Las 100 mejores frases del fútbol argentino

falta “No es Champagne es Gatorei” Bilardo

No tiene bebida alcoholica señorita tiene gatorei, jaja lindo quilombo ese dia y yo estaba en la san martin baja lo vi todo en primera fila:lol::mrgreen:.

Me acuerdo ese dia fui con yeso a la cancha porque dos dias antes me fracture el pie jugando a la pelota

Les dejo algunas frases mas :

Lo que debe prohibirse es la incultura (Jorge Brown, legendario defensor de Alumni, en respuesta a un legislador que había propuesto prohibir el fútbol tras la muerte de un niño en cancha de Lanús, alcanzado por una bala policial, en la década del 30) :lol:

El fútbol de ahora es más maricón que el de antes (Alfio Basile, ex entrenador de la Selección, 1996).

Cuando sos director técnico te escupen hasta los que antes te adoraron (Antonio Ubaldo Rattín, uno de los mayores ídolos boquenses, 1970).

¿Quién habló de ganar o perder? Yo hablo de jugar…Nunca, creámelo, nunca al entrar a una cancha pienso en ganar o perder. Sólo en jugar y jugar bien (Federico Sacchi, elegante defensor de Newells, Racing y Boca, 1960)

Un defensor con la pelota tiene que convertirse en un delantero y un delantero sin la pelota debe transformarse en un defensor (Alfredo Di Stéfano, una de las mayores glorias del fútbol argentino y mundial, 1985)

Javier Zanetti es como una máquina sensible: parece un alemán con sentimiento latino (Francisco Pacho Maturana, director técnico colombiano, 1997).

Hace seis meses me cambiaban por un tarro de pintura (José Luis Calderón, antes de ser transferido al Nápoles en 4.500.000 dólares, 1997).

Sanfilippo era un fenómeno para definir, pero los que le pegaban mal a la pelota también me traían problemas porque te sacaban de la lógica (Antonio Roma, arquero histórico del fútbol argentino, que se inició en Ferro y cumplió una gran campaña en Boca, 1970).

Han pasado los años, y a la larga he terminado por asumir mi identidad: yo no soy más que un mendigo del buen fútbol. Voy por el mundo sombrero en mano, y en los estadios suplico: una linda jugadita, por amor de Dios. Y cuando el buen fútbol ocurre, agradezco el milagro sin que me importe un rábano cuál es el club o el país que me lo ofrece(Eduardo Galeano, escritor uruguayo, 1996).

Racing es el hijo de la pavota (Alfio Basile, 1996).

Independiente ilusiona a la gente porque es como un muchacho que le dice cosas lindas a la novia (César Menotti, un mes antes de firmar para la Sampdoria de Italia, 1997)

Prefiero el smog de Buenos Aires al aire puro y el azul del Mediterráneo (César Menotti, al desvincularse de la Sampdoria de Italia, 1997)

Entre 1940 y 1948 teníamos tanta cantidad y calidad en materia de atacantes que se discutía entre Pontoni y Pedernera, Martino y Moreno, el Chueco García y Loustau. Eran tiempos de vacas gordas. No se ganaba siempre, pero !cómo jugaban! Ahora, llegó el tiempo de las vacas flacas (Félix Daniel Frascara, maestro de periodistas, 1959)

River no puede comprar jugadores baratos porque es como el Teatro Colón, donde no puede cantar un tenor de cuarta (Antonio Vespucio Liberti, presidente de River, 1962)

Amadeo Carrizo es tan grande que lo dejó a Sebastián Gualco en la noche del pasado (Aníbal Troilo, emblemática figura de la música popular de los argentinos y reconocido hincha de River, 1962)

La profesionalización del deporte, inevitable en algún sentido, ha transformado al fútbol en una realidad irreconciliable. El juego de los intereses económicos, la obsesión salvaje de vencer, la mentalidad crudamente competitiva y la gloria a la popularidad, han hecho olvidar el único sentido que puede justificar la vigencia de este deporte, tan característico de los argentinos (Monseñor Vicente Zaspe, arzobispo de Santa Fe, en la homilía del 14 de mayo de 1978, en la catedral santafesina).

