Ariel Arnaldo Ortega 🐎- Coordinador Infanto/Juvenil

Avisen cuando haya link del partido completo.

Yo colaboro con:

//youtu.be/AfNgbMa1-B8

Yo me descargue los videos de aca La Previa y Partido Completo: Despedida de Ariel Ortega | Videos de River para tenerlos pero …

están un toque desfasados :expressionless:

gracias sivori x ese link, esperemos alguno q suba todo completo y con calidad.

Los q lo compraron, q onda el suple Olé de Ariel? Yo me levanté a las 4 de la tarde =)

Colobaro con este video, apra q queda para siempre en este th para cuando dentro de un tiempo lo abra para emocionarme:

//youtu.be/heAeBnbLxDM

alguien tiene el video del gol que se erra H.Diaz??

Doler? jajajaja, ayer no me cagaba el dia NADA. Y la ovacion a gallardo no me dolio ni mucho menos, me parecio exagerada como me tiene acostumbrado ya la gente.
Lo ovacionaban como si fuera el Enzo, increible.

Vos pensá cómo te hubieras sentido si estabas en un recital que se trasmite por tele, re manija, y resulta que como se termina el tiempo en medio de una canción sale el locutor a decir “bueno, me alegro de que hayan pasado una linda tarde”. Y listo: ni acá se termina todo, ni adiós, ni nada…

Este thread debería pasar a “Historia” luego de unos días acá?

Desde la SM media lo veía en la TV y toda la caminata previa de Ariel con música fue genial, cuando salió a la cancha venías ya re manija para moquear por toda esa caminata filmada.

Yo estaba en la centenario alta y el audio era una garcha, se escuchaba para el orto lo que decían por micrófono.

Enviado utilizando la aplicación móvil de tuRiver

Que bronca el audio y video que habia por favor, no se entendio nada, me dio una bronca. Que dirigencia de mierda que tenemos

Cosas que no me gustaron:

El audio, eso que en la sivori baja zafaba escuché comentarios de otros lados que estuvo mal.
Los cantos pro-borrachos del tablon
Los cantos anti bolivia-paraguay
La ovación a algunos ex
Los silbídos a Saviola

Me gustó mucho que se haya remarcado tanto que es el último gran ídolo de River Plate (almayda chupate una buena pija)
Y bueno, la fiesta que fue.

Era la primera vez que veía el Monumental repleto de hinchas de River (las 2 anteriores fueron para Argentina-España y para el recital de Paul McCartney).

Burro sos lo más grande que existe.

El último gran héroe…Escrito por: Alejandro Viudez | Fecha: 14-07-2013

Ortega se despidió del fútbol con la camiseta que mejor le quedó a lo largo de su carrera. La emblemática “10” con la banda roja que cruza el alma deberá hacer su propio duelo, como también cada uno de los afortunados contemporáneos que conocieron la magia de la mano –más bien de los pies- de Ariel.
El Burro debutó en River en diciembre de 1991 y antes de brindar con su familia a fin de año ya había dado su primera vuelta olímpica. Otros tiempos, otro River. Como si el destino le hubiera guiñado el ojo, Ariel creció en un equipo multicampeón. Su aparición estelar en primera, pronto generó una relación simbiótica con esa década dorada. Los triunfos y los grandes nombres que lo rodearon le dieron un ecosistema ideal para lucirse. Y él, asimismo, le aportó al club ese toque de distinción digno de alguien forjado en la mejor cantera del mundo.

La magia, el quiebre de cintura made in Ledesma, la pausa seguida de un arranque vertiginoso para volver atrás y gambetear de vuelta y una habilidad circense en su pie derecho encajaron a la perfección en el paladar de una hinchada de inquebrantable romance con el buen fútbol. Porque más allá de las infinitas gambetas y los goles importantes, el Burrito es sinónimo de Paladar Negro y actor principal de la hoy tan lejana Triple G.
Al título primerizo del ´91 le siguieron los también Apertura del ´93 –aquel que terminó de jugarse al año siguiente-, ´94 y ´96.
En 1994 empezó a dar señales de que lo suyo iba a ser eterno. Durante el Clausura de ese mismo año, River visitó la Bombonera buscando salir triunfante en territorio hostil luego de ocho años. A pesar de que el partido no definía nada desde lo estadístico, Ariel le dio un paseo de novela al rival de siempre y el Colorado Mac Allister fue el villano de turno que lo sufrió. ¿Conclusión? El defensor de Boca no fue al Mundial de Estados Unidos y Ortega se ganó sorpresivamente un lugar. Y, principalmente, gracias a un gol suyo River abrió el camino hacia el tan anhelado éxito.
Meses más tarde, el Burro volvió a deleitar al pueblo riverplatense en un derbi. En la antesala, junto con Francescoli lideraron futbolísticamente al único River campeón invicto. Otra vez ante Boca, resumieron en un partido lo que ese equipo fue en todo el torneo: jerarquía, buen fútbol, calidad individual y colectiva, contundencia y temple para jugar clásicos. Las mismas características se le pueden atribuir a Ortega. Aquel 3 a 0 lapidario y su estocada en el arco de Casa Amarilla fueron una daga para Boca y la llave al corazón millonario.

