Ante la inminencia del partido entre River Plate y Boca Juniors en el Estadio Monumental, y frente a las manifestaciones periodísticas relacionadas con la cantidad de entradas que la Institución local le entrega para su venta al club visitante, el Club Atlético River Plate hace saber a la opinión pública lo siguiente:
a) En el último partido disputado entre nuestros dos equipos el 4 de mayo último en cancha de Boca Juniors, ese club le entregó a River Plate para vender a su parcialidad 2.400 entradas.
b) En esta ocasión, River Plate le ha otorgado a Boca Juniors 2.400 entradas.
c) Celebramos con auténtico regocijo las manifestaciones de algunos dirigentes de dicha entidad en el sentido de que tal vez en el futuro revean la medida inaugurada por Boca Juniors de restringir estrepitosamente la cantidad de localidades entregadas a los equipos visitantes.
d) Recordamos que el Club Atlético River Plate siempre se ha opuesto a esa modalidad impuesta coercitivamente por los dirigentes de Boca, ya que creemos firmemente en los partidos de dos tribunas.
e) Hacemos notar que siempre, públicamente, River Plate ha defendido esta posición en todos los foros en los que nos fue posible tratar el tema, y que permanentemente ha estado en contra de esa modalidad.
f) Obviamente, los socios y simpatizantes de River Plate no son en modo alguno menos importantes que los de Boca Juniors, razón por la cual, a pesar de no compartirla, nos ajustamos a esa modalidad de entregar un reducido número de entradas para el visitante por una evidente cuestión de equidad.
g) Si finalmente Boca Juniors transforma en hechos la promesa de cambiar esta actitud discriminatoria y vuelve a permitir que los clásicos se jueguen con dos tribunas, River Plate, tal cual es su tradición y respondiendo a su historia de respeto, también podría rever esta modalidad.
h) Por último, recordamos que a River Plate también le queda chico su estadio, que no es precisamente de dimensiones reducidas. No obstante lo cual, jamás se nos hubiera ocurrido tomar decisiones contrarias a la cultura popular que enorgullece al fútbol argentino.
Ante la inminencia del partido entre River Plate y Boca Juniors en el Estadio Monumental, y frente a las manifestaciones periodísticas relacionadas con la cantidad de entradas que la Institución local le entrega para su venta al club visitante, el Club Atlético River Plate hace saber a la opinión pública lo siguiente:
a) En el último partido disputado entre nuestros dos equipos el 4 de mayo último en cancha de Boca Juniors, ese club le entregó a River Plate para vender a su parcialidad 2.400 entradas.
b) En esta ocasión, River Plate le ha otorgado a Boca Juniors 2.400 entradas.
c) Celebramos con auténtico regocijo las manifestaciones de algunos dirigentes de dicha entidad en el sentido de que tal vez en el futuro revean la medida inaugurada por Boca Juniors de restringir estrepitosamente la cantidad de localidades entregadas a los equipos visitantes.
d) Recordamos que el Club Atlético River Plate siempre se ha opuesto a esa modalidad impuesta coercitivamente por los dirigentes de Boca, ya que creemos firmemente en los partidos de dos tribunas.
e) Hacemos notar que siempre, públicamente, River Plate ha defendido esta posición en todos los foros en los que nos fue posible tratar el tema, y que permanentemente ha estado en contra de esa modalidad.
f) Obviamente, los socios y simpatizantes de River Plate no son en modo alguno menos importantes que los de Boca Juniors, razón por la cual, a pesar de no compartirla, nos ajustamos a esa modalidad de entregar un reducido número de entradas para el visitante por una evidente cuestión de equidad.
g) Si finalmente Boca Juniors transforma en hechos la promesa de cambiar esta actitud discriminatoria y vuelve a permitir que los clásicos se jueguen con dos tribunas, River Plate, tal cual es su tradición y respondiendo a su historia de respeto, también podría rever esta modalidad.
h) Por último, recordamos que a River Plate también le queda chico su estadio, que no es precisamente de dimensiones reducidas. No obstante lo cual, jamás se nos hubiera ocurrido tomar decisiones contrarias a la cultura popular que enorgullece al fútbol argentino.