Gente, escribo este post porque hoy fui a ver a Douglas a su estadio. Tanto venían rompiéndome los higos los amigos que dije “hoy voy” y estuve en el Manuel Morales viendo fútbol de Argentino B. Y me tocó presenciar el partido en que jugó el Fogonero contra el equipo de Lincoln, que viene último en la zona, y que pegó el batacazo hoy en Pergamino.
Bueno, no me fue muy bien como fogonero (y no digan que soy mufa… de las últimas 5 veces que fui a ver a River, ganó 4 y empató 1, por caso)… vi un partido entre Douglas que estaba segundo y Linqueño que estaba último, con el resultado más inesperado, pero no vi mucho más. Nada más parecido a un solteros contra casados, salvo algunas excepciones.
Para Linqueño juega Fabio Schiavi… sí, el hermano del Flaco, que jugó en Argentinos, Quilmes y Chacarita. Es igualito al hermano, sobre todo ahora que se dejó las chapas largas, parece Quasimodo, como todos los lungos altísimos que parecen tener una joroba, es rústico y horrible como el hermano, pero claro… entre medio de los atacantes de Douglas era Gardel y todos los guitarristas, con el solo recurso de cabecear para afuera todo lo que cayese al área y revolear a la mierda todo lo que viniese por abajo.
Ahora, lo que me llamó la atención fue el 11 de El Linqueño, Luciano Millares. Un tipo que había contratado Arsenal, pero que en el medio de la incorporación (junio del año pasado) se bajó de Arsenal porque no se adaptó, aparentemente, y se volvió para Lincoln. No sé qué tan bueno será ese pibe en Primera (evidentemente, algo debe de ser para que lo contrate un club de Primera), pero jugó SOLO. La R-O-M-P-I-Ó. Hizo el gol de penal (el penal, aunque discutible, se lo hicieron a él), reventó el travesaño de un tiro libre de 35/40 metros (del rebote le anulan a Lincoln un gol que para mí valía), hizo de todos los defensores de Douglas un completo hazmerreír, con un repertorio que tenía pegada de larga distancia, gambeta, toque, pique corto, largo… en fin, no sé (como dije antes) como andaría ese pibe en Primera, es más, no sé qué tan pibe es (creo que tiene sus 25), pero cuando lo vi jugar entendí todo lo que mis amigos de Douglas me marcaban de él antes de empezar el partido.
Acá, algo de data: ESPNdeportes.com - Se inició el ciclo de Daniel Garnero en Arsenal
El resto, una lágrima. Douglas no creó una sola situación de riesgo hasta los 33 del segundo tiempo, todo ollazo permanente (Schiavi vuelve a Lincoln con la cabeza llena de chichones y cagándose de risa de todos los que lo puteaban :mrgreen:), y ninguna idea válida como para hacer aunque sea revolcarse al arquero de Linqueño. Los de Lincoln, lo dicho… este pibe que la dejó chiquitita cada vez que la tocaba, estabas en la tribuna y sentías como temblaba cada vez que la pelota iba para el 11… en fin.
Informado sea River, si busca un delantero con repertorio completo.
Abrazos, Martín.