la nota del abandono...

buscando encontre estoo…
Boca no para de recibir cachetazos
te kere matar bostero

FERRO 4 - BOCA 1: UN EQUIPO SIN RESPUESTAS COLECTIVAS NI INDIVIDUALES
Boca no para de recibir cachetazos

Ferro dejó al desnudo todas las carencias de este Boca sin alma. La 12 se cansó de insultar y se fue antes de la cancha.

JULIO CHIAPPETTA
Boca es un caso de diván. Ferro lo puso frente al espejo y desnudó su realidad: esto es Boca -y sus circunstancias- hoy. Y el 4-1, ¿fue el réquiem para un final anunciado?A los 5 minutos, La Doce calentó el ambiente y anunció lo que se venía. Y ya lo ve/ y ya lo ve/ con Latorre nos vamos todos al cabaret, fue el primer grito de la guerra abierta entre hinchas vs. jugadores y técnico. Todavía el partido estaba en su prólogo, pero es evidente que la gente ya se hartó de tantos conflictos internos. Y dejó al plantel huérfano de apoyo. Después, hostigaron a todo el mundo, incluido al Bambino por primera vez desde que comenzó su ciclo. Aunque, por ahora, quedaron indemnes los dirigentes y el presidente Macri, también responsables de este presente de Boca.La pintura del final es un prenuncio de lo que se viene. Horas de tensión y conciliábulos para empezar de cero otra vez, algo que ya es casi una rutina en este Boca de los últimos tiempos. Una porción de la hinchada se fue de la cancha a los 20 del segundo tiempo; Serna dijo que sentía vergüenza por la actuación del equipo; el Bambino fue acorralado por el periodismo -una vez más- para conocer su futuro; la mayoría de los jugadores se fueron corriendo, casi esquivando al que se les cruzara (sólo se quedó Caniggia, el único que se salvó del incendio). Y una silbatina le puso el broche de oro a tanto desatino.Entre una secuencia y otra hubo un partido de fútbol. Boca arrancó mejor porque tuvo el control de la pelota y el mayor porcentaje de llegadas. Y aun equivocándose, buscó por todas partes escapándoles a las marcas que dispuso el fondo de Ferro. Llegó al gol -córner de Solano, cabezazo limpio de Palermo- tras disponer de tres chances netas. Todas con los mismos protagonistas: Caniggia ante Rocha. Y todas ganadas por el arquero. Caniggia fue el único que se despegó de su perseguidor (habitualmente Vitali) y le quedó terreno para despegar con la quinta a fondo.Pero el cuadro del Bambino se tropezó con una mala idea -la de esperar y ver si Ferro salía de su campo- y terminó ahogándose en el abismo de su mediocridad. Y Ferro, que casi no había pasado la mitad de la cancha, que se preocupó excesivamente por marcar y que buscó un contraataque casi como si fuera el aire para respirar, se tropezó con el empate de casualidad. Fabbri dejó boyando un despeje y Bustos clavó un derechazo formidable.Con otra actitud, el equipo de Caballito puso en marcha el plan B: En el primer tiempo los cansamos; en el segundo, los goleamos. Para eso hizo falta nada más que el desnivel. Si con el primer gol lo mandó a Boca al hospital, con el segundo (cachetada de Bustos a la carrera tras centro de Martens) lo dejó internado en terapia intensiva. Porque Boca bajó la guardia y se quedó vacío, en cuerpo y alma. No tuvo respuestas físicas ni espirituales. No mostró reacción colectiva ni tampoco individual (salvo Cani, quien siguió chocando contra esa muralla llamada Rocha).Entre Diego Bustos y Víctor López construyeron la sociedad de los poetas vivos y Ferro armó el festival. López pareció tener un imán; las agarró todas y las jugó bien todas. Como en el tercer gol, donde dio cátedra por la izquierda de cómo ponerle la pelota en la cabeza a Yaqué.Y Bustos no defraudó al Bambino. El técnico de Boca la tenía clara durante la semana. Dijo que volvía a la línea de cuatro porque Ferro tenía al peligroso zurdo. Claro que le faltó implementar la táctica para neutralizarlo. Un pequeño detalle, nada más. Y Bustos cerró la fiesta con otro golazo: la picó por sobre Abbondancieri con la maestría de su pie izquierdo.Con el 3-1, Boca entró en coma; con el 4-1, quedó asistido por el respirador artificial. Pero nada ni nadie salvará a un ciclo que ya, en el ánimo de todos, está muerto.

buscando encontre estoo…
Boca no para de recibir cachetazos
te kere matar bostero

FERRO 4 - BOCA 1: UN EQUIPO SIN RESPUESTAS COLECTIVAS NI INDIVIDUALES
Boca no para de recibir cachetazos

Ferro dejó al desnudo todas las carencias de este Boca sin alma. La 12 se cansó de insultar y se fue antes de la cancha.

JULIO CHIAPPETTA
Boca es un caso de diván. Ferro lo puso frente al espejo y desnudó su realidad: esto es Boca -y sus circunstancias- hoy. Y el 4-1, ¿fue el réquiem para un final anunciado?A los 5 minutos, La Doce calentó el ambiente y anunció lo que se venía. Y ya lo ve/ y ya lo ve/ con Latorre nos vamos todos al cabaret, fue el primer grito de la guerra abierta entre hinchas vs. jugadores y técnico. Todavía el partido estaba en su prólogo, pero es evidente que la gente ya se hartó de tantos conflictos internos. Y dejó al plantel huérfano de apoyo. Después, hostigaron a todo el mundo, incluido al Bambino por primera vez desde que comenzó su ciclo. Aunque, por ahora, quedaron indemnes los dirigentes y el presidente Macri, también responsables de este presente de Boca.La pintura del final es un prenuncio de lo que se viene. Horas de tensión y conciliábulos para empezar de cero otra vez, algo que ya es casi una rutina en este Boca de los últimos tiempos. Una porción de la hinchada se fue de la cancha a los 20 del segundo tiempo; Serna dijo que sentía vergüenza por la actuación del equipo; el Bambino fue acorralado por el periodismo -una vez más- para conocer su futuro; la mayoría de los jugadores se fueron corriendo, casi esquivando al que se les cruzara (sólo se quedó Caniggia, el único que se salvó del incendio). Y una silbatina le puso el broche de oro a tanto desatino.Entre una secuencia y otra hubo un partido de fútbol. Boca arrancó mejor porque tuvo el control de la pelota y el mayor porcentaje de llegadas. Y aun equivocándose, buscó por todas partes escapándoles a las marcas que dispuso el fondo de Ferro. Llegó al gol -córner de Solano, cabezazo limpio de Palermo- tras disponer de tres chances netas. Todas con los mismos protagonistas: Caniggia ante Rocha. Y todas ganadas por el arquero. Caniggia fue el único que se despegó de su perseguidor (habitualmente Vitali) y le quedó terreno para despegar con la quinta a fondo.Pero el cuadro del Bambino se tropezó con una mala idea -la de esperar y ver si Ferro salía de su campo- y terminó ahogándose en el abismo de su mediocridad. Y Ferro, que casi no había pasado la mitad de la cancha, que se preocupó excesivamente por marcar y que buscó un contraataque casi como si fuera el aire para respirar, se tropezó con el empate de casualidad. Fabbri dejó boyando un despeje y Bustos clavó un derechazo formidable.Con otra actitud, el equipo de Caballito puso en marcha el plan B: En el primer tiempo los cansamos; en el segundo, los goleamos. Para eso hizo falta nada más que el desnivel. Si con el primer gol lo mandó a Boca al hospital, con el segundo (cachetada de Bustos a la carrera tras centro de Martens) lo dejó internado en terapia intensiva. Porque Boca bajó la guardia y se quedó vacío, en cuerpo y alma. No tuvo respuestas físicas ni espirituales. No mostró reacción colectiva ni tampoco individual (salvo Cani, quien siguió chocando contra esa muralla llamada Rocha).Entre Diego Bustos y Víctor López construyeron la sociedad de los poetas vivos y Ferro armó el festival. López pareció tener un imán; las agarró todas y las jugó bien todas. Como en el tercer gol, donde dio cátedra por la izquierda de cómo ponerle la pelota en la cabeza a Yaqué.Y Bustos no defraudó al Bambino. El técnico de Boca la tenía clara durante la semana. Dijo que volvía a la línea de cuatro porque Ferro tenía al peligroso zurdo. Claro que le faltó implementar la táctica para neutralizarlo. Un pequeño detalle, nada más. Y Bustos cerró la fiesta con otro golazo: la picó por sobre Abbondancieri con la maestría de su pie izquierdo.Con el 3-1, Boca entró en coma; con el 4-1, quedó asistido por el respirador artificial. Pero nada ni nadie salvará a un ciclo que ya, en el ánimo de todos, está muerto.

Pero nosotros esto lo tenemos siempre presente. Los únicos que lo tratan de olvidar son los bostis. Quieren borrar todo lo que pasó del 2000 para atrás.

TU PASADO TE CONDENA BOSTERO…

son tristes… muy tristes!!!

Lo peor q puede hacer una hinchada q supuestamente quiere a los colores…abandonar a su equipo…

“YO TE ALENTABA SIN SABER POR Q…AHORA SEE…SOMOS CAMPEON OTRA VEEZ!!!”

“Ferro dejó al desnudo todas las carencias de este Boca sin alma. La 12 se cansó de insultar y se fue antes de la cancha.”

Sublime :twisted:

terribleee

telefono para ahumada, hay que tener memoria muchachos y nosotros nos comimos varios 4 a 1 el año pasado y nadie se fue

BOSTA=RIKELME

AMARGURA!!

si q amargura no pueden hablar… tinen 10 años dhsitoria contra 100 nuestros

dan pena…
su historia da asco
pones la tv y sale la hinchada de boca esto la hinchada de boca lo otro …etc etc…alagandolos todo el tiempo
por favor dan asco los bosteros simepre fueron amargos y se creen los mejores por q los infla el periodismo!!
bostero!
abandonaste
usas parlantes
colgas banderas negras
no llenas la cancha
corres con cualqueir hinchada
te roban los trapos
sos amigo de la policia
tu historia es mediocre
das pena bostero! la mitad de tu $hinchada$ es extranjera(bolitas y parucas)

a los 20’ del ST vamos qe aguanteste mucho bostero… !

amargo eterno

los persige el pasado al equipito ese
chico
jaja
son una manga de forros

q amargos,corres,te fajan,banderas negras,parlantes,trompetas,abandonas,sos amargo voka!!

El mas amargo…, lejos.

MIRA Q DISTINTOS SOMOS, ACA NO HAY BANDERA NEGRA Y LA HINCHADA NO SE VA.

ese abandono es muy triste ni se puede comparar con los 10 boludos que tiraron maiz

LLORA LA VOKA LA VOKA LLORA