Si bien es un tema por demás interesante y con aristas varias, es muy cierto que para varios de nosotros que no hemos vivido en dicha época nos es tan fácil opinar.
Ahora bien, Argentina no estaba exento de lo que pasaba en Latinoamérica y en el Mundo con revoluciones, asunciones de gobiernos socialistas, lo cual influía en buena parte de su población, y esto de por sí molestaba y mucho al Imperio, que de por sí fue el particípe a través de Administraciones Republicanas de apoyar regímenes Militares, cuyos líderes se habían formado en la nefasta Escuela de las Américas.
Como conclusiones que he sacado de esa época:
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Jamás una persona seria y responsable puede apoyar subvertir el orden constitucional, con la ideología que fuere.
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Un militar que se jacta de tener un espiritú sanmartiniano no puede ser un Vendepatria, y entregar económicamente el país y ser sérvil a los intereses del Primer mundo.
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Los métodos utilizados por organizaciones como el ERP y Montoneros eran totalmente desacertados y por eso llevaron a no tener el masivo apoyo de la Sociedad, que en su mayoría condenaba su accionar.
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Y esto lo digo por un militar y un guerrillero, UNA PERSONA QUE DEBE EMPUÑAR UN ARMA PARA IMPONER UNA IDEA, ES PORQUÉ SABE QUE ES UNA IDEA INCONSISTENTE.
Saludos.