El fútbol está estrechamente emparentado con el arte. Por esa razón, ser hincha de Argentinos Juniors es un orgullo. Simplemente porque muchas tardes de mi vida sentí placer viendo que sus jugadores exponían en la cancha ese estilo vinculado con la estética y el buen gusto (Carlos Carella, actor, 1996).

Bernabé Ferreyra, Moreno, Pedernera, Tucho Méndez o Pontoni antes que grandes jugadores eran hombres. No era sólo la calidad futbolística, eran las condiciones humanas las que los transformaron en cracks (Victorio Spinetto, formidable centrehalf de Vélez en la década del 30, 1971).

Pienso, luego me echan (Jorge Valdano, al ser despedido del Valencia, 1997).

¿Sabe lo que hay que hacer con la AFA? Agarrar todo desde la planta baja hasta el décimo piso, tirarlo a la calle Viamonte y quemarlo. Sólo así conseguiríamos mejorar (Luis Artime, excepcional goleador de los años años 60 y 70, en un reportaje a la revista 7 Días, 1970).

Hay que quemar la AFA porque sus estructuras no cambiaron. Es más, todo empeoró (Luis Artime, El Gráfico, 1996).

Los partidos se empiezan a ganar los lunes (Antonio Ubaldo Rattín, 1970).

El 95 por ciento de los periodistas no sabe nada de fútbol (César Menotti, 1982).

Menotti dice que el 95 por ciento de los periodistas no saben nada de fútbol.Es muy generoso (Elba de Paula, Tim, técnico brasileño, 1982).

¿Tiene algo para declarar?, le preguntó el vista de aduana del aeropuerto de Río de Janeiro a Jordao, centromedio del Flamengo, que regresaba con la delegación de su club de una gira por Europa en 1958. La respuesta del jugador fue: Con la ayuda de Dios, el domingo podemos ganarle al Vasco da Gama (Revista Placar, 1980).:lol:

Las tácticas dependen de la calidad, no del mero hecho de ponerlas en práctica (Ernesto Lazatti, excepcional centrehalf de Boca en la década del 40, 1957).

Yo me creía Gardel. Después me di cuenta de que la fama es puro grupo (Angel Clemente Rojas, excepcional jugador de Boca en la década del 60, 1996).

El gol que le convertí a Banfield en la final de 1951 fue muy importante porque ganamos el tricampeonato con Racing. Pero fue el más impopular: el equipo oficialista le ganaba el campeonato al más débil (Mario Boyé, a quien llamaban El Atómico por la potencia de su remate, jugador de Boca y Racing, 1980).

Europa nos vende libros de tácticas, sistemas de juego y de entrenamiento. Nosotros le vendemos futbolistas que juegan bien (Roberto Perfumo, 1997).

Tranquilo, pibe, que éste no va a ser el último partido de tu vida (De Angel Labruna a Antonio Rattín, cuando el jugador de Boca debutó en primera en el clásico y lo golpeó duro, el 9 de setiembre de 1956).

Apuntamos todo a ganar un torneo de AFA. Racing lo necesita (Alfio Basile, enero 1997).

La prioridad ahora es la Copa Libertadores (Alfio Basile, marzo 1997, al quedar Racing marginado del Clausura).

A River se le cayó la bombacha (Diego Maradona, después de River 1-Boca 2, el 25 de octubre de 1997).

¿Para qué sirve jugar bien? Borges preguntó alguna vez: ¿Para qué sirve un amanecer? ¿Para qué las caricias? ¿Para qué el olor a café Sirve para la emoción, para el placer, para vivir (Jorge Valdano, 1996).

Vamos a ser el Ajax de Sudámerica (Mauricio Macri, 1996).

Si ganás sos Gardel, si perdés sos una mierda (Alfio Basile, 1991).

La plata no genera fútbol, el fútbol genera plata (Roberto Perfumo, 1997).

Chiche Sosa es un cobarde. Lo conozco bien. Yo alcanzaba la pelota cuando él jugaba en primera y siempre levantaba la pierna como un canguro para que no lo golpearan (Diego Maradona, el 25 de agosto de 1997, tras el partido Boca 4-Argentinos Juniors 2).

El es más cobarde porque necesita estimulantes para vivir (Osvaldo Chiche Sosa, en respuesta a Maradona).

Soy sudaca y de izquierda (Jorge Valdano, 1996).

