Chile, crisis educativa.

El reclamo por una educación pública de calidad sigue recorriendo Latinoamérica. Luego de un convulsionado 2010 en Argentina, con movilizaciones de más de 30.000 personas e importantes conquistas para el movimiento estudiantil, son ahora los jóvenes chilenos quienes salen a la escena pública con diversas demandas, principalmente presupuestarias y edilicias -aunque la idea de transformación que ronda a la protesta es general-
El “Estudiantazo” Chileno, con más de 100 liceos / colegios secundarios tomados y una enorme movilización por parte de los estudiantes universitarios, surge hoy como la muestra más palpable del papel importantisimo que cumple la juventud de nuestro continente en pelear por lo que es suyo, por no conformarse con “lo que hay”.
Los estudiantes secundarios de Chile -herederos de los “pinguinos” que en 2006 sacudieron a lo largo y a lo ancho el país- están reclamando que la educación pública pase de los municipios a manos del Estado nacional, para obtener así una mejor distribución de los recursos. Es que, con el actual esquema de financiamiento, los colegios dependen del dinero con que cuenta cada ayuntamiento, lo que refuerza (y mucho) la desigualdad en un país con una acentuada estratificación social. También luchan por lograr mejoras edicilias en los colegios dañados por el terremoto de 2010, y por el “boleto / pasaje estudiantil” durante todo el año. El reclamo universitario se enmarca en el mismo contexto: las demandas son por mejoras en el financiamiento estatal y rebaja de aranceles y matrículas. También está la exigencia por la democratización y el co-gobierno en las universidades en Chile, aún hoy regidas por las leyes de la dictadura de Pinochet.
Diversas organizaciones sociales y colectivos que nos hemos reunido recientemente en Buenos Aires en el marco del II Encuentro Latinoamericano de Estudiantes nos manifestamos en apoyo al “Estudiantazo” Chileno, entendiendo el papel vital de la juventud en la lucha por la educación pública, gratuita, crítica, popular y de calidad como instrumento para el cambio social en Nuestra América.
Adelante, compañeros y compañeras!

El reclamo por una educación pública de calidad sigue recorriendo Latinoamérica. Luego de un convulsionado 2010 en Argentina, con movilizaciones de más de 30.000 personas e importantes conquistas para el movimiento estudiantil, son ahora los jóvenes chilenos quienes salen a la escena pública con diversas demandas, principalmente presupuestarias y edilicias -aunque la idea de transformación que ronda a la protesta es general-
El “Estudiantazo” Chileno, con más de 100 liceos / colegios secundarios tomados y una enorme movilización por parte de los estudiantes universitarios, surge hoy como la muestra más palpable del papel importantisimo que cumple la juventud de nuestro continente en pelear por lo que es suyo, por no conformarse con “lo que hay”.
Los estudiantes secundarios de Chile -herederos de los “pinguinos” que en 2006 sacudieron a lo largo y a lo ancho el país- están reclamando que la educación pública pase de los municipios a manos del Estado nacional, para obtener así una mejor distribución de los recursos. Es que, con el actual esquema de financiamiento, los colegios dependen del dinero con que cuenta cada ayuntamiento, lo que refuerza (y mucho) la desigualdad en un país con una acentuada estratificación social. También luchan por lograr mejoras edicilias en los colegios dañados por el terremoto de 2010, y por el “boleto / pasaje estudiantil” durante todo el año. El reclamo universitario se enmarca en el mismo contexto: las demandas son por mejoras en el financiamiento estatal y rebaja de aranceles y matrículas. También está la exigencia por la democratización y el co-gobierno en las universidades en Chile, aún hoy regidas por las leyes de la dictadura de Pinochet.
Diversas organizaciones sociales y colectivos que nos hemos reunido recientemente en Buenos Aires en el marco del II Encuentro Latinoamericano de Estudiantes nos manifestamos en apoyo al “Estudiantazo” Chileno, entendiendo el papel vital de la juventud en la lucha por la educación pública, gratuita, crítica, popular y de calidad como instrumento para el cambio social en Nuestra América.
Adelante, compañeros y compañeras!

//youtu.be/6_txqbZPLRA

Qué asco que me da Piñera, llevando esa sonrrisa falsa a todos lados. Cómo le entregó el país en bandeja a la derecha la Concertación, otra que nuestros “progres”…

Alejo, no nos olvidemos que tanto la concerta como la derecha han hecho de Chile un país neoliberal e inequitativo.

El cambio no puede venir por parte del parlamento bi-partidista (si, en Chile solo las 2 primeras coaliciones ocupan cargos en el congreso), sino de una asamblea constituyente. Ese tiene que ser hoy el debate.


Dejo el ensayo que hice para el colegio, sobre la educacion:

