El sitio oficial ahora puso 1-0 con gol de Bou, pero el grueso de los periodistas que estaban metieron que no hubo goles. O no lo cobraron, o nadie se tomó en serio que Bou haga un gol…
Así era River antes de que se apoderaran del club los hijos de un continente lleno de putas de Papada y DAP (elegidos por nosotros, claro, que somos los hinchas más vivos del mundo). El banco de suplentes en sí mismo ya era un conglomerado de jugadores que alternaban como ¡titulares! en la Selección Argentina ó en la de otros países.
Estos son los minutos veraniegos que Almeyda le dio a Pírez y Pezzella por ejemplo, pudiéndolo haber hecho ante Racing o Estudiantes o mismo el domingo en Mendoza. Peor fue para pibes como Cazares, Solari, Vila o Insaurralde que no sumaron ningún minuto de competencia en toda la pretemporada fuera de los entrenamientos.
Nunca visto que los 4 amistosos televisados del verano los jueguen en gran parte los titulares…
Almeyda y Passarella siguen extendiendo las pasantías de privilegio de jugadores que no van a cambiar la ecuación, ni deportiva ni económicamente. No tiene sentido mantener a Bou para jugar un amistoso vs Talleres de Escalada, cuando esos minutos pueden ser las primeras lecciones serias para Andrada, Vila, Cazares, etc.
Hasta en los entrenamientos, el DT muestra una ignorancia alarmante en el armado de los equipos, por ausencia de idea de juego definida y por revolear nombres sin tener en cuenta si son aptos para la función y cómo se acomodan a sus compañeros y a las intenciones del equipo y del rival (esto en partidos más serios). Almeyda, día a día, evidencia desconocer cómo se arma un EQUIPO de fútbol.
No labura distancia entre líneas, subestima perfiles, no reconoce sociedades, desprecia características y desbalancea el plantel, pone y saca pero no potencia, etc. Ascienda o no, crezca como el Pelado como DT o no, la decisión de Passarella de contratar a Almeyda como entrenador de River, en la hora más complicada del club, fue una locura.