Inflación: verdad-mentira

Antes que nada aclaro que lo siguiente no es algo que haya escrito, pero sì tal vez, que en cierto modo comparto. Lo escribiò un amigo.
La falta de este tipo de anàlisis, PARA MÌ, son los que hacen a Lanata de un periodista inteligente pero cegado por convicciones crìticas lo que lo convierten en un periodista con falta de anàlisis polìtico, donde reduce todo a sì Juancito tiene una casa de màs en Necochea o si Pablito participó como subgerente del ministerio de eduacación durante el gobierno de Menem, todo esto y repito, PARA MÌ, dejando de lado las necesidades actuales y el contexto en el que se lo hace. Y cito a Jorge Lanata, ya que muchos de los denominados intelectuales se apoyen en su periodismo bajo el logo “la diferencia entre enterarse y entender”.
Bueno ojalà, a pesar de disentir, los puntos expuestos les parezcan al menos interesantes o curiosos.
Prosigo con la nota nomàs.
Saludos.

“Una inflación que te haga feliz…”:

Muchas veces me pregunto si esta realmente mal decir mentiras. No hablo de esas mentiras crueles, sino de aquellas que su efecto parece “positivo”, (dije “parece”). Por ejemplo, te encontras con un amigo “gordito” que no ves hace tiempo y le decís, que “flaco” estás!!. Capaz está igual o peor, de alguna manera estas mintiendo. Al final volveré con esta cuestión.

El tema que quiero tratar es el inflacionario, aspecto en el que los argentinos somos especialistas.

¿Tiene razones el gobierno para manipular el “numerito” de la inflación?, veamos en que se puede ver beneficiado:

1º motivo: para frenar los aumentos salariales. Cuanto mas alta es la inflación, mayor es el aumento salarial que van a reclamar los sindicatos. Nadie quiero perder capacidad de compra, es decir, si antes con mi salario compraba 3 bananas y 6 tomates, hoy no quiero comprar con el mismo salario, 2 bananas y 4 tomates. Por que de esa manera es como si mi salario es mas bajo.

2º motivo: para que el número de personas debajo de la línea de pobreza sea menor. La cantidad de pobres es sin duda el principal indicador que permite medir la bondad de una política económica.

Para esta medición se utilizan 2 canastas: la “Canasta Básica Total”, donde se toman productos alimenticios, y servicios (colectivo, escuela, vivienda, etc.). En cambio, la “Canasta Básica Alimentaría” toma sólo productos alimenticios, es decir, “la plata que se necesita para comer”. La primera mide la pobreza (en febrero una familia tipo necesito 970$ para no ser pobre) y la segunda la indigencia (450$).

Los precios son fundamentales. Si los precios son bajos, el mismo ingreso puede comprar más que si fueran elevados. Por tanto, si el INDEC dibuja hacia abajo los precios, está dibujando indirectamente el índice de Pobreza.

Entonces, la idea es que si una familia tipo tiene 1000 $ de ingresos mensuales y la CBT esta en 970$, por el momento no es considerada pobre. Pero si la inflación lleva a esta canasta a 1010$ y el salario no se modifica, esa familia cae automáticamente en la pobreza.

Algo similar ocurre con la indigencia y los planes Jefes de Hogar. Si la inflación arrastra a la CBA a un número que supere el valor de estos planes, toda esta gente caería en la indigencia, que peligro para el Gobierno, no?

¿A cuanto treparía el índice de Pobreza si los precios fueran reales y no los dibujados por el INDEC? ¿Cuánto de inclusión social tiene este modelo, más allá de los discursos?

3º motivo: para disminuir los intereses de los bonos ajustados por CER

Por cada punto de inflación, los bonos públicos ajustados por CER (Coeficiente de estabilización de referencia) devengan $400 millones de pesos. El secretario Moreno dijo en su oportunidad “es una locura pagar mas intereses porque sube el precio de la lechuga”.

