Quiere hacerlo fanático a la fuerza
Un padre ató a su hijo con cinta para obligarlo a ver el juego de Packers vs. SeahawksAP
Actualizado: 17 de enero de 2008, 3:54 PM ET
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PORTAGE, Wisconsin – Luego de que su hijo de 7 años no quiso ponerse un jersey verde de los Packers durante el partido de postemporada que Green Bay ganó el sábado pasado, un hombre mantuvo atado al menor con cinta adhesiva, que también utilizó para pegarle la prenda al cuerpo.
AP
Hay amores que generan apego
Matthew Kowland recibió un citatorio para comparecer ante las autoridades por conducta desordenada, en relación con el incidente del fin de semana con su hijo, en la población de Pardeeville, Wisconsin, dijo el teniente Wayne Smith, del Departamento del Alguacil del condado de Columbia.
Kowald, de 36 años, fue detenido el lunes, después de que su esposa informó a las autoridades sobre el incidente. Se le llevó a la cárcel del condado, donde permaneció hasta el miércoles, día en que pagó una multa de 186 dólares y fue liberado.
La esposa de Kowald solicitó el miércoles una orden de alejamiento. Kowald no podrá tener contacto con su familia, dijo Smith, quien añadió que habían trascendido otros problemas familiares, sin dar detalles.
El niño se negó a vestir el jersey cuando los Packers vencieron a los Seattle Seahawks en el partido de la ronda de Comodines, según detalló Smith, quien añadió que la madre tomó fotografías del incidente con su teléfono celular.
Kowald, entrevistado el miércoles por el diario Portage Daily Register, dijo que el hecho comenzó como una broma. Su hijo lo desafió y le dijo que no apoyaría a los Packers. Cuando lo ató, el menor se reía, mientras su esposa tomaba las fotos, relató.
“Luego, él no pudo desatarse, se angustió y eso fue todo. Duró un minuto”, agregó Kowald. “No quise causarle daño y él lo sabe, pero no he podido decírselo”.
Jane Kohlwey, fiscal de distrito, dijo que no había evidencias suficientes para sustentar cargos por un delito grave.
“No me parece bien lo que él hizo, pero legalmente, un padre puede controlar el movimiento de un niño”, argumentó la fiscal. “No tengo pruebas de que haya habido daño emocional… Tengo que acatar la ley”.