Cuando llegué a Rosario para dirigir a Central, un periodista me acusó de burrero, de jugador compulsivo. Dijo que conmigo se iban a incrementar las apuestas en el Hipódromo Independencia. Es cierto que en mi época de futbolista pedía permiso para salir los sábados de la concentración e iba al Hipódromo de Palermo. Llegaba trotando y con todo lo que caminaba adentro, me hacía muy bien para estar 10 puntos para el partido del domingo (Angel Labruna, múltiple campeón como jugador y técnico de River, 1975)

No haga eso que el señor es músico! (De José Manuel Moreno a Enrique El Chueco García, cuando el puntero izquierdo le estaba pegando un baile descomunal al defensor uruguayo Schubert Gambeta).

No seas boludo y no preguntés más (Diego Maradona, a un periodista norteamericano en la conferencia de prensa del partido Boca-San Lorenzo, 1997).

Quiero volver a la Selección (Carlos Bilardo, 1997).

A Macri otra vez se le escapó la tortuga. Yo no dije nada cuando él se autosecuestró (Diego Maradona, al presidente de Boca, 1996)

Ganar queremos todos, pero sólo los mediocres no aspiran a la belleza (Jorge Valdano, 1996).

¿Vos qué creés, que yo estoy pintado? (Julio Grondona, a un periodista de televisión que le preguntó antes del sorteo del Mundial sobre la posibilidad de que Argentina tuviera como rivales a dos equipos europeos en la primera serie).

Creo que llegó el momento de tomar determinaciones drásticas. Así no va más, es una vergüenza (Julio Grondona, 28 de abril de 1997, al referirse a la violencia en los partidos de ascenso).

Es posible parar los torneos, pero lo que pasa es que mucha gente vive del ascenso (Julio Grondona, 29 de abril de 1997).

En la famosa final del Primer Campeonato del Mundo (1930, Montevideo, Uruguay 4-Argentina 2) se hicieron muchas novelas. La verdad, al margen del triunfo uruguayo, justo, es que si nosotros jugábamos con 14 no hubiésemos perdido. Luis Monti no quería jugar por las amenazas. Los dirigentes lo obligaron. Francisco Varallo reaparecía luego de una distensión muscular y a los 20 minutos se resintió. Cuando Uruguay marcó el 2 a 2, el arquero Juan Botasso chocó y quedó lesionado. No pudo levantar más los brazos. Claro está: con 14 jugadores podríamos haber sido nosotros los campeones del mundo, pero jugamos solamente con ocho… (Carlos Peucelle, puntero derecho de River en los años 30 y forjador de jóvenes en las inferiores).

Castrilli es horrendo, el peor árbitro que vi en mi vida (Diego Maradona, al conocer la designación del juez para el partido Boca-Estudiantes, 1997).

Aun ganando se puede ser un perfecto imbécil y perdiendo se pueden sacar de la experiencia una serie de enseñanzas que permitan reconvertirlo en triunfo (Jorge Valdano, 1996).

Si se va Pekerman sería como perder un tesoro (Julio Grondona, junio de 1997).

Nosotros salvamos el enorme fracaso de los dirigentes en el Mundial de Inglaterra (Luis Artime, 30 de agosto de 1966).

¿Qué hace, mocoso? (Del legendario centrehalf Odbulio Varela a Néstor Rossi, cuando el argentino, debutante con la Selección, le entró fuerte en un partido Argentina-Uruguay, en la década del 40).

A mí me reprochaban mis noches milongueras, pero no sabés qué lindo entrenamiento es el tango para los jugadores. Fijate. Tenés ritmo, después cambio de ritmo en una corrida, manejo de perfiles, trabajo de cintura, de piernas. Mirá que en una de ésas yo anduve bien en el fútbol por eso, por ir a bailar el tango todas las noches (José Manuel Moreno, 1971).

El fútbol marca los grados de salud y de enfermedad de toda la sociedad (Roberto Perfumo, 1997).

Hay centros para muchos y centros para uno (José Sasía, jugador uruguayo que actuó en Boca y Rosario Central).

Callese la boca, fue mano (Del árbitro William Guerrero a Tony Torres Orellano, delantero de Deportivo Quevedo, en el partido que jugaba contra Calvi de la primera división ecuatoriana. Lo dramático fue que Torres Orellano nació sin su brazo derecho -el de la mano que le cobró el juez-, sin embargo fue goleador de su equipo en 1997).