Una sencilla explicación nos dice que cuando un Gobierno necesita dinero, emite ciertos papeles llamados “bonos”. Entonces, si se necesitan 10$ pesos, otra entidad se los presta. Pero el Gobierno le va a devolver esos 10$ mas un interés, como sucede con todo. Hay ciertos bonos que se ajustan por inflación, es decir, cuanto más alto sea este índice, mas interés hay que pagar. Ahora se entiende lo tremendo que es que por 1 pto. de inflación halla que pagar 400 millones de pesos.

El efecto de la suba de los precios al consumidor en 8,4% en el 2007 significo un aumento de la deuda publica en u$s 4.580 millones (lo que les contaba de los bonos ajustados por CER).

4ª motivo: para que el indicador de Crecimiento económico sea mayor. El aporte de industria y construcción se construye en base a encuestas cuantitativas. Se cuentan la cantidad de productos que se fabrican en cada sector. Es relativamente genuino.

En cambio, el indicador de servicios, es más difícil. ¿Cómo se miden los servicios financieros? La forma habitual es comparar el valor nominal de los depósitos año contra año y deflactarlos por un índice de precios. Si el índice está dibujado hacia abajo, el dato de crecimiento será mayor.

Esto explica por qué las tasas de crecimiento en los servicios “siguen siendo chinas” rondando el 10% mientras que la industria y la construcción se están amesetando en torno al 5-6%.

Con todo esto no quise hacer un texto económico, y seguramente hay muchas razones más. Lo claro es que mentir a la gente con temas tan delicados como la pobreza y la indigencia es inaceptable. Tampoco es bueno mostrar al mundo una imagen de un país con índices de inflación, ocupación, crecimiento, etc. muy favorables, cuando no lo son.

¿Pero que pasa si esos 400 millones son destinados a escuelas, hospitales, jubilados, etc.? ¿Sigue siendo tan malo mentirle a los acreedores? ¿Nos seguirán prestando?

Por otro lado, ¿qué pasaría si el INDEC anuncia que la inflación en 2007 fue de 20%? El verdulero diría “yo voy a subir un 20%”. El carnicero va a la verdulería a comprar y ve esta suba, entonces en su carnicería aumenta un 25% por la dudas. El mecánico va a la carnicería y nota estos incrementos, y a “ojo” decide subir su precio un 20-30%. Y que pasaría si el gasista lleva su auto a ese taller, el médico llama al gasista, el dentista va al médico, etc. etc.…saquen sus conclusiones.

Lo que esta sucediendo hoy en día es una “revolución de expectativas”. Todos tenemos nuestro índice, y lo aplicamos de alguna manera a nuestro criterio. Ya nadie se guía por los números del INDEC.

¿Y que diría el dueño de una Pyme y tiene que subir los salarios para una inflación del 20% en vez de una del 8%? No le gustaría nada.

En fin, lo que intenté fue mostrar que hay razones para que el Gobierno altere los números del INDEC, pero que muchas de ellas pueden llegar a ser, en algún punto, de beneficio para nosotros.

Ya vivimos inflaciones del 1000% (mil), ahora discutimos por un 20%…

Una mentira que te haga feliz, vale mas que una verdad que te amargue la vida! le escuche decir una vez a Ricardo.

¿Ahora podemos mentir un poquitito? ¿Hay diferentes tipos de mentiras, o siempre es mentita y punto?..

Antes que nada aclaro que lo siguiente no es algo que haya escrito, pero sì tal vez, que en cierto modo comparto. Lo escribiò un amigo.
La falta de este tipo de anàlisis, PARA MÌ, son los que hacen a Lanata de un periodista inteligente pero cegado por convicciones crìticas lo que lo convierten en un periodista con falta de anàlisis polìtico, donde reduce todo a sì Juancito tiene una casa de màs en Necochea o si Pablito participó como subgerente del ministerio de eduacación durante el gobierno de Menem, todo esto y repito, PARA MÌ, dejando de lado las necesidades actuales y el contexto en el que se lo hace. Y cito a Jorge Lanata, ya que muchos de los denominados intelectuales se apoyen en su periodismo bajo el logo “la diferencia entre enterarse y entender”.
Bueno ojalà, a pesar de disentir, los puntos expuestos les parezcan al menos interesantes o curiosos.
Prosigo con la nota nomàs.
Saludos.