En la selección nacional tuvo momentos de alto vuelo. Le tocó reemplazar a Maradona en el Mundial de Estados Unidos, fue el eje del equipo en Francia ´98 y participó también de Corea/Japón 2002. Su cuenta pendiente, como la de toda aquella excelente generación, fueron los títulos. La medalla plateada olímpica en Atlanta y el oro panamericano en Mar del Plata fueron sus únicos logros con la celeste y blanca. Lo mejor de él, se lo dio a River.
En 1996 tocó el cielo con las manos. Gracias a su fútbol y a un equipo con fuego sagrado, la Banda levantó su segunda y hasta hoy última Libertadores. Su explosivo desborde en el amanecer de la revancha ante América de Cali y su presión contra Córdoba en el segundo tiempo fueron factores necesarios para los goles de la consagración marcados por Crespo. En diciembre, contra la Juve, un remate suyo puso al Millonario al borde del momento más feliz de su historia… pero el travesaño, el azar, Dios y el destino no quisieron que River gane su segundo título del mundo.
Al año siguiente, llegó el turno de su primer “hasta pronto”. Tanto potrero junto llamó la atención del Valencia y en el ´97 jugó su último partido con la banda roja frente a Boca en Mar del Plata. Tanto pisarle la pelota a Toresani, generó un codazo cobarde del Huevo que Giménez no advirtió y terminó por echar al Burro ante la protesta. Gracias a esa roja, no pudo estar en las primeras fechas del Clausura –oficialmente es parte del logro- que desembocaría en el bicampeonato del River de Ramón.

En España debutó con doblete ante el Sevilla. Sin embargo, su tensa relación con el italiano Claudio Ranieri –tampoco quería mucho a Romario- lo obligó a mudarse a Sampdoria sin dejar una huella en el equipo Che.
En la Samp, dejó inmortalizado un tanto de antología frente al Inter picándole la pelota a Gianluca Pagliuca –todavía debe estar preguntándose cómo hizo Ariel. Luego de finalizada la temporada, pasó en 1999 a Parma, donde consiguió su único logro en el viejo continente –Supercopa italiana ante Milan.
La vuelta a River en 2000 revolucionó el mercado. Formó parte de los Cuatro Fantásticos junto a Aimar, Saviola y Ángel. Ese equipo tuvo todo para quedar en la historia, pero el poco tiempo que duró –menos de seis meses- y la falta de mentalidad ganadora y juego ofensivo del Tolo Gallego transformaron el sueño de un nuevo tricampeonato en un segundo puesto dolorosísimo detrás del Boca de Bianchi.

En su nueva faceta de emblema, sumó dos nuevos subcampeonatos en 2001 –San Lorenzo y Racing, los verdugos-, pero al año siguiente los planetas volvieron a alinearse. La presencia de Ramón en el banco y la consolidación de D´Alessandro y Cavenaghi –además de Cambiasso y Coudet- provocaron un nuevo 3-0 en La Boca y un título de punta a punta. A lo River. La inminencia del Mundial 2002 no permitió que Ortega esté presente en las últimas dos fechas.

Al término de la tragedia de Japón, lo esperaba el Fenerbahçe turco. Pero Ariel duró poco en la parte asiática de Estambul. La falta de adaptación lo obligó a tomar su peor decisión: vuelta a Argentina incumpliendo su contrato. La Fifa lo suspendió y Ortega dijo: “Hasta acá llegué, me retiro”. Mientras la gente de River movía cielo y tierra juntando firmas para enviar a Zúrich, Aguilar e Israel se mostraban incapaces para destrabar la situación. El adiós parecía definitivo.

Pero apareció Newell´s. El polémico Eduardo López negoció con los turcos y Ortega fue habilitado por Fifa. ¿El precio? El exilio forzado a Rosario. Lejos de River, el Chango guió a la Lepra rumbo a la obtención del Apertura 2004. Cuando Belluschi, Marino o un joven Scocco dudaban, Ariel se ponía la mochila.
La vuelta a casa se hizo esperar demasiado. En 2006 llegó la hora. Pero River era otro. Y Ariel empezaba a serlo también. Las improvisaciones generaron que recién en el Clausura 2008 hubiera vuelta olímpica. Jugando de a ratos y con su problema de alcoholismo a cuestas, Ortega seguía salvando a River.
Corriendo de atrás a Estudiantes, la Banda necesitaba vencer a Huracán en Núñez. El Globo era muy superior y fallaba goles. El Millo iba sin ideas, hasta que entró él. Uno, dos, tres en el camino, pase a Buonanotte y gol. Siete días más tarde el replay de la misma película. Match durísimo en el Cementerio de los Elefantes. Habían echado por una irresponsabilidad al ídolo de las nuevas generaciones –Ponzio-, pero Ortega se rebeló al destino, vio luz en el túnel y cuchareó una pelota genial entre líneas para que Villagra abra el camino al título.

