cmauri@lanacion.com.ar 07 de Junio de 2011 - 07:39
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Por situaciones deportivas menos graves y comprometedoras que las que River vive ahora, la anterior gestión que encabezó Aguilar soportó después de varios partidos la toma del hall del Monumental con un ánimo de protesta cercano al de una asamblea destituyente. Passarella todavía no sintió el estremecimiento de las entrañas del club, pese a la preocupante actualidad y las sombrías perspectivas. Se beneficia de un público, hinchas y socios, tan militante para seguir al equipo como perplejo y paralizado ante los acontecimientos.
El disgusto de la gente aún no alcanza a Passarella como uno de los principales responsables. El Káiser se acerca al año y medio de gobierno, justo el plazo que divide en dos mitades exactas, entre su mandato y el último tramo de Aguilar, las tres temporadas que se computan para los promedios del descenso.
Passarella heredó una cosecha de 62 puntos por tres torneos, desde el Apertura 2008, cuando River fue último por primera vez en la historia. A falta de dos fechas para completar un segmento igual con el Káiser en el sillón presidencial, la campaña mejoró, se sumaron 78 puntos, pero son insuficientes para seguir dependiendo de sí mismo para evitar la Promoción. No se están dando algunos cálculos que hizo Passarella hace dos meses, en una entrevista con La Nacion. De los tres campeonatos que decía estar jugando ( “arriba, abajo y el económico” ) ya descartó el que otorgaba más gloria. “Hay que sumar 31 puntos, lo demás es yapa” , había agregado. Si River gana los dos encuentros, llegará a esa cifra, pero necesitaría esa propina imposible para no depender de lo que hagan Olimpo, Tigre, Arsenal y All Boys.
Cerca de cumplir 18 meses, el proyecto de Passarella no despega en ningún rubro. En lo futbolístico parece haber cometido el pecado de la subestimación. Jota Jota López será el tercer técnico que le dura menos de un año, luego de haber heredado a Astrada y elegido a Cappa, al que despidió. Da la impresión de que se dejó guiar por su ego para no contratar entrenadores que le compitieran en cartel o fueran muy autónomos, como es el caso de Ramón Díaz.
En otras cuestiones se expuso a la sobreactuación sin resultados concretos. Su aura de Gran Capitán y poder de convencimiento fueron escasos para que volvieran a River algunas de las figuras que emigraron en los últimos años.
La auditoría sobre el gobierno anterior y el fideicomiso, anunciados a los cuatro vientos, siguen en una nebulosa. La demonización de su predecesor como causa de todos los males se extingue en la medida en que ya es tiempo de aportar soluciones propias. Passarella prometió una refundación que si se sigue demorando deberá encararla desde más abajo que el piso que a él le tocó.
cmauri@lanacion.com.ar 07 de Junio de 2011 - 07:39
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Por situaciones deportivas menos graves y comprometedoras que las que River vive ahora, la anterior gestión que encabezó Aguilar soportó después de varios partidos la toma del hall del Monumental con un ánimo de protesta cercano al de una asamblea destituyente. Passarella todavía no sintió el estremecimiento de las entrañas del club, pese a la preocupante actualidad y las sombrías perspectivas. Se beneficia de un público, hinchas y socios, tan militante para seguir al equipo como perplejo y paralizado ante los acontecimientos.
El disgusto de la gente aún no alcanza a Passarella como uno de los principales responsables. El Káiser se acerca al año y medio de gobierno, justo el plazo que divide en dos mitades exactas, entre su mandato y el último tramo de Aguilar, las tres temporadas que se computan para los promedios del descenso.
Passarella heredó una cosecha de 62 puntos por tres torneos, desde el Apertura 2008, cuando River fue último por primera vez en la historia. A falta de dos fechas para completar un segmento igual con el Káiser en el sillón presidencial, la campaña mejoró, se sumaron 78 puntos, pero son insuficientes para seguir dependiendo de sí mismo para evitar la Promoción. No se están dando algunos cálculos que hizo Passarella hace dos meses, en una entrevista con La Nacion. De los tres campeonatos que decía estar jugando ( “arriba, abajo y el económico” ) ya descartó el que otorgaba más gloria. “Hay que sumar 31 puntos, lo demás es yapa” , había agregado. Si River gana los dos encuentros, llegará a esa cifra, pero necesitaría esa propina imposible para no depender de lo que hagan Olimpo, Tigre, Arsenal y All Boys.
Cerca de cumplir 18 meses, el proyecto de Passarella no despega en ningún rubro. En lo futbolístico parece haber cometido el pecado de la subestimación. Jota Jota López será el tercer técnico que le dura menos de un año, luego de haber heredado a Astrada y elegido a Cappa, al que despidió. Da la impresión de que se dejó guiar por su ego para no contratar entrenadores que le compitieran en cartel o fueran muy autónomos, como es el caso de Ramón Díaz.