“Una inflación que te haga feliz…”:

Muchas veces me pregunto si esta realmente mal decir mentiras. No hablo de esas mentiras crueles, sino de aquellas que su efecto parece “positivo”, (dije “parece”). Por ejemplo, te encontras con un amigo “gordito” que no ves hace tiempo y le decís, que “flaco” estás!!. Capaz está igual o peor, de alguna manera estas mintiendo. Al final volveré con esta cuestión.

El tema que quiero tratar es el inflacionario, aspecto en el que los argentinos somos especialistas.

¿Tiene razones el gobierno para manipular el “numerito” de la inflación?, veamos en que se puede ver beneficiado:

1º motivo: para frenar los aumentos salariales. Cuanto mas alta es la inflación, mayor es el aumento salarial que van a reclamar los sindicatos. Nadie quiero perder capacidad de compra, es decir, si antes con mi salario compraba 3 bananas y 6 tomates, hoy no quiero comprar con el mismo salario, 2 bananas y 4 tomates. Por que de esa manera es como si mi salario es mas bajo.

2º motivo: para que el número de personas debajo de la línea de pobreza sea menor. La cantidad de pobres es sin duda el principal indicador que permite medir la bondad de una política económica.

Para esta medición se utilizan 2 canastas: la “Canasta Básica Total”, donde se toman productos alimenticios, y servicios (colectivo, escuela, vivienda, etc.). En cambio, la “Canasta Básica Alimentaría” toma sólo productos alimenticios, es decir, “la plata que se necesita para comer”. La primera mide la pobreza (en febrero una familia tipo necesito 970$ para no ser pobre) y la segunda la indigencia (450$).

Los precios son fundamentales. Si los precios son bajos, el mismo ingreso puede comprar más que si fueran elevados. Por tanto, si el INDEC dibuja hacia abajo los precios, está dibujando indirectamente el índice de Pobreza.

Entonces, la idea es que si una familia tipo tiene 1000 $ de ingresos mensuales y la CBT esta en 970$, por el momento no es considerada pobre. Pero si la inflación lleva a esta canasta a 1010$ y el salario no se modifica, esa familia cae automáticamente en la pobreza.

Algo similar ocurre con la indigencia y los planes Jefes de Hogar. Si la inflación arrastra a la CBA a un número que supere el valor de estos planes, toda esta gente caería en la indigencia, que peligro para el Gobierno, no?

¿A cuanto treparía el índice de Pobreza si los precios fueran reales y no los dibujados por el INDEC? ¿Cuánto de inclusión social tiene este modelo, más allá de los discursos?

3º motivo: para disminuir los intereses de los bonos ajustados por CER

Por cada punto de inflación, los bonos públicos ajustados por CER (Coeficiente de estabilización de referencia) devengan $400 millones de pesos. El secretario Moreno dijo en su oportunidad “es una locura pagar mas intereses porque sube el precio de la lechuga”.

Una sencilla explicación nos dice que cuando un Gobierno necesita dinero, emite ciertos papeles llamados “bonos”. Entonces, si se necesitan 10$ pesos, otra entidad se los presta. Pero el Gobierno le va a devolver esos 10$ mas un interés, como sucede con todo. Hay ciertos bonos que se ajustan por inflación, es decir, cuanto más alto sea este índice, mas interés hay que pagar. Ahora se entiende lo tremendo que es que por 1 pto. de inflación halla que pagar 400 millones de pesos.

El efecto de la suba de los precios al consumidor en 8,4% en el 2007 significo un aumento de la deuda publica en u$s 4.580 millones (lo que les contaba de los bonos ajustados por CER).

4ª motivo: para que el indicador de Crecimiento económico sea mayor. El aporte de industria y construcción se construye en base a encuestas cuantitativas. Se cuentan la cantidad de productos que se fabrican en cada sector. Es relativamente genuino.

En cambio, el indicador de servicios, es más difícil. ¿Cómo se miden los servicios financieros? La forma habitual es comparar el valor nominal de los depósitos año contra año y deflactarlos por un índice de precios. Si el índice está dibujado hacia abajo, el dato de crecimiento será mayor.