La historia del fútbol es un triste viaje del placer al deber. A medida que el deporte se ha hecho industria, ha ido desenterrando la belleza que nace de la alegría dejugar por sí (Eduardo Galeano, 1996).Mis equipos no juegan como los de Bilardo (Daniel Passarella, 1997).

En 1939 decidí portarme bien. Durante una semana tomé solamente leche y me acosté temprano. Jugábamos contra Independiente. Fui un desastre. Ese día, Vicente De la Mata convirtió el gol histórico gambeteando a medio equipo nuestro. Me suspendieron. Mis compañeros hicieron causa común conmigo. Se declararon en huelga. No jugamos hasta el torneo de 1940. Fijate lo que pasó por portarme bien (José Manuel Moreno, 1967) :lol:

River incentiva a los rivales de Boca (Mauricio Macri, 1997).

Macri habla de incentivación porque es un muchacho sin ninguna experiencia en el fútbol (Julio Grondona, 1997).

Nunca pensé mi equipo ideal. Pero de lo que estoy seguro es que de 5 lo pongo a Redondo (José Pekerman, 1997)

Le pedí la camiseta a Valderrama porque es un maestro (Diego Maradona, 1997).

El mejor gol fue el que hizo el defensor en contra (Dino Sani, entrenador de Boca, en el programa Todos los Goles, canal 9, el 13 de mayo de 1984. El tanto aludido por el brasileño fue el que le marcó Marcelo Firpo a su compañero Daniel Carnevale, Atlanta 0-Vélez 1)

Chueco, hacéle hacer un gol de Cassán (Pedido del relator Fioravanti, quien transmitía desde el costado del campo de juego, a Enrique García, cuando el jugador de Tigre entró por Herminio Masantonio, en el partido por la Copa Roca con Brasil, en 1940. Luego de una apilada,el delantero de Racing le sirvió la pelota a Cassán, que decretó el 5 a 1 argentino. El Chueco salió corriendo y le preguntó a Fioravanti: ¿Y ahora…a quién?). :lol:

A Renato Casarini lo corrían las noches: se las sabía todas (Adolfo Pedernera, gran jugador y entrenador).
Hay algunas muy buenas.


Aca algunas de las frases mas recordadas de Angelito y una anecdota contanda por su hijo:

“El fútbol es el juego más difícil del mundo, porque se hace con los pies obedeciendo a la cabeza…y miren la distancia que hay…”

"O va a River, lo cago a trompadas, lo peleo. Usted no tiene ni la mas minima idea de lo que significa jugar en River Plate; asi que no lo dude y arregle”

“La respuesta a esa pregunta es facil ¿como no lo voy a querer a Boca, si me dio de comer toda la vida?”

“River es noticia siempre. No porque seamos la mitad más uno, sino porque somos el pais menos algunos.”

“¿Cómo les dimos vuelta el partido en el segundo tiempo? Y, en el primer tiempo los dejamos jugar un ratito.”

“Los campeonatos se ganan antes de empezar a jugarlos, cuando se elige a los jugadores”

Anecdota:

“El River de Didí fue a jugar a Rosario (allí dirigía Labruna). Era un equipo con muchos pibes y recién daba sus primeros pasos en el fútbol Norberto Alonso. El “Beto” jugaba bastante parado, tirado sobre el costado izquierdo, y eso mi viejo no lo soportaba. Se ponía loco. Me acuerdo que se acercó a la línea y empezó a gritarle a Alonso: “¡Nene, corré, que esa camiseta la usé yo durante veinte años! ¡Corré, que esa camiseta la transpiré yo, nene!.. ¿Cómo vas a jugar así, parado?..”. Mi viejo era un enfermo hincha de River. Durante los años en que dirigió a otros equipos, lo primero que hacia al llegar al vestuario era preguntar el resultado del partido que jugaba River”.
Y algo que me pone la piel de gallina cada vez que lo leo, una declaracion de Liberti:

“Dios no me dió la posibilidad de tener hijos. Pero me dió otra chance: ese lugar para mi lo ocupa River.” Antonio Liberti.

falta esta:me cortaron las piernas (maradona mundial 94)

:mrgreen: