Bueno, hoy lei esta nota en el gráfico, escrita por Elias Perugino.
No se quien se acuerde de este programa, pero básicamente se trataba acerca de la Maquina que usaba chiche gelblung para que los famosos no mientan. Y Elias remarca que jamas, en todo el ciclo se lo interrogo a un futbolista, sabiendo que muchas veces mienten, (menciona a riquelme con la pelea de falcioni, palermo, a jaite con del potro), pero básicamente le pega bastante a DAP. Acá les voy a poner textual esa parte ( no todo el texto por que es bastante largo, je) que realmente me gusto y no le chupa la pija, por así decirlo.
… Chequeemos mentalmente si en el estudio hay extinguidores y luego consultemos a un Jose Maria Aguilar o a un Julio Comparada, el hombre que no se avergonzó de inaugurar un estadio construido a la mitad. Y reprimamos la risa cuando DAP diga que la continuidad de Astrada esta garantizada-roja directa pocos días después- o que “Si alguien piensa que no les vamos a renovar contrato a Cavenaghi y al Chori Dominguez, esta loco”.
“En el fútbol se miente demasiado”, al menos fue capaz de admitir el Kaiser, defensor impactante, entrenador exitoso y presidente a medio hervir que en cualquiera de los tres estadios se ha caracterizado por ver fantasmas, imaginas conspiraciones y detestar al periodismo, caballito de batalla preferido para escudarse cuando fue abrumado por sus propias limitaciones.
“El 80% de los periodistas de fútbol son una vergüenza para el país” disparo en charla con Vignolo y Sottile en Debate Final, instantes después de comparar la problemática de debe surfear River con las coyunturas que aquejan a presidentes de la talla de CFK y Obama. Siempre a lo grande, Daniel…
Passarella le reclama a la oposición política de River la solidaridad que él no tuvo cuando Bilardo lo bajo de la capitanía de la Selección para ungir a Maradona, en la antesala de México 86. El Passarella que adivina una conspiración político-periodística en su contra es el mismo Passarella que en Francia 98 avalo el boicot del plantel argentino ante la prensa mundial, uno de los mas bochornosos episodios que se recuerden en la historia de la Copa del Mundo, aunque no tan bochornoso como el corte en el pómulo de Julio Cruz en La Paz, por las Eliminatorias para ese mismo Mundial, en el vestuario que estaba a su cargo y que pudo haber costado una oprobiosa sanción para el fútbol argentino. Un escándalo comparable al que protagonizo en Italia, cuando en su etapa como jugador del Inter, poseído por la ira que suele arroparlo de tanto en tanto, le aplico un planchazo a un alcanza-pelotas en el partido con Sampdoria (1-3), en marzo de 1987.
Según la particular visión del Kaiser, el periodismo “no sabe de fútbol y no habla de fútbol” (falacia total, jamas se emitieron mas partidos y programas especializados como en la actualidad; se debate como nunca sobre juego). Y ese magistral operativo pinza seria el detonante principal del tsunami de insultos que le han dedicado por el Monumental y sus adyacencia, en diversos hashtag(#ChauDAP) y foros riverplatenses(tuRiver). No por su política de refuerzos para evitar el descenso (Bordagaray, y gracias). No por el descenso. No por el tortuoso pero efectivo camino del ascenso. No por el inconsistente andar del equipo en los últimos 50 partidos dirigidos por Almeyda. No por el cachetazo ingrato que les propino a dos idolos millonarios como Cavenaghi y el Chori(cof cof). No por haberse dejado soplar refuerzos como Guillermo Burdisso. No, no y no. La culpa del tsunami, dice Daniel, el jaqueado Daniel, es de los malditos periodistas.
Menos mal chiche. Menos mal que ya archivaste La Maquina de la Verdad. Mira si lo invitabas a Daniel. Mirá si lo invitabas…
Gran texto, por eso quise compartirlo. Espero que les guste,
Saludos!
no supe donde ponerlo :mrgreen: muévanlo si quieren!