Esto explica por qué las tasas de crecimiento en los servicios “siguen siendo chinas” rondando el 10% mientras que la industria y la construcción se están amesetando en torno al 5-6%.

Con todo esto no quise hacer un texto económico, y seguramente hay muchas razones más. Lo claro es que mentir a la gente con temas tan delicados como la pobreza y la indigencia es inaceptable. Tampoco es bueno mostrar al mundo una imagen de un país con índices de inflación, ocupación, crecimiento, etc. muy favorables, cuando no lo son.

¿Pero que pasa si esos 400 millones son destinados a escuelas, hospitales, jubilados, etc.? ¿Sigue siendo tan malo mentirle a los acreedores? ¿Nos seguirán prestando?

Por otro lado, ¿qué pasaría si el INDEC anuncia que la inflación en 2007 fue de 20%? El verdulero diría “yo voy a subir un 20%”. El carnicero va a la verdulería a comprar y ve esta suba, entonces en su carnicería aumenta un 25% por la dudas. El mecánico va a la carnicería y nota estos incrementos, y a “ojo” decide subir su precio un 20-30%. Y que pasaría si el gasista lleva su auto a ese taller, el médico llama al gasista, el dentista va al médico, etc. etc.…saquen sus conclusiones.

Lo que esta sucediendo hoy en día es una “revolución de expectativas”. Todos tenemos nuestro índice, y lo aplicamos de alguna manera a nuestro criterio. Ya nadie se guía por los números del INDEC.

¿Y que diría el dueño de una Pyme y tiene que subir los salarios para una inflación del 20% en vez de una del 8%? No le gustaría nada.

En fin, lo que intenté fue mostrar que hay razones para que el Gobierno altere los números del INDEC, pero que muchas de ellas pueden llegar a ser, en algún punto, de beneficio para nosotros.

Ya vivimos inflaciones del 1000% (mil), ahora discutimos por un 20%…

Una mentira que te haga feliz, vale mas que una verdad que te amargue la vida! le escuche decir una vez a Ricardo.

¿Ahora podemos mentir un poquitito? ¿Hay diferentes tipos de mentiras, o siempre es mentita y punto?..

Esta nota me parece más atinada, mucho más atinada:

¿Por qué K intervino el INDEC?

