Acá [MENTION=24073]Daleman[/MENTION]; me copió el texto de lo que leyó Favio Assad en la asamblea, se los dejo.
Te averiguo, [MENTION=40082]Matkhev[/MENTION];
Señor presidente del club atlético River Plate, señor presidente de la
asamblea de representantes de socios, señores directivos, señores
asambleístas, estimados socios:
Hoy, es el acto formal de presentación de esta asamblea, en la era pos
Passarella. Quiero que mis primeras palabras expresen lo honrado que
me siento de ser un par de todos ustedes, y el deseo de jerarquizar la
labor en este recinto, apelando al respeto y la tolerancia por el
otro. Quiera Dios, que podamos dar lo mejor que tenemos, en pos de
nuestro amado club. Dicho esto y antes de abocarme al tema que me
convoca, permítanme expresar algunas reflexiones previas.
Nadie de nosotros desconoce que esta nueva administración que preside
el Dr. Rodolfo Donofrio, llegó a la conducción política del club
avalado por una cantidad de votos contundente y sin precedentes en
nuestra historia. Creo que a nadie le es ajeno que la masiva
concurrencia del socio a las urnas, fue nada más y nada menos que la
necesidad que teníamos todos nosotros de cambiar los viejos hábitos de
conducción que tuvieron como denominador común, el sostenido
aniquilamiento de nuestra institución. Soportamos demasiada ruina,
demasiada avaricia, demasiado desamor. Nunca a través de más de 100
años de historia se nos había hecho tanto daño.
El club atlético River Plate, fue durante más de una década, el botín
de guerra de un puñado de negligentes e inescrupulosos, que lo
llevaron de la nariz al tránsito de lo que bien puede llamarse la
década infame. Porque no debe haber duda de que FUE, una década
infame. A fuerza de ser descarnadamente honesto, condición que me
impuse desde el primer día en que supe que iba a formar parte de esta
honorable asamblea, siento que la mayoría de nosotros, los socios del
club, hemos tenido nuestra cuota de responsabilidad, sea por acción,
sea por omisión. Más por esta última, probablemente. Con nuestra
orfandad de acción y nuestras elecciones personales, también fuimos
artífices de nuestro destino. Sé que hubo excepciones, y muchas de
ellas se encuentran hoy aquí, reunidas en este recinto, pero créanme
que muchos sienten lo que yo siento, la mayoría de nosotros, pudimos
haber dado mucho más de lo que le ofrecimos a River. Pero como dice el
dicho, no hay mal que dure cien años. Señores, hoy soplan nuevos
vientos. Aprendamos de los errores, y construyamos todos juntos, un
River hegemónico. Y sin dejar de lado nuestras convicciones, apoyemos
al nuevo presidente, en la tarea de limpiar nuestra casa y devolvernos
la jerarquía perdida.
Ahora sí, voy a intentar explicarles por qué les voy a pedir su apoyo,
a esta medida denominada con acierto: “TU LUGAR EN EL MONUMENTAL”.
Sepan estimados compañeros, que su implementación no fue producto de
un capricho, significó una tarea titánica de los equipos de gestión.
Tuvimos que recurrir a la imaginación y a la audacia, para crear un
engranaje que quepa cómodo en las previsiones normativas y en los
requerimientos de la seguridad pública. Concretamente, hubo 4 puntos
de ataque.
-
La eliminación del llamado canje
-
La necesidad de identificar a los asistentes al Monumental
-
La auto financiación del Proyecto y,
-
la necesidad de contar con un paliativo económico que morigere el
enorme déficit operativo del Club, cercano a los 12 millones de pesos,
mensuales. DOCE…MILLONES…DE PESOS…MENSUALES.
Desterrar el denominado “canje”, fue digamos, la premisa general. El
socio pedía a gritos la eliminación de este sistema perverso, que nos
obligaba a una reserva “online” que jamás se encontraba asegurada. La
mejor gráfica de ese mecanismo perverso, es la escena de un socio
presionando la tecla F5 hasta bien entrada la madrugada. Ninguno que
no fuera dirigente o allegado a la dirigencia tenía el ingreso
asegurado. Como dije, resultaba humillante, y mas aún cuando se
advertía que las localidades se agotaban a minutos de comenzar la
compulsa. No necesito recordarles la investigación publicada por un
medio gráfico donde mediante escuchas ordenadas judicialmente, se
determinaba el cierre anticipado y voluntarista de la página
proveedora de localidades. El afortunado que conseguía su entrada,
debía acercarse al Monumental días previos al partido, quitarle horas
a su trabajo, y hacer colas en ocasiones interminables, a fin de
proceder a retirarla. Toda esta bizarría, no era mas que el reflejo
del trato degradante prodigado al socio a lo largo de toda la gestión
de Daniel Passarella.
Por todo esto, no teníamos ninguna duda de qué era lo primero a lo que
debíamos abocarnos. El primer desafío, fue tratar con el gobierno de
la ciudad, el gobierno nacional y los organismos de seguridad, y
consensuar un método que contemple sus requerimientos pero sin
cercenar el derecho del socio de acceder al estadio, tarea, que les
aseguro, no fue nada sencilla. Es importante que se comprenda, señores
representantes, que River era un club visto con un enorme recelo,
producto de la incapacidad demostrada por la gestión anterior a la
hora de organizar los espectáculos deportivos.