EDUCACION CHILENA: EL FRACASO DEL NEOLIBERALISMO.
Muchas veces hemos escuchado que la educación de un país es la reproducción de su sistema social, en las aulas de clases. La formación, la orientación, y los valores que queremos forjar en la juventud. Nos da a entender que tipo de modelo quermes aplicar.
En Chile, la educación siempre ha sido superlativa, en comparación con países más pobres de América, siempre arrojo mejores resultados es verdad. Sin embargo, la historia de este país tuvo un corte de raíz tremendo. Un cambio drástico de sociedad sufrido en 1973, cuando a punta de escopeta y sangre, las fuerzas armadas inyectaron las formulas neoliberales, hechas desde los mas ajenos tecnócratas norteamericanos. Cambio que alejo completamente al Estado como tal de la vida popular, cambio que persiguió las fuerzas populares y trabajadoras. Cambio que impuso un concepto que día a día pierde valides; para que lo privado sea bueno, lo público tiene que ser malo.
¿Pero cuáles son exactamente los problemas de fondo en la educación de Chile?, ¿Por qué miles y miles de estudiantes se toman los colegios día a día?, ¿Qué tan mal está el nivel cultural de Chile?
Por empezar hay que remontarnos a la dictadura militar, y ver en ese trágico periodo cuales fueron las medidas que se aplicaron (medidas que hasta el día de hoy se mantienen, pero con maquillaje), por empezar la gran y polémica medida es la Municipalización de los colegios, ósea, los colegios administrados por el Estado pasarían a manos de los municipios, y en muchos casos de corporaciones municipales, que aumentarían el lucro y la inequidad educativa. Dentro de estas medidas también se crearon los establecimientos particular- subvencionado, que son administrados en parte compartida con el Estado, y en otra parte con los sostenedores privados. Estos establecimientos tienden a buscar la selección educativa, y la competencia, esto repercute en que entre 1990 y 2004, se han creado más de 1600 colegios subvencionados, y se han creado tan solo 60 colegios municipalizados. Para muchos esto es un “apartheid” educativo, la discriminación social a la hora de educarse, y el “sálvese quien pueda”, tan común en la bolsa de valores, y tan naturalizado en los colegios chilenos.
Para comprobar la inequidad educativa, entre los colegios Chilenos, hay que destacar los paupérrimos resultados de la PSU. En Chile para ingresar a la universidad hay que rendir una Prueba de Selección Universitaria. Esta prueba, evalúa los conocimientos en Lenguaje y Matemática. En el último año, el promedio de los colegios municipalizados no supero los 459 puntos. Esto es trágico, si tenemos en cuenta que no existe en Chile la posibilidad de una Educación gratuita, puesto que las familias más pobres tienen que optar o por becas (becas que las obtienen los estudiantes con mejores promedios, promedios que se encuentran en el primer quintil de la sociedad), o por créditos. Claramente la mayoría de las familias populares tienen que ir a universidades de segunda categoría, donde se endeudan eternamente, y pocos de ellos alcanzan a terminar la carrera universitaria. Ósea, mucha deuda y poca educación.
El modelo neoliberal Chileno tiende a esto. La competencia, y el desarrollo. Pero un desarrollo bastante inequitativo, donde se tiende a hacer más ricos a los ricos, y más pobres a los pobres. No es casualidad que en la comuna de Vitacura, de 20 colegios, 17 sean declarados “verdes” por el semáforo educativo hecho por el MINEDUC (semáforo que evalúa por colores los rendimientos escolares, verdes para los sobresalientes, amarillos para los niveles medios, y rojo es insuficiente), y no se encuentre ninguno rojo. Mientras que al otro lado de la ciudad, en el municipio de La Pintana, de 52 colegios, solo existan 2 categorizados con verdes. Y ni hablar de Los Espejos que tiene tan solo un colegio verde, y casi la mitad en rojo. En la región metropolitana, sacando a los establecimientos verdes (privilegiados en una sociedad de salvajes), más del 80% de los estudiantes no aprenden lo que deberían. La mayoría de estos, concentrados en los lugares más marginales de la Sociedad.

El otro gran ítem dentro del modelo educativo, es la falsa libertad de enseñanza. Libertad que le da la posibilidad a cualquier adulto mayor de 18 años, que curse una carrera universitaria, y que tenga capital disponible; a abrir y cerrar un colegio cuando quiera. Nuevamente, copiamos la libertad de mercado, en las aulas de clase.

En el contexto internacional, a la hora de medir los logros del aprendizaje, para el conjunto del país; los resultados son insuficientes. De acuerdo a mediciones realizadas por la UNESCO, en Lenguaje, casi la mitad de los estudiantes de tercer grado básico; no alcanzan los niveles mínimos de aprendizaje, en dicha aérea. En Matemáticas, la situación es aun mas critica. Casi un 70% de los estudiantes de tercer grado, no alcanzan el nivel aceptable de conocimientos.
Otro aspecto importante de destacar, es que si bien Chile alcanza en el aérea de Lenguaje (pese a su situación crítica), mejores resultados que otros países de América Latina, esto se debe a que los alumnos suelen responder acertadamente las preguntas cerradas de elección múltiple. Sin embargo, en las preguntas abiertas sus resultados están por debajo del promedio Latino Americano, demostrando un manejo más pobre del léxico, y baja comprensión de los textos.

Poca comprensión de textos, inequidad interna, sostenedores que abren y cierran colegios cuando quieren. Hace rato que en Chile algo anda mal (pero muy mal). No es algo nuevo los reclamos incesantes de los estudiantes de la Educación superior que piden alternativas gratuitas y de calidad, no es novedoso ver cientos de colegios secundarios en toma. Ya no es un olor extraño, el de las lacrimógenas, que en pleno día silencian los reclamos más jóvenes y “pingüinos”.
La clase política Chilena ya fracaso en el 2006 mostrando una Reforma al sistema. Los intentos de negociación, y de cambio de formato ya se hicieron y fracasaros. Entonces, ¿Qué hacer? ¿De qué manera se puede cambiar la Educación en Chile?. Bueno, la respuesta no la tiene claramente el parlamento Chileno. Y la solución no está en la institucionalidad actual, e imperante. La solución a este eterno debate está en la conformación de alternativas democráticas y amplias, en el cambio de fondo de la Educación. Como muchos pedimos, en una Asamblea Constituyente que cambie el modelo económico, social y político; por uno nuevo que sea más “sano”, para reproducción en nuestras aulas de clases.

Sí, no creo que la Concertación sea un partido ni siquiera de centroizquierda, pero habiendo contado con un candidato verdaderamente progre como Ominami, bueno, vos sabrás decirme por qué se inclinaron por un ex presidente con no muy buena imagen…