Un River que indigna y no acepta la dura realidad
LEO FARINELLA | lfarinella@ole.com.ar
¡Qué mierda están haciendo, viejo! ¡Son una vergüenza! ¡Ninguno de ustedes merece jugar en River! ¿Alguno tiene una idea, carajo, de lo que es River? ¿Alguna vez vieron un partido? ¿Saben lo que significa esta camiseta? ¡Cagones! ¡Eso es lo que son! ¿Qué les pasa? ¡Si juegan así el ST, después del partido los peleo a todos, uno por uno! ¡Y ni vengan a entrenar! ¡No los quiero ver más por el club!
Estas y otras consideraciones de similar contenido habrían formado parte del sermón de entretiempo en otra época de mi vida. Una época más dura, más sanguínea y tal vez menos especulativa. Hoy, incluso en el fragor de la batalla, de vez en cuando uno puede detenerse a pensar qué gano y qué pierdo cuando digo lo que pienso con todas las letras. Y en esa reflexión, se modera el discurso, una soberana cagada a pedos muta en un intento de aliento, se apuesta a domar con una caricia a la criatura que se portó mal para que se porte mejor. No sé qué dijo el Negro Astrada, si ya los tiene al plato o si se sigue bancando entero este sufrimiento que llegó para quedarse. La cuestión es que River fue otro en el ST y rápido, casi eléctricamente, se dispara la primera conclusión: ¿quién es el valiente que piensa que River está para regalar algo? ¿Por qué otra vez salimos dormidos en el PT? Es difícil de entender. La entrada de Gallardo le dio la claridad y la vergüenza deportiva que le faltaba al equipo. No es que fuimos una tromba, pero por lo menos tiramos a la cancha un poco de dignidad. Empatamos casi en la última jugada pero lo merecimos antes. El empate es muy valioso, sobre todo porque Gimnasia es un rival directo en la tabla de los promedios. Hay hinchas de River que todavía no quieren creer la situación que vivimos. Ojo, todo en su medida. Tragedia es lo que pasó en Chile. Pero en River es una especie de cimbronazo, un sacudón al Monumental, no late, tiembla en este caso, por la sola mención del tema descenso. Nadie quiere ver la realidad, como el enfermo que se está yendo y quiere aferrarse a la mentira de un médico piadoso. Pero señores, pónganse los pantalones largos: River está peleando por no irse a la B. Hay que ver quién se banca esa pelea.
medio tarde te diste cuenta no???
Sos impresentable, vos hablando de vergüenza? hace tiempo la perdiste!
Un River que indigna y no acepta la dura realidad
LEO FARINELLA | lfarinella@ole.com.ar
¡Qué mierda están haciendo, viejo! ¡Son una vergüenza! ¡Ninguno de ustedes merece jugar en River! ¿Alguno tiene una idea, carajo, de lo que es River? ¿Alguna vez vieron un partido? ¿Saben lo que significa esta camiseta? ¡Cagones! ¡Eso es lo que son! ¿Qué les pasa? ¡Si juegan así el ST, después del partido los peleo a todos, uno por uno! ¡Y ni vengan a entrenar! ¡No los quiero ver más por el club!
Estas y otras consideraciones de similar contenido habrían formado parte del sermón de entretiempo en otra época de mi vida. Una época más dura, más sanguínea y tal vez menos especulativa. Hoy, incluso en el fragor de la batalla, de vez en cuando uno puede detenerse a pensar qué gano y qué pierdo cuando digo lo que pienso con todas las letras. Y en esa reflexión, se modera el discurso, una soberana cagada a pedos muta en un intento de aliento, se apuesta a domar con una caricia a la criatura que se portó mal para que se porte mejor. No sé qué dijo el Negro Astrada, si ya los tiene al plato o si se sigue bancando entero este sufrimiento que llegó para quedarse. La cuestión es que River fue otro en el ST y rápido, casi eléctricamente, se dispara la primera conclusión: ¿quién es el valiente que piensa que River está para regalar algo? ¿Por qué otra vez salimos dormidos en el PT? Es difícil de entender. La entrada de Gallardo le dio la claridad y la vergüenza deportiva que le faltaba al equipo. No es que fuimos una tromba, pero por lo menos tiramos a la cancha un poco de dignidad. Empatamos casi en la última jugada pero lo merecimos antes. El empate es muy valioso, sobre todo porque Gimnasia es un rival directo en la tabla de los promedios. Hay hinchas de River que todavía no quieren creer la situación que vivimos. Ojo, todo en su medida. Tragedia es lo que pasó en Chile. Pero en River es una especie de cimbronazo, un sacudón al Monumental, no late, tiembla en este caso, por la sola mención del tema descenso. Nadie quiere ver la realidad, como el enfermo que se está yendo y quiere aferrarse a la mentira de un médico piadoso. Pero señores, pónganse los pantalones largos: River está peleando por no irse a la B. Hay que ver quién se banca esa pelea.
medio tarde te diste cuenta no???
Sos impresentable, vos hablando de vergüenza? hace tiempo la perdiste!
Impresentable este payaso. Debe ser de los que hasta hace 3 fechas estaba posteando ¡Ehhh, déjense de joder con eso del promedio, me tienen las bolas llenas, River nunca se va a ir a la B, no sean bosteros, ésto es River y tiene que pelear campeonato!!!
Si no putea, porque no putea. Si putea, porque putea. Banquemos un toque, estamos medios sensibles. No es fácil exponer lo que uno piensa CON TODAS LAS LETRAS en un papel público. El tipo lo tenia que decir, y lo dijo.
El discurso de FArinella no va dirigido a los que sabemos de esto hace rato, va dirigido al resto de ilusos que piensan que seguimos siendo el más grande y que cada torneo podemos pelear por ganarlo o entrar a alguna copa…
No lo dijo antes? Bueno, más vale tarde que nunca…no es un tipo que me caiga bien, pero lo que dice es cierto. Así que saquemos lo positivo de eso y es que estas cosas lleguen a quien deben llegar.
Prefiero esto al silencio.
Todavía hay muchos ilusos que piensan que River es el que siempre fue…que por lo menos se enojen al leer estas cosas.