Trabajamos a destajo en esta ingente tarea -noten que los primeros
días de enero YA habíamos implementado el nuevo sistema. Queríamos que
el socio tuviera el tiempo necesario para realizar el trámite, sin
apuros ni complicaciones. A pesar del ojo avizor de los organismos de
seguridad, logramos darle operatividad en tiempo récord, a un sistema
que seguramente sea imperfecto y probablemente mejorable, pero que
dota al mecanismo de abastecimiento de entradas de un cambio radical y
superador. Ya no hay F5, no existen incertidumbres, ni colas, ni horas
quitadas al sueño y al trabajo. El socio ya tiene reservado por la
extensión de todo el torneo “SU LUGAR”, a través de un trámite
sencillo, ágil y funcional. Contará además, con una tarjeta
inteligente que cumplirá por fin, con una de las exigencias del comité
de seguridad, la NOMINATIVIDAD. A través de esta ingeniería logramos
por fin, cumplir con los 2 primeros puntos reseñados precedentemente,
eliminábamos el canje e identificábamos a la mayor parte de los
concurrentes.
Este sistema nos dota además, de un plus que opera como una suerte de
agente purgante de la reventa, ya que funciona como una suerte de
ecuación indirectamente proporcional: a más control, menos reventa, a
mayor individualización, menores chances de que los perpetradores,
queden impunes. Vamos por el objetivo de terminar con el anonimato en
las tribunas.
Es importante que comprendamos el contexto en el que debemos actuar.
Hablamos de males que vienen destrozando al club hace décadas.
Hablamos de una construcción sistémica sobre el desierto operativo que
heredamos de quienes nos precedieron, quienes además de la
problemática del canje, nos legaron un pasivo que llegaba al momento
de la asunción a cerca de 425 millones de pesos y un déficit mensual
que, como dije anteriormente, alcanza en la actualidad, los 12
millones. De males, las obligaciones contraídas a plazo se tornaban de
cumplimiento inminente, 38 millones en diciembre, 96 millones en enero
y 87 millones en el curso del presente mes.
Sepan los señores representantes, que desde que ha asumido la nueva
gestión, no ha habido un solo cheque rechazado. A todo esto me refería
cuando hablaba de tarea titánica. Conjugar las circunstancias que les
describí, que no son más que un dato comprobable de la realidad, y
hacerlo además, dando cumplimiento con la instrucción del presidente
de la institución, de intentar preservar el capital futbolístico del
club, sin tentarnos de echar mano a la venta devaluada de algún
jugador, requirió créanme, un gran esfuerzo creativo e intelectual.
Por otra parte, siempre supimos que la implementación del proyecto
necesitaba contar con la colaboración del socio, que dicho sea de
paso, nos hacía llegar su permanente solidaridad y su deseo de aportar
sumas de dinero para sacar a River adelante. Hubiera sido mucho más
sencillo no correr riesgos políticos, o echar mano a medidas
demagógicas. Nuestra historia, está plagada de ellas. Pero no llegamos
al club para eso, llegamos para asumir todos y cada uno de los riesgos
y desafíos necesarios. La tibieza, estimados colegas, jamás será un
atributo de esta dirigencia, tampoco la indecisión ni la mera
conveniencia. Sí la convicción, la honestidad y la gestión.
Conforme lo puntualicé precedentemente una de las condiciones para
poner en marcha el nuevo sistema de reservas, era su auto
financiación. El costo operativo del mismo rondaría los 2 millones de
pesos por torneo. En función de ello, se buscó diseñar un mecanismo de
ingresos que fuera accesible para el socio y que a la vez, alivie a la
tesorería del club. No resulta un dato menor que el costo que se debe
erogar para abrir las puertas del monumental por cada partido ronde el
millón de pesos. Con un aporte similar al valor de cancha de uno o dos
panchos (Cuestan $26 los días de partido), es decir, de 35 pesos o 60
pesos por match, según se reserve cabeceras o laterales altas,
logramos cubrir los gastos de implementación del sistema y el costo
que nos insume la apertura del estadio durante el transcurso de un
año. No es mucho, pero es un comienzo.
Por otra parte, decidimos que la reserva de las localidades de las
cabeceras altas o populares, permanecerían gratuitas, de modo de no
negarle el ingreso al socio que carece de las posibilidades de
contribuir y de intentar así, conjugar el nuevo procedimiento, con lo
establecido en nuestro estatuto, que dicho sea de paso, requiere de
una urgente adecuación a los tiempos que corren.
Nos reconforta comprobar que ¨TU LUGAR EN EL MONUMENTAL¨ fue un éxito
rotundo. Mas de 40.000 socios ya han reservado su silla y el numero se
incrementa cada día.
Esta no es mas que una de las numerosas medidas impulsadas por el
presidente para sanear las finanzas de la institución. Lograr la
confianza del sector financiero, no rifar el patrimonio futbolístico
del club, velar por las divisiones inferiores, racionalizar el
dispendio de los protocolos, poner en valor la marca River y exigir
equilibrio y austeridad en el directivo y el dirigente, son algunas
otras.
Quiero decirles que en lo personal, abrazo esta gestión como la última
esperanza de reconstrucción, les pido humildemente, que el abrazo sea
compartido con todos uds., estamos dando los primeros pasos hacia un
River grande. Y necesitamos de todos.
Por todo lo expuesto mociono la aprobación del punto 5 de la orden del
día y pido humildemente a mis distinguidos colegas, que nos acompañen
con su voto.