En el complemento de la décima tercera fecha del torneo inglés, Tottenham sabía que tenía que superar como local a Wigan para mantenerse prendido en las primeras colocaciones y consiguió el objetivo con un resultado que quedará marcado en la historia de la Premier League: 9-1.
El primer tiempo terminó apenas con un gol, el convertido por Peter Crouch, pero en el complemento los Spurs aprovecharon a un más que inspirado Jermain Defoe para provocarle a su rival una goleada humillante. El delantero metió cinco, mientras que los otros tres fueron de Aaron Lennon, Niko Kranjcar y Chris Kirkland, en contra. El del honor lo hizo Paul Sharner.
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En el complemento de la décima tercera fecha del torneo inglés, Tottenham sabía que tenía que superar como local a Wigan para mantenerse prendido en las primeras colocaciones y consiguió el objetivo con un resultado que quedará marcado en la historia de la Premier League: 9-1.
El primer tiempo terminó apenas con un gol, el convertido por Peter Crouch, pero en el complemento los Spurs aprovecharon a un más que inspirado Jermain Defoe para provocarle a su rival una goleada humillante. El delantero metió cinco, mientras que los otros tres fueron de Aaron Lennon, Niko Kranjcar y Chris Kirkland, en contra. El del honor lo hizo Paul Sharner.
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