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“Andate vos Aguilar, un pedido que en realidad es una plegaria”
El desempeño de José María Aguilar como Presidente de River Plate sigue dando que hablar (mal). A continuación, la opinión de un lector de Urgente24, quien considera que se trata de un "castigo bíblico".
| 10/11/2008 | 12:51
“ANDATE VOS AGUILAR. Ya hiciste demasiado daño”-
Es el rezo cívico de todos los que tenemos una banda roja que nos cruza el alma. No es una propuesta. No es una protesta. Es apenas el pedido íntimo de los que nada podemos hacer, más que invocar a los dioses con esta plegaria que nace de la más profunda frustración. Una plegaria que deberíamos repetir cada día y a cada momento para terminar con este castigo bíblico.
A la mañana, cuando llevamos los chicos al colegio después del "buenos días", decir “¡ANDATE AGUILAR”, y por lo bajo repetir: "Ya hiciste demasiado daño". En el gimnasio, en la caja del supermercado, en la cola del colectivo. En la sala de espera del consultorio médico: “ANDATE AGUILAR”, debería ser la consigna que repitamos. Aunque el otro se sorprenda y nos mire con incredulidad. Y, por supuesto, cuando
se saluden dos hinchas millonarios, las primeras palabras deberían ser, sin duda: “ANDATE AGUILAR”.
Al llegar a nuestros trabajos, cada puesto debería ser un lugar para esta lucha pacífica, ingenua si se quiere. Los cajeros de banco, los arbolitos de las casas de cambio, las secretarias, los taxistas, los encargados de edificios, los periodistas, los locutores. Los telemarketers, los dentistas, los cirujanos en el quirófano, los guías
de turismo, los mecánicos, los profesores y los alumnos, los actores, los conserjes de hotel, los comandantes de aerolíneas, deberían tratar de colar entre frase y frase, la consigna liberadora: "¡ANDATE AGUILAR¡" Los chimenteros de la tele, las maestras jardinera al cantar las canciones infantiles, los bartenders al servir la copa del día.
Los mozos al traer la cuenta, los policías al pedir documentos. Los inspectores de la DGI, Los funcionarios de aduana. Los diputados y senadores entre debate y debate. Los jueces en las sentencias, los fiscales en la apelaciones: Todos deberían colaborar tratando de interponer entre líneas las palabras mágicas: “¡ANDATE AGUILAR ¡”
Cuando estemos haciendo el amor con nuestras esposas, novias, amantes, en ese momento sublime, decir (bajito): “¡ANDATE AGUILAR ¡” Cientos y cientos de rezos cívicos elevados a los dioses de la justicia divina. En la montaña, en la playa, en el campo, en la ciudad. Hasta en la base Marambio. Miles y miles de plegarias a los largo y ancho del mundo (por internet también son válidas). Y por supuesto llenando las canchas donde sea, sin insultar, simplemente mostrando un pequeño
cartelito con las dos letras: “A-A”.
No será cuestión de pocos días. Probablemente la lucha sea larga, porque el queso es muy grande y la cara muy dura. Pero, en una de esas funciona. Los milagros pasan, justamente, cuando nadie piensa que pueden pasar. Por eso se llaman milagros.
[b]Gloc99[/b