Cientos de hinchas millonarios, junto a las filiales de Barcelona y Madrid, alentaron al equipo del Checho Batista en Cataluña. En la previa, hicieron delirar las calles catalanas. Como en el Mundial de Alemania, el sábado en Catañula, a la Selección Argentina la volvieron a alentar las gallinas. Más de 300 hinchas de River desataron una verdadera fiesta por las calles catalanas para apoyar al equipo nacional Sub-23: armaron una caravana a puro bombo, banderas y cantos, que arrancó con el típico asado previo y terminó cubriendo de rojo y blanco toda Barcelona. El punto de encuentro fue el campo de fútbol La Montañesa, en donde se reunió la gente convocada por la filial de River en Barcelona y a donde se sumaron sus pares de la embajada millonaria en Madrid. Después de compartir un buen asado, partieron todos juntos hacia el Camp Nou con banderas de más de 30 metros de largo, varios bombos y el infaltable aliento riverplatense. Tanto en la calle como en el subte que los llevó hasta el estadio, los españoles quedaron completamente sorprendidos por el furor de ese centenar de personas que rompió con la tranquilidad de la ciudad. A tal punto, que se frenaban para sacarles fotos con sus celulares. Sin dudas, un verdadero espectáculo al mejor estilo millonario. Y como tal, claro, no faltaron los cantos en contra del clásico rival. “Mirá qué distintos somos…”, fue el canto por excelencia, sobretodo porque las filiales de Boca en España ni aparecieron por el Camp Nou. Aunque no resultó extraño, en Buenos Aires o a 14 mil kilómetros de distancia, la historia siempre es la misma: la fiesta es bien y exclusivamente millonaria.
Cientos de hinchas millonarios, junto a las filiales de Barcelona y Madrid, alentaron al equipo del Checho Batista en Cataluña. En la previa, hicieron delirar las calles catalanas. Como en el Mundial de Alemania, el sábado en Catañula, a la Selección Argentina la volvieron a alentar las gallinas. Más de 300 hinchas de River desataron una verdadera fiesta por las calles catalanas para apoyar al equipo nacional Sub-23: armaron una caravana a puro bombo, banderas y cantos, que arrancó con el típico asado previo y terminó cubriendo de rojo y blanco toda Barcelona. El punto de encuentro fue el campo de fútbol La Montañesa, en donde se reunió la gente convocada por la filial de River en Barcelona y a donde se sumaron sus pares de la embajada millonaria en Madrid. Después de compartir un buen asado, partieron todos juntos hacia el Camp Nou con banderas de más de 30 metros de largo, varios bombos y el infaltable aliento riverplatense. Tanto en la calle como en el subte que los llevó hasta el estadio, los españoles quedaron completamente sorprendidos por el furor de ese centenar de personas que rompió con la tranquilidad de la ciudad. A tal punto, que se frenaban para sacarles fotos con sus celulares. Sin dudas, un verdadero espectáculo al mejor estilo millonario. Y como tal, claro, no faltaron los cantos en contra del clásico rival. “Mirá qué distintos somos…”, fue el canto por excelencia, sobretodo porque las filiales de Boca en España ni aparecieron por el Camp Nou. Aunque no resultó extraño, en Buenos Aires o a 14 mil kilómetros de distancia, la historia siempre es la misma: la fiesta es bien y exclusivamente millonaria.
que grande que es RIVER… se imaginan estar en españa caminando por la calle, y te crusas con 500 hinchas de un equipo q es de otro pais, q nada q ver con esñpaña?? nono… increible lo grande q es RIVER
felicitacioens totales a la gente de las peñas españolas