El día de la consagración fue el dueño del Monumental. Cada pelota pasó por él. Cuando se venía la noche tras el empate de Olimpo, el Mago de Ledesma habilitó a Buonanotte para el gol del último campeonato ganado.

A pesar de su edad, Copperfield seguía apareciendo en cada momento cumbre que se interponía entre River y la felicidad.
Las decisiones de los Simeone, Aguilar, Passarella and company lo obligaron a marcharse una y otra vez. Independiente Rivadavia primero, un último paso por River en medio –vaselina al Everton en Canadá incluida- y luego All Boys y Defensores de Belgrano. Por esos pagos no fue el mismo. Su edad y sus problemas se lo impedían. Sólo la motivación de vestir la Banda podía sacarle chispazos de su fútbol.
Mientras tanto River y Ortega se hundían. Uno en el promedio y el otro en sus problemas personales. Era 2011 y la relación de ambos seguía siendo simbiótica –veinte años después. Ariel quería ser feliz y despedirse con su camiseta. Y el Millo necesitaba alguien que absorba la presión cuando la pelota quemaba en las siete fechas finales del Clausura y en el purgatorio ante Belgrano.
De haber estado, Ortega hubiera salvado una vez más a River.
Ayer se despidió. El adiós es definitivo para su gambeta, su quiebre de cintura, sus goles importantes y sus títulos. Pero su recuerdo y la felicidad de haberlo visto son eternos, hasta el final de nuestras vidas…

La verdad es que sentí mucha emoción toda la tarde, bah hace días venía emocionada con el homenaje.
Traté de abstraerme de todo lo que pudiera estar “mal”, imaginé que la mujer del productor alguna ingerencia iba a tener y por ende ese baile ridículo. En la Centenario como siempre hubo más gente de lo que la capacidad lo permite, para los que fuimos temprano a ubicarnos que un par de pajeritos flashando barras se te ponga adelante y no quiera correrse fue muy incómodo.
Es lo criticable para mi…
Organice quién organice, un espectáculo que involucre semejante magnitud es casi imposible que salga bien al 100%. Con lo cual me dejo llevar por los sentimientos.

La verdad que me sorpredio este gesto de los bosteros…

Es muy fuerte cuando todo el estadio ovaciona al Enzo al grito de “uruguayo uruguayo”. Se me pone la piel de gallina de solo recordarlo. La gente nunca se cansa del Enzo. De aca a 15 años la gente le va a tener el mismo o más cariño.

Que lindo es tener idolos así.

Tengo una pregunta, que decía la bandera que colgaron en la centenario, esa especie de barras?

donde hay fotos de la despedida? mas especificamente del chach8

Es que con 50 años te das cuenta que en lo futbolístico esta muchos escalones arriba que el resto (incluso que Ortega). La verdad que es increíble el nivel q tiene

---------- Mensaje unificado a las 23:02 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 22:56 ----------

Claramente el “show” fue pésimo. A quien carajo le importan 10 boludas bailando? Es Fútbol esto. Faltaban 10 min pa que arranque y pretendían que nos interese esta gilada.

Bah, en realidad pusieron estas 3 pagas ( el baile, la mosca y calamares caminando ) para hacer como que se hizo un show que nunca existió!! Goycochea 0 tacto, el tipo en un momento pedía a la gente que se callé para pasar el video, flaco espera 2 minutos y después lo pasas!

Después la despedida en sí era imposible que saliera mal!

---------- Mensaje unificado a las 23:21 ---------- El mensaje anterior habia sido a las 23:02 ----------

Fuera de joda acá todos dicen que llorarn ( hasta desde la casa, q ni en pedo lo vivís igual q en la cancha) y en el sector q estaba yo solo una persona lloro. Yo me emocione pero la vdad que no llore.

Che y Aimar por que no fue? Estaba contando petrodolares y no tenia tiempo? O tenia miedo que entrara al pais y lo agarre la afip para pesificar unos verdes?

Che recien me avive, me surgio una pregunta, que hubiese pasado si iba Maradona al Monumental? :lol:, tranquilamente podría haber ido, siempre lo banco al burrito.