La perspectiva de un 1,5% de inflación para enero, aún medida como a ellos le conviene, era intolerable para el gobierno de Kirchner. Por eso decidió patear el tablero: relevó de su cargo a Graciela Bevacqua directora del INDEC y trató de forajidos a los trabajadores del organismo, para terminar manipulando un índice del 1,1% que nadie cree. Es que K sabe que mostrar los números reales, no sólo le trae problemas electorales, sino que reactivará los reclamos salariales. El 30% declamado por Moyano como «piso» sería más que concreto en la cabeza de millones de trabajadores, que ven licuarse día a día su salario debido a la inflación.
Todos los trabajadores saben que los aumentos de precios en los últimos meses vienen golpeando muy fuerte el bolsillo. Nadie acepta los índices que viene mostrando el INDEC desde hace años, ya que ellos miden los aumentos o descensos de precios de miles de productos que la inmensa mayoría del pueblo trabajador no consume, mientras que la carne, las verduras y la comida en general que consumimos todos los días, vienen aumentando mucho más que lo marcan los índices. Pero en este enero de 2007, todo se hizo más agudo, desde el gobierno ya vislumbraban que aún los datos del INDEC (por más que «aplasten» la inflación) superarían el 1,5%, número intolerable para Kirchner, ya que «aseguraba» una inflación superior al 12-15% para el 2007. Esto evidentemente reavivaría todos los reclamos salariales y aumentaría en cientos de miles la cantidad de pobres e indigentes en nuestro país…en medio de un año electoral.
Fue por eso que decidieron patear el tablero, desvincularon de su cargo a Graciela Bevacqua (una técnica, con muchos años de experiencia en la tarea) previo haberla apretado para que dijera cuáles eran los comercios de los que había sacado los datos y así poder ellos manipular los datos. No contentos con ello salieron a atacar a todos los empleados del INDEC a los que Aníbal Fernández trató de mafiosos y forajidos.
Kirchner miente no sólo con la inflación
Como venimos sosteniendo desde estas páginas hace tiempo, el gobierno de K es el campeón del doble discurso y las mentiras al pueblo. La manipulación de los datos del INDEC de estos días es más que grotesca ya que mientras anuncian cínicamente estar contentos con el 1,1%, todos sabemos que la carne aumentó más del 30%, los zapallitos 60% y las papas el 35%. Y la Canasta Básica de Alimentos para 5 personas según el propio INDEC subió el 2,6% ($593).
Pero este gobierno ya viene manipulando otros datos relacionados con la inflación y la pobreza. Así a fines de año publicó que habían logrado bajar la desocupación a cerca del 10%. Para hacerlo incluyó como «ocupados» a casi dos millones de trabajadores que sólo consiguen trabajar 35 hs semanales y ganan de promedio menos de $300 mensuales y a un millón y medio de personas que cobran planes sociales… precisamente por estar desocupados.
Y hay más, desde hace años vienen agregando distintas «canastas» para disfrazar la pobreza y negociar con la burocracia sindical menores aumentos en los salarios. Así cambiaron la conocida por todos Canasta Familiar que hoy supera claramente los $2.500, por una Canasta Básica de Alimentos de $590 aproximadamente que mediría la indigencia y una intermedia Canasta Familiar que mediría el nivel de pobreza que se ubicaría alrededor de los $ 970. Tuvieron que inventar estos indicadores porque si comparamos tan sólo con 1998, la pobreza aumentó el 59%, la indigencia el 152% y la brecha entre ricos y pobres se amplió casi un 30%.
Aplicar la Ley de Abastecimiento y aumentar los salarios
Según los indicadores macro-económicos que maneja el gobierno y al cual adhieren todos los sectores burgueses del país, la economía argentina viene creciendo desde el 2003 a ritmos superiores al 9% anual, de manera que ya el año pasado el PBI superó al de 1998 (antes del inicio de la recesión). Pero en todos estos años de «recuperación» de la economía la torta se reparte cada vez más injustamente, de manera que hay más concentración económica en manos de los grandes capitalistas (por eso aumenta la brecha entre pobres y ricos), el salario promedio cayó un 24%, que con ser mucho esconde los verdaderos índices.
Desde el punto de vista de los precios que pagan los sectores populares, los índices que presenta el gobierno no tienen nada que ver con la realidad. Kirchner no aplica ninguna de las medidas que tiene a su alcance y podría aplicar para parar el aumento desenfrenado de los precios. Por un lado interviene el INDEC para dibujar los números pero por otro subsidia a los grandes empresarios. Subsidios que aumentaron desde el inicio de su gobierno encima del 260%. Sin embargo este mes los precios subsidiados aumentaron más que los libres.
Por eso si fuera cierto que Kirchner quiere controlar la inflación y los aumentos desmedidos de precios, en vez de dibujar los índices en los que ya nadie cree, tiene una herramiento fundamental que es la aplicación de la Ley de Abastecimiento que contiene pena de cárcel para los empresarios abusadores.
Y por otro lado en vez de buscar techos de aumentos de salarios tiene que decretar un aumento general de salarios donde el mínimo para todos los trabajadores sea el de la Canasta Familiar. Tenemos que exigir a la CGT y la CTA que se pronuncien y convoquen a un plan de acción para lograr estos objetivos. Esta es la manera de parar la inflación y de que los salarios no pierdan su poder adquisitivo.

No les creo un carajo, ni al Gobierno ni a los del iNDEC.

Me tienen las pelotas llenas dibujando los numeros.

dibujar la inflacion sirve para frenar aumentos salariales y otras cosas, pero la mentira salta a la vista y el mercado se maneja por la inflacion real, por ello los alquileres se estan ajustando terriblemente y con valores que cambian trimestralmente en algunos casos y dia a dia se suman nuevos conflictos con grupos pseudo productivos. no podemos tapar el sol con un dedo, este parche del indice dibujado no puede controlar la realidad, todo se esta yendo a la mierda lenta pero inexorablemente. este plan de pais de clientelismo politico tiene poco por recorrer.