperar siendo espectadores de la impaciencia de River.

Esa fue la otra cara de River, sin Ledesma funcionando, se vio un River perdido, sin idea de nada, al que se lo comía la presión. Lanzini y Mora desaparecidos, Teo impreciso y lejos del área, siendo Vangioni el único que demuestra que está a la altura de las exigencias, siempre. Para colmo de males, el DT decidió como primera opción sacar a Rojas y mandar al campo a Osmar Ferreyra. Buscaba más tenencia en el mediocampo y renovar el aire. Pero el “malevo”, ya demostró que le falta mucho y si esa va a ser la primera opción ante un partido adverso, es por qué algo está mal.

El ambiente en el monumental comenzó a calentarse y tras otra falla defensiva conjunta, llegó el 2 a 0 para los visitantes a través de una volea de Tito Ramírez. Extrañamente, esa gente que aplaudía a los jugadores cuando perdían contra Atlanta o Atlético de Tucumán en la B, los mismos, ahora exigían. “Año político” le dicen, aunque igualmente es para valorar porque en River siempre es mejor que el publico exija.Para el final, la única jugada que tuvo Teo Gutiérrez adentro del área y que la convirtió. El 2 a 1 que le puso un poco de suspenso al final del partido. Partido en el que River, más allá de su mal juego mostrado en la segunda mitad, no debió perder. Así como Colon tampoco mereció ganar. Pero, se sabe, en el fútbol no se gana ni se pierde por merecimientos. Podría haberlo empatado con el penal que Rapallini decidió no cobrar, pero River a pesar de haber merecido, no hizo demasiado para que eso se lleve a cabo.

Se vienen 10 días claves, en donde el equipo de Ramón enfrentara dos veces a San Lorenzo, una en el Bajo Flores por el torneo el próximo domingo y la otra en el monumental el partido de vuelta del choque de la Sudamericana. Días que definirán para que esta este equipo, si para ser protagonistas del torneo nuevamente o si habrá que volcarse de lleno a la Copa. Queda muchísimo por mejorar, el equipo todavía no encuentra su 11 ideal pero está en ese camino. Con errores, pero también con virtudes, se está buscando armar un equipo competitivo. Y para eso se necesita tiempo de trabajo. Tiempo que, aunque los alarmistas pongan el grito en el cielo, el entrenador tiene la suficiente espalda como para bancar.