Vega: 6,50: Clave en un par de bochas, bien cagando a pedos a los defensores. En todos los goles que le hacen, le echan la culpa. Lo dije mil veces, no es arquero para River, tampoco es Clemente.
Maidana: 5,50: El mejor de una defensa que tuvo que cubrir no metros, sino hectáreas. Cada jugada era un tute.
G. Pirez: 3: Confiado para mal, distraído, perdió siempre de arriba, no tuvo capacidad de anticipo.
Funes Mori: 5. Hizo magia. Alternó buenas y malas. El ignorante del entrenador le puso por delante a Villalva, delantero de 1,50, a jugar de carrilero. Es la estrategia más insólita en la historia de cualquier deporte.
Sanchez: 3. A esta altura, poca responsabilidad de Almeyda. Un DT te puede perjudicar, pero no te puede arrancar el cerebro y el sentido común…
Ponzio: 5: A muchos los podrá emocionar lo que pasó. Yo analizo cómo jugó, y lo hizo mal. Su primer tiempo fue Ballonesco. Se cansó de entregar mal la pelota y cubrir mal los espacios. Mejoró algo, poco, en el complemento. Si le pongo 5 es por el esfuerzo, nada más.
Cirigliano: 6. El único que manejó la pelota con criterio durante todo el partido. El único al que no le quemó. El pecho frío… En la marca, buenas y malas, en lectura de juego, claramente el que entendió a qué debía jugar River.
Villalva: 5. Condenado a una función insólita, produjo irregularmente en ataque y fue nefasto en el retroceso. Lo mejor sería no ponerle nota y preguntarle a Almeyda qué quiso hacer.
Domínguez: 6. Un par buenas, un par malas. Regaló contras y puso pelotas buenas. Lo importante es que se mostró y que en el ST entendió dónde era productivo.
Cavenaghi: 3. Su calidad lo salva, su físico lo condena. Hoy, por momentos, fue uno menos.
Trezeguet: 5. Por primera vez, vi que el rival entendió que juega de primera e inmediatamente fue a marcar al receptor, interceptando un par de pases. Se movió bien sin pelota y no fue habilitado correctamente. Fue importante bajando bochas.
Aguirre: 5,50. Afortunadamente, entró a cumplir una función lógica. Aportó más cerebro que su reemplazado.
Funes Mori y Ocampos: me alegro por ellos, porque son jóvenes. Realizaron un aporte esencial, que ojalá los ayude a sacar peso de sus mochilas. En lo estrictamente táctico, no hay mucho para remarcar.