[b]Desde la tormentosa partida de Marcelo Gallardo, River viene sufriendo la abstinencia de un enganche que esté a la altura de las circunstancias. En estos últimos tres partidos se vio la ausencia de un jugador que no tenga miedo de pedir la pelota y que pueda manejar los hilos del equipo.
[/b]Una realidad más allá de este fracaso deportivo es que desde hace años que en el césped del Monumental no se ve un enganche capaz de ser un líder dentro y fuera del campo. Un conductor que aparezca en los momentos que el equipo más lo necesita para sacarlo a flote o para aguantar la pelota y salir de la presión del rival.
Con estas palabras, a todos se nos viene a la cabeza apellidos como Riquelme, D´Alessandro y Verón, por más que este último no sea un clásico enganche pero sí un armador de juego. Estos jugadores son el fiel reflejo de lo que falta en River. Gracias a ellos sus equipos juegan con esa tranquilidad propia de saber que tenés un referente en la cancha que te va a marcar la diferencia.
Actualmente el equipo cuenta con jugadores como Diego Buonanotte y Ariel Ortega, que quizá jueguen de algo muy parecido a lo que es un enganche. Sin embargo, ninguno cumple esa función. El Enano, por físico, no puede jugar en el medio ya que se lo comen, por el lado del Burro, sus características no son las de un conductor sumado a que siempre termina estando presente esa adicción que no lo deja explotar.
River no tiene que seguir desperdiciando técnicos o malos refuerzos, la dirigencia se tiene que poner como objetivo traer a un enganche capaz de darle oxigeno a un equipo que a esta altura parece muerto. Nombres hay muchos, pero no todos querrán agarrar este fierro caliente que se llama River Plate
Se busca enganche, por favor presentarse en las oficinas del estadio Monumental.
[b]Desde la tormentosa partida de Marcelo Gallardo, River viene sufriendo la abstinencia de un enganche que esté a la altura de las circunstancias. En estos últimos tres partidos se vio la ausencia de un jugador que no tenga miedo de pedir la pelota y que pueda manejar los hilos del equipo.
[/b]Una realidad más allá de este fracaso deportivo es que desde hace años que en el césped del Monumental no se ve un enganche capaz de ser un líder dentro y fuera del campo. Un conductor que aparezca en los momentos que el equipo más lo necesita para sacarlo a flote o para aguantar la pelota y salir de la presión del rival.
Con estas palabras, a todos se nos viene a la cabeza apellidos como Riquelme, D´Alessandro y Verón, por más que este último no sea un clásico enganche pero sí un armador de juego. Estos jugadores son el fiel reflejo de lo que falta en River. Gracias a ellos sus equipos juegan con esa tranquilidad propia de saber que tenés un referente en la cancha que te va a marcar la diferencia.
Actualmente el equipo cuenta con jugadores como Diego Buonanotte y Ariel Ortega, que quizá jueguen de algo muy parecido a lo que es un enganche. Sin embargo, ninguno cumple esa función. El Enano, por físico, no puede jugar en el medio ya que se lo comen, por el lado del Burro, sus características no son las de un conductor sumado a que siempre termina estando presente esa adicción que no lo deja explotar.
River no tiene que seguir desperdiciando técnicos o malos refuerzos, la dirigencia se tiene que poner como objetivo traer a un enganche capaz de darle oxigeno a un equipo que a esta altura parece muerto. Nombres hay muchos, pero no todos querrán agarrar este fierro caliente que se llama River Plate
Se busca enganche, por favor presentarse en las oficinas del estadio Monumental.