No hagan quilombo, ni se empiezan a matar.
Es un debate, en esta oportunidad, Leonardo Ponzio.
Juega de 5. Siempre se caracterizó por ser el 5 “raspador” sin embargo, en esta segunda oportunidad en River, luego de la ida de jugadores como Alejandro Domínguez, Ocampos, y del bajón de rendimiento en jugadores como Sánchez y Cirigliano, Leo asumió el rol de conductor, sobre todo en el Torneo Inicial 2012. Con partidos buenos, otros malos, incluso varios goles, dejó mejor imagen, que la que nos había dejado luego del primer semestre del 2012. Más aún, al erigirse como el único referente real, ante la ausencia de Cavenaghi y Domínguez, y la falta de Trezeguet.
A partir de la Era Ramón Díaz, se volvió más irregular, e incluso, en 8 partidos, se perdió 2 por suspención.
Cambió de compañero, Ledesma, por Cirigliano. Pero nunca cambió su función (decisión de DT o no, no lo sé realmente).
Muchos se pelean, algunos ya lo tiene de ídolo, otros lo ven responsable de muchas falencias en el juego de River.