AL MARGEN DEL CHOREO HISTORICO, HURACÁN NO SUPO SER HURACAN

A Huracán le anularon un gol, claro, legítimo, a poco de iniciado el juego. Era casi decisivo, le hubiera dado tal vez total tranquilidad a Huracán para agarrar confianza, e imponer como casi siempre su juego. Tal vez…
A Vélez no le dieron un segundo penal, pero antes ya le habian dado y habían errado otro.
Y el “gol” que les regaló el título fue alevoso. Lo de Brazenas ayer ya está en la historia mas negra del ya muy negro fútbol argentino. Fue tan alevoso, que los hinchas de Velez al terminar el partido corrían a abrazarlo. No solo no dió la clara falta, sino que encima con el arquero que quedó tendido en el piso sin poder ni siquiera levantarse para recuperar la pelota, dejó seguir el juego hasta que le llegó a Morales que estaba totalmente fuera de la jugada y que ni tendría que estar tampoco jugando por la trompada que había pegado un rato antes a plena vista del árbitro en el área de Huracán ya estando amonestado, y que aprovechó entonces la otra ventaja de ya no tener ni tampoco arquero que se le oponga.
Pero al margen nada menos que de todo lo groseramente decisivo anterior, hubo también un partido. Y ese partido Huracán ayer no lo supo jugar. Por varios motivos. No técnicos ni físicos, sino psicológicos, filosóficos y táctico-estratégicos.
Huracán salió con su original dibujo táctico de árbol de navidad o pirámide. 4-3-2-1. El problema es que la filosofía de juego de Huracán es el juego asociado y generalmente por abajo. Y más si encima psicologicamente por una cuestión humana mas que táctica, como el empate alcanzaba las proyecciones tan vitales para el éxito de ese dibujo en ataque de los laterales, o el desenganche vacío de la primera línea de los 3 volantes para la tenencia de la pelota y la progresión en ataque… brillaron por su ausencia.
¿Entonces que pasaba? Como Huracán no lo sorprendió tácticamente a Vélez y le jugó “casi” a lo mismo de siempre, Vélez entonces trató de no dejarlo salir libre a Bolatti, que con su gran categoría lo hizo varias veces igual, pero sobre todo les tapó a presión con un casi doble 5 a sus dos enganches ayer Pastore y De Federico, que además jugaron casi todo el partido con sus piernas cambiadas y por lo tanto con problemas de perfil para poder habilitar al que les quedó como su única referencia arriba el grandote torpe de Nietto, ante la falta de progresión ofensiva de sus laterales.
Y ese tal vez fue su mayor problema ayer, además del árbitro claro. Además que sus asistidores estaban invertidos con las piernas cambiadas para hacerlo, Nietto no solo no les sirve para imponer la filosofía ni estrategia de juego por abajo de Huracán, sino que además la perjudica. No sirve para jugar de pivot a espaldas para descargarles a los que vienen de atrás. Tampoco sirve para contragolpear porque no tiene velocidad, ni pique corto para arrastrar marcas. Lo de él es la búsqueda de arriba en el área, justo lo que no hizo nunca ayer Huracán, y encima en la única pelota que le cayó solo en el área chica, su torpeza de pies se la entregó mansa a las manos del arquero rival cuando tenía 7 metros libres para meterla.
O sea hubo una gran contradicción entre la filosofía de juego que hizo de Huracán la sensación en este campeonato, y más allá del dibujo táctico que algunos tildaron de conservador ayer, la elección de su único referente de “ataque”. Claramente desde el vamos la opción debió ser el venezolano integrante de su Selección que tiene otra ductilidad y le dá mucha mas movilidad y posibilidad de armado y descarga alternativa, a la estética propuesta de juego de su equipo. Salvando las distancias, me hizo acordar mucho a la torpeza de Serginho arriba, tratando en su torpeza de sintonizar con la filosfía y el armado en el medio juego de los Falcao, Cerezo, Sócrates y Zico del fabuloso medio juego de Brasil 82.
Porque el problema que está sufriendo hace tiempo el retorno a nuestra identidad histórica del fútbol argentino tanto con Menotti, Valdano o ahora Cappa, me parece que es ese. La acertada defensa de lo estético y filosófico por el control de la tenencia de pelota y el juego asociado, no puede despreciar las cuestiones táctico-estratégicas ni su coherencia con aquella filosofía. No es una cosa o la otra, son las dos. Como tenía tan claro si, el refundador de la identidad futbolistica de Brasil el legendario Joao Saldanha.
¿Y entonces que hizo Vélez además de concentrarse en bloquearle e interrumpirle el famoso circuito de juego central de Hurácán, que a lo sumo se les terminaba en ese embudo del grandote de pies torpes? Una vez que lo lograba le salía rápido por afuera. Le jugó el pártido en defensa por adentro y el partido en ataque por afuera, con los 2 laterales yendo mucho con o sin pelota, si total Huracán desde luego no tenía wines, ni al menos dos puntas, ni tampoco carrileros. Y Cubero y Zapata abiertos se les sumaban a ellos además de Maxi Morales, sabiendo que a Bolatti al igual que Marangoni no le gusta salir a los laterales, para hacerle a Huracán superioridad numérica por los costados de la cancha, al mejor estilo del Ferro de Griguol sobre todo por el lado de Papa.
Al menos Vélez a diferencia de Huracán, si llegaba por lo menos por afuera entonces hasta los 3/4. Pero todo moría ahí, pues Gareca también se equivocó de 9 para el partido de ayer, al que estaba a punto ponerlo recién cuando Brazenas les regaló el “gol”. Las constantes progresiones por los laterales de Vélez ayer, lo tenían al gigante Nani sentado en el banco con su cabezasos en el área. O sea Huracán jugó con el 9 que tenía que haber jugado Vélez y viceversa.
Por eso no llegaron casi nunca. De las 3 llegadas de Huracán en todo el primer tiempo, 2 incluida el gol mal anulado fueron de pelota parada y la otra de una contra de De Federico con pierna cambiada usándolos a sus compañeros por derecha para definir muy mal. Y en el segundo solo 2 contras mal resueltas por Pastore y De Federico. Poco, muy poco para este Huracán. Y lo de Vélez en ataque por las razones ya apuntadas fué también igual de pobre.
Hasta que se los definió Brazenas.
Después de todo a los Tigres de Viamonte… ¿que les hace una mancha mas?