Newell’s pidió a Falcao por Fabbiani y la negociación se estancó, pero el Ogro sigue firme. Igual, River y su representante creen que todavía puede haber acuerdo.
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Es un tema cerrado, tendrá que presentarse a entrenar", sentenció Eduardo Bermúdez, vicepresidente de Newell’s. “En los términos que lo plantearon, está terminado”, admitió Domingo Díaz, vice de River. ¿Se acabó la historia? ¿Cristian Fabbiani no se pondrá la banda roja que ya se puso para Olé? “Si no queda otra, estaré parado seis meses. No me veo en Rosario, para nada”, se plantó el Ogro, decidido al todo o nada. “Estamos tranquilos, es el comienzo de la negociación, era lógico que pasara esto en la primera reunión”, opinó Luciano Duthu, el representante del delantero, quien dio la visión más real al estado actual del tire y afloje por el pase del Gordo.
Por la tarde, en Rosario, hubo un encuentro entre los vicepresidentes de los clubes. Y Newell’s hizo un pedido inesperado: Falcao por Fabbiani. Sí, ante la insistencia de Sensini por tener un reemplazante para el delantero que se va, los dirigentes no se anduvieron con chiquitas. Salcedo fue otra variante que sugierieron, pero River sólo accedió a ofrecer a Andrés Ríos, nombre que no sedujo. Ante la inflexible postura de Newell’s, se saludaron y le pusieron un punto final a la novela, que rápidamente se transformó en puntos suspensivos porque desde Núñez sacaron una carta mágica para presionar.
Mientras Fabbiani mantuvo su firme postura de no regresar al Parque Independencia por más que Newell’s le haya avisado al Cluj de Rumania que su jugador está incumpliendo el contrato (“yo me la jugué y sabía que podía pasar esto, entiendo la posición de ellos pero la mía no la voy a cambiar”), un allegado a la dirigencia millonaria le avisó a Aguilar que él tiene los documentos del club rosarino que había acordado no ejecutar por el momento para no complicar más aún su economía. Pero ante esta situación, presionaría con ir a cobrarlos si no hay acuerdo con el Ogro. Así, especula la dirigencia de River, lograrán que los rosarinos vuelvan a sentarse a negociar en otros términos, tal vez sin jugadores en el medio y sí con un monto de dólares que esté al alcance de la también golpeada tesorería de Núñez.
No puede terminar asi esto.