Mario Gallina y Javier Castrilli quedaron fuera del Coprosede y la Subsef. El primero sería reemplazado por el comisario Rubén Pérez y el fiscal Fabio Potenza mientras que por el Sheriff iría el funcionario Juan Carlos Blanco.
El cambio de autoridades a nivel nacional implicaba casi con seguridad una variante en el ámbito de la seguridad en el fútbol. Porque el gobernador bonaerense Daniel Scioli ya había dejado trascender que no comulgaba con los métodos de Mario Gallina (fundamentalmente se oponía a que los hinchas del Ascenso no pudieran ir de visitante) y porque en el ámbito de la Nación había una sensación de gracias por los servicios prestados para Javier Castrilli. Y así sucedió, nomás: las renuncias de ambos fueron aceptadas y ya comenzó la danza de los reemplazantes.
Claro que eligieron diferentes métodos para irse. Mientras Castrilli lo hizo con bajo perfil, Gallina disparó munición pesada. “Pensé que este gobierno no me iba a reemplazar, porque mi gestión es muy positiva y dejé hasta la salud en este cargo. De un ojo casi no veo y me llevo 13 puntos de sutura en la cabeza. Cuando yo asumí veníamos de seis muertos en Provincia y en cinco años llevamos tres, y todos fuera de los estadios”, afirmó en declaraciones a TyC Sports. “Quedó pendiente mejorar los operativos policiales y seguir con la profesionalización. Esperaba hacerlo ahora, pero el ministro Stornelli ni siquiera me atendió. ¿El tema de los visitantes en el Ascenso? Era una medida transitoria tomada en conjunto con la AFA. La idea era cambiar algunas pautas para que pudieran volver en la próxima temporada. Ahora no sé qué harán”, cerró.
Lo cierto es que Scioli ya tendría definido sus reemplazantes: serían el comisario mayor Rubén Pérez, nexo policial en lo referido a Seguridad Deportiva, y el fiscal Fabio Potenza, con relación con el ministro Stornelli. El primero es muy resistido por el personal civil, que siempre tiene sospechas sobre el verdadero accionar de la Bonaerense, pero tiene la banca de la AFA. El segundo es un especialista en derecho penal, que sería su segundo.
En Nación las cosas tampoco están tan claras. Por un lado, la Subsecretaría perdería esa condición y tendría un rango menor: dirección de seguridad deportiva. Y el nombre que más suena es el de Juan Carlos Blanco, con experiencia en el área, ya que viene trabajando hace años en esa función en la Secretaría de Deportes de la Nación. Junto a él podrían trabajar familiares de víctimas de la violencia en el fútbol y suena para sumarse Alberto Rivero, el padre del hincha de Independiente, Gustavo Rivero, asesinado antes del clásico de Avellaneda del Clausura 02.
http://www.ole.clarin.com/notas/2007/12/14/01563902.html
perdon si hay un tema pero bueeeee!!
Por fin se fueron!! estos tipos que quieren destuir lo mas lindo del futbol
el folcklore!!