En otras cuestiones se expuso a la sobreactuación sin resultados concretos. Su aura de Gran Capitán y poder de convencimiento fueron escasos para que volvieran a River algunas de las figuras que emigraron en los últimos años.
La auditoría sobre el gobierno anterior y el fideicomiso, anunciados a los cuatro vientos, siguen en una nebulosa. La demonización de su predecesor como causa de todos los males se extingue en la medida en que ya es tiempo de aportar soluciones propias. Passarella prometió una refundación que si se sigue demorando deberá encararla desde más abajo que el piso que a él le tocó.
Un mamarracho nunca visto lo del presi. No nos trajo siquiera una brisa de cambio, puedo palpar el mismo clima denso en el cual estaba river con aguilar. el mismo.
La oscuridad plena.
“La auditoría sobre el gobierno anterior y el fideicomiso, anunciados a los cuatro vientos, siguen en una nebulosa. La demonización de su predecesor como causa de todos los males se extingue en la medida en que ya es tiempo de aportar soluciones propias. Passarella prometió una refundación que si se sigue demorando deberá encararla desde más abajo que el piso que a él le tocó.”
La mierda… Que gracioso, nos sale re barata la jodita de este hijo de mil puta.
El principal problema de Passarella es su ego. Es como Maradona. Son esos tipos que creen que, como ellos en lo personal ya las pasaron todas, son inmunes y que nadie los va a venir a correr con lo que ellos “mas saben”. El “no nos comamos el chamuyo de los alemanes” o el “no estén cagados” parten del mismo concepto : yo me las se todas, yo soy el Diego, yo soy Passarella, “conmigo no” ( :mrgreen: ) Y después vienen los alemanes y te meten 4, y después no te alcanza para llegar a los 30 puntos y estás con el culo en las manos.
yo lo banque a passarella , es mas, todavia no lo detesto por completo…
pero para mi sobro muchisimo la situacion por no tener una mera conciencia de como estabamos…
es imposible que un par de personas en el foro, hace tres años hayan advertido la situacion y ningun dirigente se haya dado cuenta…
si passarella hubiera sido conciente de esto, cuan do asumio tendria que haber actuado de muchas otras maneras , y nunca, pero nunca…como actuo
quizo quedar como "el salvador de river de todos los males, economica y deportivamente, y estamos al borde de rifar el club y perder la categoria…
Por situaciones deportivas menos graves y comprometedoras que las que River vive ahora, la anterior gestión que encabezó Aguilar soportó después de varios partidos la toma del hall del Monumental con un ánimo de protesta cercano al de una asamblea destituyente.
Pobre José María che!
No podés empezar la nota así, es un pelotudo, por más que después intente aclarar.
Yo creo que hizo cosas mal por propia inexperiencia, pero por mas que las hubiese hecho bien, no me imagino una realidad tan distinta a la actual… que es un soberbio, sin dudas, esto es un rasgo caracteristico de las personas que alcanzan el nivel de notoriedad que él alcanzó… lo que mas quizás tenga para reclamarle es el tema de la auditoría…
No, debe estar gozando diciendo lo que saben hasta ahora de mi esta a la altura de passarella en cuanto a gestión y mientras no se enteren de todas las que hice, no solo soy impune si no que tambien hubo alguien que me equipara, en cuanto al publico, a nivel mandato.
Yo al “proyecto” de Passarella (si eso existe) lo veo positivo en el largo plazo, por eso de rebajar gastos, no regalar patrimonio del club y no gastar mucho en las compras. Pero en el corto plazo nos tiene con los huevos por la garganta:confused: Si zafamos de este año y del próximo, Passarella debería dejar en diciembre 2013 un club mucho mejor parado que el que encontró.
Si zafamos de la promo para el torneo que viene TIENE que traer jugadores de primer nivel. Yo ya me estoy bancando esto, ahora comprá todo y salí a romper ojetes.
Capacidad de gestion…OK, en gestionar las deudas, si no tenes ingresos no tenes mucho que gestionar, un equipo que no clasifica a ninguna copa, esta peleando el descenso, logra tener contratos mas bajos , ya que los sponsor no estan interesados en publicitar, por miles de motivos. es Marketing.
Me parece que este torneo es el quiebre de todo, o nos vamos a la B, o safamos y empezamos a encarrilar de una vez por todas al club (sobre todo en lo economico)
si , usando a los empresarios…pero tambien puede ser pan para hoy , hambre para mañana, acordate que los mayores ingresos de un club son la venta de jugadores, y las comisiones de lo que te puede dar un empresario por su jugador, son migajas.
terminas haciendo de vidriera, y tapando tus juveniles, que son las promesas a vender en el futuro y puedan dejarte un buen $$.